La Hacienda . (camren).

EPILOGO .

1 MESES DESPUES.

NARRA LAUREN.

La vida no podía sonreírme más, estaba casada con la mujer de mi vida, y estaba embarazada hoy sería su primera ecografía, ya estaba de tres meses, y nos dirían cuantos bebes había, porque si de algo estábamos segura es de que no estábamos seguras de nada.

La mañana amaneció como en los últimos años, despierta a su lado, jamás dejamos de dormir juntas menos en la ocasión de la boda, donde Camila se empeño en que dos semanas antes de la boda viviéramos separadas, para así echarnos de menos, y vaya si funciono, como el demonio que la echaba de menos.

Me levante de la cama y me quede mirando a mi bella esposa, verla dormir era lo más hermoso que podía ser contemplado.

Camila- buenos días amor.- se restregaba los ojitos para poder verme.

Lauren – buenos días amor.- me acerque y bese sus labios, los que nunca me cansaría de besar.

Camila – llevas mucho despierta.

Lauren – no solo unos minutos, es que me encanta verte dormir, te ves hermosa.

Camila – no es verdad, mira que pelos, tengo los ojos hinchados, y...........- no la deje continuar, la bese me la comía besos.

Lauren – no es cierto eres hermosa, te amo.

Camila – te amo – y nos fundimos en un beso apasionado que iba subiendo de nivel, hasta que escuchamos ruidos en el pasillo.

Camila- Sofía tiene que haberse levantado.

Lauren – si será mejor que nos arreglemos, yo bajo y preparo el desayuno a la princesa y tú te duchas ok.

Y así lo hicimos, prepare el desayuno y Camila se ducho, ya cuando bajo Camila, subí yo para ducharme y arreglarme, ya las tres en la cocina y terminando de desayunar.

Lauren – esta lista princesa, tienes tus cosas ya listas para ir al colegio.

Sofía – si me ayudas a coger el trabajo de biología y llevarlo al coche estará todo listo.

Camila – eso ya lo llevo yo.- dijo cogiendo el proyecto de biología de Sofía.

Lauren – buenos todas al coche nos vamos.

Salimos de casa las tres en el coche, dejamos a Sofía en el colegio no antes de ayudarla a dejar su proyecto en clases. Y ya solas las dos, nos dirigimos a la clínica donde teníamos cita.

Lauren – son las 9:45 esto va con retraso.- estaba de los nervios

Camila – son solo 5 minutos amor, es normal, estate tranquila.- me congio de la mano apretándomela con amor, y eso si que me tranquilizaba.

Celadora – señora Jáuregui.

Camila – soy yo.- dijo mi esposa poniéndose de pie, y yo al instante, jamás me acostumbrare a dejar de sonreír cada vez que llamen así a mi esposa.

Celadora – pasen la doctora García la espera.

Lauren – gracias – pasamos a la consulta donde una doctora nos esperaba.

Doctora – buenos días, soy la doctora Mónica García, y seré vuestra ginecóloga.

Camila – gracias.