CAPITULO 4

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Eran las 3:57 de la madrugada, Raquel se levantó por que escucho un ruido en la balcón, era afortunada por tener balcón amplio en su cuarto y encontró una nota.
HOLA NENA O DEBERIA DECIR (QUEL).
ESPERO QUE HAYAS TENIDO, UNA FELIZ FIESTA DE CUMPLEAÑOS
Y QUE TE GUSTE MI REGALO ;), NO TENGO SUEÑO Y AL DEJARTE ESTA CARTA
HARE EL RUIDO, QUE SEA NECESARIO PARA LEVANTARTE Y QUE BAJES A HABLAR CON MIGO SI QUIERES ¿NO? , NO TE PUEDO OBLIGAR PERO SI ESTARIA ENCANTADO.
Al leer esto a Raquel casi le da un infarto, no lo podía creer, se recogió el cabello con una cola, se puso un chal caliente y las primeros zapatos que encontró, salió con mucho cuidado de su habitación, bajo las escaleras con tanto cuidado como pudo, camino hacia la puerta y la abrió muy despacio y la mugrosa puerta chirrió, espero un momento que alguno de sus padres se levantara, pero no se levantó ninguno, agradeció y salió de su casa feliz de que había logrado salir camino sobre el jardín de su casa y corrió a la esquina, el problema era que no sabía cuál esquina era pero decidió ir a las dos esquinas comenzó a correr hacia la izquierda y al llegar a la esquina, miro por todos los lados y no encontró nada se iba a devolver cuando por detrás dijeron :
- buUuUu.- Raquel se sobre salto y Dann comenzó a reír. – jajajaja no lo puedo creer creíste que era un fantasma.- Y seguía riéndose.
- No me hace gracia.- Dijo Raquel. – además no me asuste solo.- Busco una excusa. – tenia frio y me sobresalte.
- Si claro y los cerdos vuelan.- Dijo riéndose.
- Solo tienes que dejar de ser así, y me comenzaras a caer un poco mejor.- Dijo disgustada. – además creí que me necesitabas por eso vine.
- Jaja yo no te necesito, creí que tú me necesitabas, pronunciabas mi nombre mientras dormías.- Y le giño el ojo, Raquel moría de la vergüenza no podía creerlo.
- ¡cómo es posible que me espíes! Dijo gritando. – debes al menos respetar mi privacidad.
- Ya te dije que es mi trabajo.- Y se sentó en el andén. – y lo disfruto.
- Disfrutas espiar a las personas normales.- Ni ella misma podía creer que la palabra normal existiera en su vocabulario.- ¿qué tipo de maniático eres?
- Oye eso no se vale solo disfruto espiarte.- Oye eso no se vale solo disfruto espiarte a ti.- Y soltó una carcajada. – bueno solo quería hacer algo malo y fuera de la ley, y decidí llamarte, creo que puedo confiar en ti.
- ¿Te resulto confiable? Pues algo me dice que tu no.- Pero en el fondo decía que ¡SI! y que deseaba besar sus labios rojos.
- Eso es porque no me conoces, cuando me conozcas te enamoraras de mí, vamos siéntate aquí.- Y le señalo una parte del andén.- no puedes ser siempre así, o no te contare nada sobre tu caso y mi trabajo, a si y lo que eres.- A Raquel le Dio risa.
- ¿Cómo puedes estar siempre tan convencido?- Y se sentó a su lado.- ¿sabes? mi madre te teme a muerte.
- Yo igual.- Y levanto las manos. – solo trato de superar todo lo malo que he hecho, además quien no le teme a tu mama, ella y tu padre eran los miembros de él clan de los mágicos, eran los más poderosos, que el mundo haya visto.- Observo como Raquel lo miraba con la boca abierta. – wow, espera, ¿tú no sabías nada sobre tus padres verdad?
- No.- Dijo en tono secante.- no tenía idea.- Y miro sus manos que le temblaban.
- Tus padres obtuvieron un permiso, para vivir como seres humanos normales, el clan de los mágicos, nunca se convenció total mente de haber tomado una buena decisión, pero nunca dijeron nada, el día de tu cumpleaños algo cambio, algo ya no era igual y se asustaron y me mandaron a vigilarte, si me preguntas que cambio para que ellos se asustaran.- Respiro.- NO SE, no me dijeron nada.
- ¿No sospechas de nada?- Dijo Raquel
- No, pero si me parece curioso de que alguien esté molestando a tu familia.- Se movió un poco.- recuerdas cuando me dijiste que alguien entro a tu chátara.-Raquel asintió con la cabeza. – ese día fue cuando comencé a seguirte y lo vi, también vi a alguien entrar al cuarto de tu hermano y utilizaba un truco mental con él, lo saque por la fuerza pero escapo.
- ¿qué? lo dijo preocupada. – no lo puedo creer, pobre de mi hermano.
- No es culpa tuya, es de tus padres que te escondieron algo importante. La preocupación ahora es encontrar quien podría estar dispuesto a atacarlos y averiguar porque.
- AMELIA ROSES, AMELIA ROSES, ¿la conoces?- el muchacho se sobresaltó al escuchar ese nombre como si le dará mala espina.
- Si, ella era también era miembro del clan de los mágicos, según la historia siempre fue la mejor amiga de maría ósea tu madre, Amelia vivía en Inglaterra y al ver mudarse a tu madre se vino con ella; pero decían que al llegar aquí se obsesiono con el poder y la plata y se casó con un codicioso líder del clan con dinero, y tuvieron un hijo, dicen que el clan la castigo y le impuso una enfermedad maligna al niño para que ella lo viera morir.- Paro un momento y se acomodó el cabello.- dicen que ella dejo a su hijo en la capital en un lugar escondido y regreso. creen que su padre consiguió la cura y encontró su hijo donde se escaparon, mientras Amelia está en la cárcel de Inglaterra pagando por tantos asesinatos, que supuestamente hizo para darle de beber sangre a su hijo. para que resistiera mientras su padre lo encontraba, otros dicen que el niño fue asesinado por su madre al  verse desesperada, ¿pero qué tiene que ver ella con todo esto?
- Cuando era niña vi a "Amelia Roses "vivía cerca de nuestra casa, solo la vi una vez pero esa vez se llevaban a Amelia para un manicomio.- Recordó aquel momento tan horrible  y siguió.- después de muchos, Muchos años lo olvide, y encontré algo el día de mi cumpleaños, con el nombre de la mujer, desde ese momento algo me atormenta, creí al principio que eras tú, pero algo me dices que no.
- Ósea que confías en mí.- Rio.- si vez te lo dije nadie se resiste a un pan recién salido del horno. 
- Yo no creería eso.- Dijo Raquel.- pienso que esa cosa quien quiera que sea quiere esto.-Y le paso la carta, en la tomo y comenzó a leerla, en el fondo sabía que estaba mal no lo conocía como le podía confiar, la  evidencia más grande que tendría.
Al terminarla de leer la miro a los ojos y le movió las cejas
- Creo que el verdadero ladrón no  busca esto, tal vez tenga que ver con Amelia, pero esto  no es lo que busca.- Lo dijo muy convencido.
- ¿Cómo lo sabes?
- No es nada contundente, ''que quiere el ladrón leer una carta de amor, donde explica a su esposa el motivo de su demora y bobobobu''  lo dijo en voz burlona.- bueno los acosadores también duermen, no he dormido desde hace 2 días,  crees que podrías prestarme tu cama?
- No, ni en sueños, como crees, no conoces en nada a mis padres ¿verdad?
- Solo en leyendas. -dijo esto y levanto la ceja.-ok pagare un hotel, pero mientras no estoy vigilándote quiero que tomes nota de todo lo que haces y me lo envíes; ahora tu estas a cargo de vigilarte hasta mañana en la tarde.- Y se puso de pie estirándole la mano a Raquel para que se levantara, Raquel se sonrojó , se rio y dijo:
-  Si pasa algo y necesito contactarte ¿cómo lo hago?
-  No has revisado el regalo que te di ¿verdad?, solo revísalo y sabrás.- Raquel le tomo la mano y se levantó.
Él se despidió sacudiendo la mano y ella igual. Abrió la puerta y entro a su casa muy despacio cerró la puerta y subió las escaleras rápido, luego entro en su habitación la  cerro reviso su bolso y saco el espejo que le había regalado  Dann, lo toco y parecía agua y algo adentro parecía revolverse  y Dann apareció en el otro lado estaba sin camisa lo que hiso que Raquel se ruborizada.
- Que te paso ¿estás bien? - dijo Dann
- Si.- dijo Raquel
- Wow me despertaste solo para que pudieras verme, quedamos que solo emergencias, ok nena.- Y colgó.
Raquel sintió mucha rabia por dentro, pero igual ella lo había despertado así que no le tomo importancia y se acostó adormir.
Durmió hasta las 10 am, ya que recibió una llamada de su algo inquietante amiga lisa, hablaron durante casi 30 minutos, tenía hambre incontrolable bajo y giro a la izquierda  donde quedaba la cocina, donde su madre estaba haciendo huevos revueltos paso y le dio un beso en la frente, su madre sonrió y dijo: 
- ¿Pasaste buena noche?- Dijo su madre.
- Si, MA' gracias.- Abrió el refrigerador y saco la leche se dirigió gabinete  tomo un vaso y la sirvio. – por cierto mami no has vuelto a ver a tus amigos del clan.- Al decir esto su madre quedo paralizada sin decir ni una palabra, Raquel no sabía que era la clan de los mágicos precisamente, pero tenía que hacerse la experta para sacar más información.
- ¿De qué hablas Quel?- Dijo su madre que al mover el sartén se salpico con aceite la mano he hizo un gesto de dolor.
- No. pensé que tú sabrías muy bien.- Y sacudió su cabeza.
- Cielo no hay nada en serio.
- MA' porque te molesta que hable de esto ¿delante de mi papa? si él es igual a ti, es más  apuesto  que él me dirá más cosas.- Y se tomó el vaso de leche dejo el vaso sin lavar  y salió de la cocina.
- Raquel ¡PARA! ¿Porque eres así con migo?- Y María empezó a llorar.- estoy cansada todos me pregunten tú, tu hermano y tu padre, estoy cansada de que hablen de eso todo el tiempo, tu padre no se puede enterar de esto.
- Bueno, mama tranquilízate.- con un tono más dulce y tranquilizador.
- Lo siento.- Dijo su madre
- No MA' yo debo disculparme, estoy tan obsesionada con la verdad, que me vuelvo algo grosera.- Dijo Raquel.
- Tal vez, debería mostrarte algo.- dijo su madre.- vamos Raquel.- Raquel la siguió pasaron por la sala, dirigiéndose al estudio, saco unas llaves de su bolsillo abrió la puerta del estudio, al entrar camino hacia el cuadro que tenía un paisaje de los años 60, María levanto el cuadro y puso su mano contra la pared, la pared se abrió y Raquel se impresiono, como podía vivir en una casa durante 18 años y nunca darse cuenta de eso, se abrió una puerta en la pared maría saco otra  llave y una puerta se deslizaba desde arriba, por ultimo maría puso su dedo índice en un escáner que se encontraba en el centro de la puerta  y se abrió un ascensor; las dos subieron, Raquel no se despegaba de su madre ni dejaba de mirar cada detalle que hacía.
María apretó el botón de bajada al sótano; pensó Raquel "¿teníamos un sótano?" bajaron  en el ascensor y al llegar al sótano pito, no se abrieron las puertas hasta que María pronuncio una palabra de seguridad al micrófono del ascensor y luego se abrieron las puertas, Raquel observaba sorprendida la habitación blanca llena de armas, monstros disecados y una foto  al fondo de su madre y su padre juntos, se acercó al cuadro deslumbrada por todo su alrededor y toco la pintura del cuadro observo a sus padres con precaución y vio que sus atuendos eran muy diferentes a los que lucían hoy en día, su madre  dijo algo desde el otro lado de la habitación, pero Raquel no le escucho así que decidió acercarse más a su madre, cuando estuvo cerca  dio una vuelta rápida y su falda se sacudió junto a ella:
- Es maravilloso.- Dijo Raquel entusiasmada.
- Pero no sabes lo peligroso que es.- dijo su madre.- por culpa de esto casi los pierdo a todos, a ti, a tu padre y tu hermanito que estaba en camino.
Raquel no dijo nada y se dedicó a escuchar a su madre que se metía en su historia, llena de dolor.
- Cuando naciste habían muchas fuerzas que amenazaban matarte, por que fuiste la única miembro del clan de los mágicos, que nació de dos verdaderos hijos de la luz y no murió en el parto, naturalmente dos hijos de la luz no pueden concebir hijos por lo cual es necesario la intervención de un humano hombre o mujer que sirva de un segundo tercer progenitor.- suspiro un momento.- el clan de los mágicos es una organización de hechiceros la cual permite una estabilidad con la naturaleza, no solo poseemos magia, como lo explica su mismo nombre, si no que poseemos otra atribuciones debemos controlar que la naturaleza no se salga de su rumbo, yo debía proteger a los humanos de lo oscuro; el clan es  la máxima autoridad, ella define si te castigan o no, haber tenido un hijo como tu era un riesgo para ellos, nos tenían que castigar, Pero en este caso se compadecieron de tu padre y de mí y por supuesto tu mi bebe.- sus ojos se nublaron.- nos dieron la oportunidad de ser una familia normal, una familia humana, con dos dolorosas condiciones. Borrar la memoria de todos, y no tener nunca más otro hijo, y funciono.- se limpió las lágrimas de los ojos con su mano.- todo completamente todo lo olvidamos, menos el terrible temor, horror y asco que nos producía tener otro hijo, Amelia, amaba no obedecer reglas y siempre juro protegerme.- se acercó a un sofá color gris, se sentó, Raquel corrió y se acomodó a su lado.- su hijo se enfermó por mi culpa.- y lloro con más intensidad.- por mi culpa Quel. Ella me enseño toda otra vez, me devolvió mi memoria y la esperanza y a cambio destroce su vida.
- Mama tranquila si no quieres seguir con esto no pasa nada; ¿sí?- ya había obtenido mucha información de su madre y resultaba muy mal verla llorar.
- Lo siento cariño pero tu padre no sabe nada de esto, cree que somos una familia normal que vive en Ibagué, pero no es así.- tocio un poco y siguió.- Tenemos que tener mucho cuidado él no se debe enterar de nada, cuando ya pueda seguir contándote todo, te llamare y tendrás todo lo que quieras saber. Te lo prometo.
- Bueno, mami, te entiendo y no quiero que te sientas mal, por mi culpa.
Salieron tomando nuevamente el ascensor, su madre apretando botones, claves, etc., que a Raquel la mareaba tanto secreto. Cuando al fin llegaron al estudio, su hermanito menor estaba jugando con unos carritos y vio a su madre y su hermana salir de la pared, grito tan fuerte que su padre corrió al encuentro, ¡no! Pensó Raquel. Su madre se apresuró a  cerrar la pared y poner el cuadro en su lugar, al terminar de dejarlo todo como si nada, se abalanzo sobre cristhofer abrazándolo, tranquilizándolo y diciéndole que su padre no podía enterarse por nada del mundo le quedaron unos pocos segundos para desahitarse, mientras Raquel se quedaba paralizada en el mismo sitio donde  quedo, su padre entro al estudio preocupado al verlos a los tres reunidos pregunto.
- ¿Qué ha pasado aquí? - pregunto Frank angustiado.
- ¿debería pasar algo?- pregunto María a su esposo, tratando de poner su rostro más apacible.- amor he hablado con los niños y creo que esta  noche deberíamos ir a salir.- al decir esto sonrió.
- ¿ no tienes que trabajar hoy?- pregunto Frank arrugando su frente.- Como todos los días estas ocupada solo pensaba.- Termino de decir esto y se rasco la cabeza.
María ignoro lo dicho por Frank y dijo:
- No hay nada más que hablar. Nos vamos a cine esta noche.- les dijo a Raquel y a cristhofer que la miraron como si no entendieran nada. 
Salieron todos del estudio, Raquel y  cristhofer  subieron mientras que sus padres se quedaron en el primer piso discutiendo.
Raquel como siempre se iba a encerrar en su habitación, es más ya tenía pensado quedarse dormida toda la tarde, pero se detuvo al ver a su hermano caminar hacia su cuarto como si fuera una persona sin pensamientos, vacío, como si tuviera una orden en su cerebro de llegar a su cuarto y quedarse dormido, Raquel corrió  a ver a cristhofer más de cerca y dijo:
- ¿Cris?- lo toco por la espalda.- ¿estás bien?- pero cristhofer no le contesto y entro a su habitación aventándole la puerta por la cara a Raquel.- salió corriendo por el pasillo, estaba bajando las escaleras tan rápido que sin pensarlo rodo. 
Sus padres al escuchar el ruido corrieron a ayudarla; su padre la alzo, fueron por el auto y conduccierón tan rápido al hospital más cercano  su madre aparco el vehículo a la entrada de emergencia y Frank salió del auto con ella en su hombro entraron a urgencias del hospital, al momento su madre entro y escribió a su hija, esperaron unos 30 minutos a que por fin el medico la atendiera. Le vendaron la cabeza y le enyesaron la pierna derecha, al final del procedimiento Raquel despertó; al ver a su mama recostada al lado de la camilla dijo:
- Que me paso ¿mamá?- levanto la cabeza haciendo un gesto de dolor.  
- Caíste de las escaleras, cielo.- Dijo su madre sobándole la cabeza.- creo que tendremos que cambiar cuarto, ya que no podrás subir escaleras por una semana.- sonrió.
- ¡Mama! ¡no! ¿dónde está Cris? - Dijo casi gritando.
- Cálmate, cariño es cierto dejamos a Cris solo cuando vinimos al hospital, pero no le paso nada gracias a Dios, tu padre está en casa ahora con él y está bien.- dijo tratando de calmar a su hija.
- Mama Cris estaba raro no actúa como es el.- respiro un segundo.- mama, no es el. 
María parpadeo un momento y se quedó inmóvil volteo a mirar a su hija y dijo.
- ¿Cómo tenía sus ojos cuando lo viste?- pregunto su madre muy preocupada.
- Rojos, mama. -Dijo Raquel. Su madre tomo su bolso y salió de la habitación de Raquel sin decir una palabra de más.

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