7 de Enero, 2018. Madrid
Karol SevillaSegundo día de la gira, todas mis emociones estaban revueltas. ¿Por qué? Bueno, tenía nervios, felicidad y adrenalina. Me sentía feliz, muy feliz porque sabía que esta vez yo no iba a caer en su juego y que iba a hacer todo lo posible para mantenerme así, firme frente él. Mostrándole que he cambiado y que no soy la misma del año pasado.
Suspiré mirándome al espejo, nos faltaba una función y mi cara no tenía tanto maquillaje, a lo mejor en unos minutos aparecían Alejandro y Alan para retocarme el peinado y el make up.
Por otro lado tenía un jodido estrés porque la novia de mi compañero de trabajo estaba presente, quería pegarme un tiro prácticamente. Pero es más, se supone que es él, el que busca que en cada canción todo sea romántico con más química y ustedes saben, el captain Lutteo.
Re chamuyero el pibe ¿vieron?
De repente me atacó un poco de hambre y decidí salir al catering, y si señoras y señores. Ruggero Pasquarelli estaba ahí comiendo como el gordo que es. Me debatía entre quedarme en el camerino esperando a que el se marchara al suyo o ir como si el no existiera pero tampoco con tanta indiferencia.
Decidí salir y enfrentar la realidad ¿Qué podía salir mal?
—Hey Ruggerito —le saludé con una pequeña sonrisa mientras yo tomaba algo de frutas en un plato pequeño.
—Karol —se volteó a verme y sonrió—. ¿Qué tal todo?
—Todo Perfecto, I'm ready for the next show —respondí—. Y tú?
—También, también —rió levemente—. ¿Podemos ir a tu camerino para hablar? —preguntó.
Oh mierda, tierra trágame y escúpeme en Marte ¡Pero ya!
¿Aceptó o no acepto? Es más si, le voy a aceptar la charla. De seguro estarán diciendo que soy una ilusa, pues no. Soy inteligente y estratégica... Pero a mi manera así que ténganme paciencia, los amo.
—Bien, te espero allí cuando acabes. Yo iré a comerme mi plato de frutas —le regalé una cálida sonrisa y antes de que el dijera algo más me fui de ahí.
Me senté en mi sillón del camarín y empecé a comerme mi fruta, pensando si estaba bien lo que yo había acabado de hacer. No sabía lo que estaba por venir después de esta charla, pero si les soy sincera me gustaba el misterio.
Unos toques en la puerta me sorprendieron, era él.
Me levanté de mi comodidad dejando el platito en la mesa y abrí la puerta.
—Aquí me tienes Koala —le sonríe.
—Claro ehm... —No sabía que decir, literalmente estaba en blanco—. Ven pasa —digo con una sonrisa.
El Asiente.
—Compermiso —susurra y yo me hago a un lado, luego entra.
Cierro la puerta detrás mío y suspiro. Estaba un poco nerviosa. No quería volver a la otra gira donde siempre venía a mi Camerino en ratos libres y nos dábamos cariñitos como novios. No quería volver a sufrir por lo doloroso que fue volver a la realidad, el con su novia y yo sola.
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Te vas Conmigo | Ruggarol
Fanfiction~Esta noche te vas conmigo, que el se quede con el carro y con la casa, pues yo a ti te doy lo que el nunca ha podido. Por qué a mi me sobra eso que a el le falta para estar contigo~