the revenge of the stars

lluvia de estrellas

Ya habían pasado tres largos años desde el último verano que visitaron gravity falls, los gemelos cambiaron mucho en ese entonces tanto en pensamientos como en su físico, Mabel había dejado de tratar de conseguir un novio y tenía más ansias de adentrarse en el mundo del arte junto con un look más moderno pero conservando su ternura, por otro lado, Dipper era un joven maduro con su típica ropa que llevaba siempre en las vacaciones, a acepción de la gorra que intercambio con Wendy, y que se centraba en sus estudios y en pasar todo el tiempo de calidad posible con su familia antes de ir a una universidad.

-dip, ¿cómo crees que estén todos? ¿Los tíos ya regresarían de su viaje? ¿Y si se olvidaron de nosotros?-pregunto Mabel con una sonrisa nerviosa.

-es imposible que se olviden de nosotros, somos los gemelos misterio más locos que seguramente han conocido-respondió el gemelo haciendo una pose de orgullo que hizo dar una risita a su hermana- no te preocupes, todo saldrá bien- sonrió y miro con cariño a su hermana.

-si lo dice el nerd es porque es verdad- dijo ella mientras le daba un golpe en el hombro a Dipper algo molesto mientras se ría con ella,- te quiero dipdip.

Los dos subieron en la estación de autobús junto con sus maletas y Pato, la mascota de Mabel, y se sentaron a observar el panorama buscando con la mirada aquel letrero que tanto extrañaban ver con las inscripciones ''bienvenido a gravity falls''.

La cabaña del misterio estaba decorada de pies a cabeza con serpentinas, globos, bocadillos en la mesa y un gran letrero a la entrada que decía ''bienvenidos de vuelta''. Todos se habían esforzado mucho en hacerlo, tanto los amigos humanos como místicos de los chicos, a decir verdad todos los extrañaban y querían volver a verlos pronto, y ese día seria el momento, Wendy, Soos, y los centauros estaban a la entrada de la cabaña esperando a los gemelos pero los más emocionados eran Stanley y Stanford. Ambos estaban desde las cuatro de la mañana esperando a sus sobrinos, prepararon cuartos como ellos pensaron que sería apropiado, Stanford la de Mabel y Stanley la de Dipper, cada una adaptada a la mentalidad de un niño de 12 años, cocinaron e inclusive Stanford gasto dinero para la fiesta, un milagro un auténtico milagro.

-¡oh vamos! Ya cálmense y dejen todas esas cosas- exigió Wendy en un tono tranquilo- nadie va a atacarlos para que traigan eso- añadió señalando sus armas. Los dios dieron un suspiro y obedecieron, ella tenía razón se estaban preocupando en exceso. –hací me gusta señores, buenos chicos ancianos- dijo ella. Todos rieron por aquel comentario.

Treinta minutos después llego el autobús dejando a los dos jóvenes enfrente de ellos, todos los miraban como niños anonadados un juguete nuevo, uno que pensaban interrogar.

-emmmm, ¿hola?- dijo Mabel algo incomoda y con una sonrisa que mostraba los dientes sin los frenillos. Eso solo hizo que Soos se desmallara en brazos de su esposa Melody.

-........¡bienvenidos!-gritaron todos al unísono y los abrazaron, excepto los centauros por su hombría, Soos por su desmayo y los Stans que no salían de su asombró al ver tan diferentes a los gemelos.

Después de eso todos entraron y festejaron a lo grande, Mabel con sus amigas Candy, Grenda, Wendy e incluso Pacifica y Gideon que había venido de improvisto y se disculpó por su comportamiento del verano pasado. Dipper había estado todo el tiempo con si tío hablando de las místicas criaturas y del estado de la estatua del triángulo.

-¿seguro que no hay amenaza?-dijo el chico mirando a su tío mientras bebía una soda.

-por enésima vez, si-respondió el mayor algo irritado por la pregunta- oye, porque no vas con tu hermana a ver las estrellas, ¿no quieres pasar algo de tiempo con ella?- busco pretexto para que lo dejara de hostigar un momento.

-tienes razón, ¡le fascinara!- dijo Dipper y corrió a buscar a su hermana. El hombre sonrió victorioso por su gran hazaña.

Dipper encontró a Mabel en el tejado, algo que considero oportuno pues ya no tendría que llevarla hay.-¡hey Mabs!, ¿que tal la fiesta?- pregunto animado.

Mabel dio un suspiro- es increíble, pero, siento que algo va a pasar-retiro la vista de él y observo el cielo.

-¡vamos! Es una gran experiencia volver y ¿sabes? Tal vez esta vez consigas novio- declamo Dipper con una cara algo burlona.

-si claro, jajajaja- ella estalló en risa.

-¡mira!-el joven señalo el cielo. Su gemela miro y quedo anonadada por lo que veía.

Varias estrellas fugaces caían en una ''lluvia de estrellas'' que iluminaban el cielo nocturno atravesando el bosque.

-tienes razón......todo irá bien-ambos dieron una amplia sonrisa y entraron a la casa, o sin antes pedir un deseo: una nueva y emocionante aventura.

De pronto un temblor leve e imperceptible para todos se dio, uno que marcaría el destino de todo el pueblo, una estrella había caído. El deseo se cumplió.

Más allá, en las profundidades del boque, se encontraba la estatuilla maltratada y deteriorada del demonio Bills, aquel que había atormentado y torturado personas y que nunca volvería a atormentar a nadie............................................la figura de piedra se estaba quebrando tras ese leve sismo, dejaba ver el amarillo resplandeciente en las grietas y escuchar la sínica y macabra voz del capturado. -las estrellas realmente cumplen deseos- se escuchó seguido de sínicas y alocadas risas.

mi primera historia ;w;!!!!! *da reverencias* arigato arigato por leer!!!! publicare los fines de semana (viernes, sábado o domingo) serán los días clave nwn. empezare a hacer dibujos para esta historia para no usar imágenes de otros creadores *se siente inferior por los bellos y grandiosos dibujos que su historia no merese tener* TvT