Un secreto por descubrir

CAPITULO 8

No es malo.-comento lisa.-creo que estas desarrollando tus poderes, según lo que  me has contado ayer, tú eres una verdadera hija de la luz.- raquel miraba fijamente a lisa y le prestaba mucha atención a lo que hablaba.- sabemos que los que son hijos de la luz comunes, poseen poderes también como la magia, ¿no?, imagínate tú que posees el doble- en ese momento llego julio.
Julio llevaba una camiseta verde oscura, ninguno de las chicas se había detenido a mirarlo, un pantalón negro y sus ojos llevaban algunas lagañas. Raquel se tocó sus ojos pensando que ella también podría tenerlas, pues se acababa de despertar.
- Buenos días.- soltó julio con una grandiosa sonrisa, lisa miraba a julio un poco preocupada.- ¿de qué hablan lindas chicas?- raquel no podía creer que julio sonara tan amable, ¿algo llevarían con lisa?, el siguiente movimiento fue, lisa se levantara y lo empujara hacia el fondo, sus presentimientos no estaban tan mal después de  todo, le alegraba que sus dos mejores amigos estuvieran juntos.
- Julio te advertí que este no es el momento, no puedes llegar así por así a confundir y dañar las cosas.- dijo lisa furiosa y nerviosa.
- No hice nada.-dijo julio muy molesto.- solo les pregunte que hacían, y es mi decisión y es mi vida, así que yo elijo cuando decirle lo que tengo que decirle.
- Decirle que.- dijo Carla que al parecer salía del baño.
- Nada.- dijo lisa y se fue al asiento cerca de su amiga.
Carla miraba fijamente a julio.
- Oh, Julián te decidiste por fin, te vas a declarar.- se tapaba la boca con una mano.
- Mi nombre es julio no Julián, y eso a ti no te importa, a nadie le importa ni siquiera a lisa.- comenzó a avanzar por el pasillo y tomo un asiento, dejando sola a Carla que seguía burlándose de él.
Carla avanzo hasta de nuevo entrar a la cabina, era insoportable el ambiente allí atrás, todo el mundo estaba estresado y ella no tenía muchos amigos.
- Danni.- hablo carla rompiendo la ensoñación y concentración que llevaba dann.- ¿ya has pedido permiso para aterrizar?
- Si.-contesto dann.- hace un momento hable con los encargados de la pista de aterrizaje en nueva york.- dann se sobo los ojos, como si cargara con mucho sueño.- que a la madrugada de mañana estaremos llegando a nueva york, la ciudad de las luces.- finalizo dann.
- Tratare de dormir, para remplazarte a las 4 de la tarde o antes que te vez muy cansado.- Carla se acostó en la silla del copiloto y en un segundo se quedó dormida.
Raquel, por fin vio a lisa dormida, el tiempo pasaba muy rápido, recordaba aquel despertar, y todo lo dicho por lisa. Le parecía absurdo que ella tuviera algún tipo de poder, pues siempre se creyó más que normal, algo inútil para todo lo que hacía, ya que nunca lo terminaba. Levanto su cabeza para mirar las otras sillas esperando ver a julio despierto para tener compañía, además tendría que preguntarle que se traía con lisa, no tardo en verlo en el último asiento, se veía algo molesto así que raquel se levantó y se encamino a hablar con él.
- No he tenido mucho tiempo para hablar contigo.- dijo raquel, lo que al parecer a julio sorprendió.
- Quel, no he tenido las palabras para dirigirme bien a ti después de cómo te trate.- no era capaz de mirarla a los ojos.- siento vergüenza.
- Ya hemos hablado de eso julio, eres mi mejor amigo ¿Cómo no podría perdonarte?- julio pareció sonreír.- además, tenías todas las razones para estar enojado.
- Sea lo que sea, nunca podría estar mal contigo. NUNCA.
- Estas aquí con migo ¿te parece poco?, dejar tu vida por mí.
- Dejaría más que solo mi vida.- raquel se sorprendió y quiso cambiar raídamente de tema.
- Julio, te he visto muy cercano a lisa, algo ha cambiado ¿quieres decirme?- pregunto raquel con voz burlona.
- No, nada ha cambiado es solo que antes por temor he callado ahora, no le temo a nada.- lisa salió de la nada y lo interrumpió.
- Chicos.- lo dijo casi gritando.- Carla me dice que en la alacena del jet hay latas con comida.- inmediatamente raquel se levantó.
- Gracias, creía que me iba a morir de hambre.-  se fue. Lisa se acercó a julio y dijo.
- Julio, siempre he sabido que eres un imprudente pero no sabía a qué punto.- lo decía en tono regañador.- si no hubiera llegado, te le hubieras declarado y no podría sobrellevar un viaje sin regreso con un corazón roto.
- ¿de qué hablas lisa? ¿ya le dijiste a raquel?- lisa recordó que no podía ser tan cruel y mucho menos cuando se trata de sentimientos, además era su amigo.
- No.- solo dijo eso.
- ¿entonces que podría salir mal?, además hay que parar eso, raquel piensa que tú y yo tenemos algo.- julio rio.- es lo que menos quiero que ella piense.
- Lose, si me dieras más tiempo te lo juro julio que podría llegar a arreglarlo.- julio asintió lo que fue suficiente para que lisa se tranquilizara.
Lisa y julio salieron a buscar latas de comida en la alacena, vieron a raquel con dos latas vacías a su alrededor y con otra en su mano comiéndola, era normal ya que su última comida fue huevos revueltos bastante salados, al ver llegar a sus amigos se limpió la boca con su mano y sonrió, mostrando restos de comida en sus dientes.
- Quel, eso es asqueroso.- dijo lisa.
- Delicioso.- dijo raquel aunque no se le entendía muy bien por lo que masticaba comida en su boca; julio se puso a reír.
- Jummm, malos modales.- dijo una voz que estremeció a raquel, una voz muy masculina  cargada de sinfonía y melodiosidad; "Dann".
Raquel  ni los otros chicos contestaron aquel comentario, mal intencionado de dann.
- Solo vengo por comida.- soltó dann.- agarro unas latas de sopa y agua, y se fue, en ese tiempo dann se parecía más alejado de lo que solía ser el siempre.
- Se me olvidaba, que Carla también me conto que a la madrugada de mañana llegaremos a new york, donde nos quedaremos "UN DIA ENTERO" ¿pueden creer lo feliz que estoy chicos?- dijo lisa muy emocionada
- Lo veo.- contesto raquel tan distraía, pues aparte de lo que había dicho dann de él no se mole stó en mirarla un solo segundo, pareciera que estuviera hablando con lisa y julio, recordaba cuando se tomó aquel frasco azul, y le había dicho que le gustaba mucho y otras cosas que no quería recordar pues era obvio que a ella le gustaba el, lo que no sabía si el sentía lo mismo que al parecer era un no, al momento que raquel se comenzó a enojar, las palmas de sus manos se enrojecieron y el suelo del jet comenzó a temblar.
- ¡RAQUEL!- grito lisa.- ¡RAQUEL, CIELO TE ENCUENTRAS BIEN!- más que todos julio estaba aterrorizado, cada nada se persignaba y empezaba a orar, el avión se iba cayendo en pique.
- Raquel comunícame por tus pensamientos con migo.- lisa volteo a ver a julio y se exaspero.- julio ayúdame a desconcentrarla.- julio pareció reaccionar y fue al encuentro con lisa.- julio háblale sobre lo que sientes.
- ¿Qué? ¿crees que es el mejor momento?-lisa lo miro mal y julio comenzó a hablar
En la cabina dann y Carla pensaban que no había nada que hacer no sabía específicamente que es lo que tenía el avión, pero no había mucho tiempo "era el fin", dann se levantó para para despedirse y tal vez pedir perdón, se dirigió a ellos y vio a julio diciéndole cosas a raquel, cosas que lo derrumbaron.
- Te amo, siempre lo he hecho raquel.- raquel comenzó a parpadear y sus manos dejaron de enrojecerse un poco.
- Nomm.
- Si, raquel si mírame.- ahora raquel movía su cabeza.
- Nomm.
- Es suficiente julio.-dijo lisa.- raquel comunícate por tus pensamientos con migo.- lisa comenzó a temblar y el avión volvió a coger vuelo. Y lisa se derrumbó a los pies de raquel, tan frágil como una muñeca de trapo.
Julio no sabía que hacer lisa inmóvil en el suelo y raquel con sus ojos en blanco  y se elevaba más allá del suelo, algo que  hace un día lo habría atemorizado, pero ahora esa su momento de protegerlas.
Enseguida llego dann pero julio no le permitía que él se acercara a sus amigas.
- No me interesa julio necesitan ayuda.- gritaba dann.- pase lo que pase las ayudare.-amenazo a julio
- Pasa por encima de mí.-  contestó su amenaza julio, pero en aquel momento raquel dejo de flotar y cayó al suelo inconsciente, en ese momento se pudo acercar dann y julio dejo de protestar.
Lo primero, que hizo dann fue recoger a raquel y atenderla, revisaba sus signos vitales y demás. Julio recogió a lisa y la puso en un asiento atrás de donde se encontraba raquel; por fortuna las dos estaban vivas pero ya llevaban cuatro horas y ninguna de las dos despertaba, en tres horas llegarían a new york, Carla no había puesto problema por manejar unas horas de más el jet, pues entendía perfectamente la situación, tenía miedo de los poderes de raquel pues había llegado a dañar levemente algunos motores del avión, afortunadamente estaban cerca de new york, de lo contrario no podrían llegar, estaba enterada de todo y se preocupaba por que gran parte que se iniciara el vuelo fue raquel y si estaba en un trance hacia la muerte lo más probable era que no se pudiera alzar de nuevo y fallarían, gracias  la pobre chica que estaba inconsciente y ella tampoco creía que se recuperara, ella y dann estaban vivos.
- Esperemos que raquel reaccione antes de que lleguemos a new york.- dann le hablaba a julio.- si no lo hace la llevare donde los curadores de la luz, haya sabrán que hacer.
- Y lisa.- dijo julio.
- Lisa, déjamela ver.- julio se apartó para que dann pudiera avanzar, se acercó comenzó a recitar unas frases. De su mano derecha comienza a salir una luz azul y puso su mano en la frente de la chica, luego de unos segundos la aparto.- lisa está congelada por la magia de raquel, la única que la puede descongelar es raquel o u una poción que se encuentra en todos los cementerios.
- ¿Cuántos cementerios se pueden encontrar en new york?
- Más de lo que te imaginas.- soltó dann y se sentó al lado del cuerpo inerte de raquel.
El tiempo se hacía más lento, los segundos eran horas y las horas días, así lo pensaba dann aunque desde la ventana ya se comenzaban a verse las luces resplandecientes de new york se levantó para ayudarle a Carla aterrizar, ya que aún poseía problemas, recordaba que la última vez que Carla había aterrizado un avión las alas se despegaron y casi mueren todos los pasajeros.
-  ¿necesitas ayuda?
- Si.- y rio Carla.- aun no lo superas verdad.
- Tal vez ahora tengamos a dos chicas importantes, inconscientes que deban ser salvadas no es más.- Carla le codeo y salió de la cabina.
Ella tendría que ver como seguía raquel y su amiga, se encamino y al verlas sintió pena, debía ser terrible para una chica ser una bomba, cual tiene dos opciones desarmarla o explotar. Hay estaba julio algo antipático desgarbado y llevaba dos días con la misma ropa como todos menos ella que se había cambiado esa mañana; decidió no acercarse y sentarse mientras dann aterrizaba, el jet comenzó a descender y dann lo aterrizo con elegancia y rapidez, Carla se preocupó por la reacción que tendría dann ya que raquel no despertó y eso se significaba que algo andaba mal con ella y su magia.
Dann salió de la cabina abrió las puertas, se fue rápidamente deseando que raquel estuviera despierta, pero no hay estaba ella inconsciente, debían ir a los curadores de la luz.
- No despertó.- dijo Carla que salió detrás de él.
- Hay que llevarla con los curadores ellos la despertaran.- contesto dann.- su poder es muy fuerte.
- Es una bomba.
- ¿Qué?- contesto dann y julio al mismo tiempo.
- Tiene dos opciones desactivarla o explotar.- Carla señalo a raquel.- está consumiendo a su amiga.
- No es así ella nunca haría algo así.- dijo julio sobresaltado.
- No es cuestión de ella Julián es de la magia los hijos de la luz nacen de un humano y un hijo de la luz por una razón.- Carla tenía que decir esas palabras para que dann también las escuchara.- necesitan consumir poder, para la magia, necesitamos una fuente de energía que salga de nosotros mismos; ella no tiene energía propia, ella busca la energía de otros.- los dos chicos estaban callados julio no tuvo fuerzas ni siquiera para corregirle el nombre a Carla; dann estaba callado apoyando sus manos contra la silla donde estaba raquel.
- Hay que llevarla antes que acabe con lisa.-finalizo la conversación dann.- pero no todo es así Carla, no existen hijos de la luz originales por que no se pueden procrear.
Dann llevaba a raquel en sus brazos y julio llevaba a lisa, adelante iba Carla muy elegante buscando un taxi a las 6 de la mañana en new york, hora pico todas las personas salen a trabajar; necesitaban llegar a casa de Víctor el hermano de Carla, que por el momento estaba hospedándose en new york, Víctor era un  casanova un excelente hijo de la luz, al cual no le gustaba recibir órdenes, era solo él y el mundo tendría que esperar.
Julio no tenía tiempo de visualizar el paisaje que él no conocía antes, solo le preocupaban sus amigas y que tendría que confiar en ellos, pues no tenía otra opción, Carla movió sus manos y una luz verde salió de ellas, cual hizo parar un vehículo particular; julio se sorprendió al ver que el dueño al parecer se bajó sin protesta y le entrego las llaves, Carla entro al auto y les hizo señas para que avanzaran dann tomo el asiento delantero por lo que julio tendría que irse atrás; cuando ya todos estaban dentro del vehículo julio dijo.
- Robaste el vehículo.-algo asustado.
- Mi querido Julián.- contesto Carla.- elemental.
- ¿Le hiciste algo malo?
- Le sonreí.- contesto alegre Carla.- un favor.
Carla conocía muy bien new york pues sus padres eran de nacionalidad estadounidense y venían de vacaciones todos los veranos a visitar a su abuela paterna que para la fecha ya estaba muerta, Víctor heredo la casa, y era una buen lugar para vivir, en new york donde todo es tan ruidoso, activo y caro.
Después de 1 hora de tráfico pesado lograron llegar a casa de Víctor, elegante formidable y aparecer  muy costosa, para julio todo ese lujo era imposible y al verlo con sus propios ojos casi se derrumbaba, lo único que lo mantenía en pie era el hecho de proteger a sus amigas, Carla aparco el auto  salió rápidamente rigiéndose a abrazar a un tipo alto, acuerpado con los mismos ojos verdes que poseía Carla, se encontraban en la entrada donde había una gran puerta negra que llegaba hasta el techo. Dann estaba muy callado y a julio tampoco le importaba iniciar una conversación con él, solo quería que encontrara una cura prontamente, volteo a mirar a Carla de nuevo y venia de regreso con su hermano aparecer, llegaron rápidamente y ella le abrió las puertas del auto para que el pudiera detallar a las dos enfermas, antes de que él se fijarse en ellas saludo muy calurosamente a dann, su asentó parecía inglés; luego si miro a las chicas y se sorprendió diciendo:
- Oh, pobrecillas.- lo dijo preocupado.- ¿es complicado verdad? ¿las van a incinerar?
- No están muertas.- dijo dann disgustado.
- Lo siento, carlota no especifico.
- Necesitamos que nos consigas una cita con los curadores de la luz.
- Eso si me lo había explicado Carla, pensé que sería un asunto de disfunción, si no es así podrían durar años para una cita, de aquí a eso ya habrían muerto, enserio.- y le pico el ojo a dann que enseguida entendió que para obtener una cita instantánea era fingir una muerte.- el problema es que los curadores de luz solo aceptan hijos de la luz dann, ella no aparece precisamente uno.
- Ella es más que eso.-dijo dann.- es una original.
- Es imposible.- se tapó la boca con la mano.- dicen que los poderes de ella pueden.- interrumpió Carla. 
- Pero no los tendrá completos, si no tiene de quien alimentarse.- contesta, que venía caminando desde atrás.
- Se consumirá ella misma y morirá.- dijo dann.- ¡definitivamente no.¡
- Y que acabe con el mundo.- dijo Carla.- gran idea.
- Por eso es que vamos donde los curadores.- termino Dann.