Epilogo

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Advertencia: Lemon

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Epilogo

Una semana luego de que habían realizado su viaje, Chikara y Ryuu habían oficializado su relación. Ahora un mes después se encontraban en una situación muy similar a la del viaje, Tanaka algo borracho atacando al pelinegro pero había algo distinto esta vez, Ennoshita correspondía con entusiasmo los besos y toques del mayor, acariciaba los marcados abdominales de este extasiado al saber finalmente como se sentían. Ryuu por el contrario se fue por la parte trasera del otro cuerpo, aferrando sus manos a los glúteos del pelinegro provocando que indecentes sonidos se escaparan de su boca.

La ropa de ambos fue desapareciendo en cuanto a el contacto se hacía más profundo, primero sus miembros se rozaban a través de la tela de su ropa interior, para luego tocarse sin ninguna restricción. Tanaka aprovechaba para reconocer otras partes del delgado cuerpo junto a él, sus hombros, pezones y caderas fueron su mayor entretención al momento de recorrer con manos y boca.

Ennoshita estaba impresionado, había leído y sus amigos no-vírgenes, entiéndase Nishinoya y Suga-mama, porque Hinata y Yamaguchi se habían puesto como unas fresas maduras con tan solo la insinuación de la pregunta, le habían contado sobre la experiencia pero esto... esto era más de lo que había imaginado. Ryuunosuke se apartó un poco, para sorpresa y molestia del pelinegro, buscando algo entre sus cajones, victorioso sacó una botella de lubricante y una caja de condones.

- Bue... bueno Noya-san me contó que estuviste preguntando sobre esto... Así que decidí pedirle concejos de cómo hacerlo de la mejor manera...- se rascó la nuca nervioso, Ennoshita se sonrojó al verse descubierto.- Si hago algo mal no dudes en decírmelo.

El pelinegro asintió de manera afirmativa y se dejó a merced del mayor, confiaba plenamente en él. Sabía que Tanaka no era virgen, que lo había hecho con una chica en primer año, pero también sabía que se sentía inseguro porque era su primera vez con un hombre. Se afirmó del cuello de su novio, dándoles más cercanía.

- Está bien, procede.- dijo con toda seguridad. Fue preparado con delicadeza, una muy extraña en Tanaka pero fue apreciada, pues si bien estaba seguro de lo que quería no dejaba de ser incómodo. Ryuu algo nervioso por la incomodidad en los ojos de Chikara buscó con sus dedos ese lugar del que Noya le había hablado, toda su preocupación se esfumó cuando el pelinegro gimió alto y se arqueó debajo de su cuerpo. – Ta... Tanaka... pue... puedes meterlo... – jadeó avergonzado.- ¡ngh!- se quejó cuando sintió el vacío en su interior; levantó la mirada y se encontró con su novio listo para ingresar en él, vio como cubría con más lubricante su entrada. Ryuunosuke comenzó a profanar la cavidad con todo el cuidado del mundo esperando a que el menor se acostumbrara. Chikara movió sus caderas de forma que el otro entendiera que podía moverse, al ver la preocupación de su novio por hacerle daño el pelinegro se aferró con sus piernas a la cadera del mayor haciendo el contacto más profundo, obligando a Tanaka a seguir sus instintos y dar profundas estocadas al cuerpo del más bajo.

En busca de más contacto, Tanaka sujetó por la espalda al pelinegro para enderezarlo y, aun sin salir de su interior, dejarlo sentado en su erección, siguió controlando el ritmo afirmando con una mano la cadera de Ennoshita, mientras que con la otra atendía la dureza de su acompañante. Se dio cuenta que en esa posición le era mucho más fácil llegar al punto dulce del menor, por lo que este no tardo en comenzar a soltar incoherencias y fuertes jadeos, se corrió en un fuerte gemido aferrándose a los hombros de Ryuu y apretando aún más el agarre a sus caderas. Tanaka al sentir el apretado interior de Chikara no pudo evitar correrse también.

Esperaron un momento a que sus respiraciones volvieran a ser regulares para que el mayor saliera de su interior, se quitara y anudara el condón, una vez estuvo eso hecho tomo unos pañuelos de su velador y limpió al pelinegro. Se abrazaron para proceder a dormir, cuando Ennoshita fue traicionado nuevamente por su subconsciente.

- Te amo, Ryuu.- dijo para luego avergonzarse. El nombrado abrió los ojos con sorpresa para luego sonreír.

- Yo también te amo, Chikara...- beso el cabello oscuro de su novio el cual escondía su rostro del mayor.- Ten dulces sueños.

- Tu... tú también... - levanto su cara del escondite, besó la mejilla de su novio y se volteó dándole la espalda a Tanaka, este solo aprovechó para rodear su cintura. Quedándose ambos dormidos así.

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Creí que estos dos se merecían su Lemon (͠≖ ͜ʖ͠≖)👌

Viaje por PlacerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora