Estaba de nuevo en Zergat. Todo se veía distinto ahora, no solo por la destrucción que había generado el terremoto sino también por los cambios que se habían realizado después. Y mi mirada hacía la prisión también había cambiado. Ya no era la misma chica que había entrado aquí hacía tres años, ni la que se había escapado hacía casi dos meses. Era una joven mucho más fuerte y mucho más dura que estaba más sola y a la vez más acompañada que nunca. Había perdido mucho y había ganado mucho pero nada de eso me quitaba la tristeza que tenía. Esperaba que mañana mi cumpleaños número 22 trajera cambios positivos en mi vida. Aunque esos cambios parecían haberse adelantado un poco.
Me había tenido que quedar detenida unos días en la comisaria hasta que se comprobaran todas las pruebas de nuevo pero finalmente gracias a los esfuerzos de mi abogado, y mis amigos- incluido Shane, estaba segura- había podido salir libre. Ya no como una prófuga sino como un miembro respetable de la sociedad que tenía una segunda oportunidad en su vida. Quinta si teníamos en cuenta por todo lo que había pasado.
Y tras eso había puesto a Chase a trabajar para mí en un caso en particular.
_ ¿Crees que tardara mucho más?- me pregunto Naia ansiosa
_ No, ya tiene que estar por salir
_ ¿Crees...?- empezó a preguntarme pero se frenó. Tenía una buena idea de lo que quería decirme de todos modos
_ ¿Qué sí creo que Ivo va a agradarle? Sin duda. Puede que sea medio idiota pero en menos de un mes he descubierto que es un gran hombre. Protector, dulce, y sin duda está completamente enamorado de ti. Aparte tu mamá no podrá resistirse a lo guapo que es, a lo entrador que es y al hecho de que pueda darles un mejor futuro a ambas. Al fin y al cabo ahora es el jefe de mi empresa- dije.
Había decidido desligarme lo máximo posible de la empresa familiar y dedicarme a hacer otras cosas. E Ivo había sido mi elección para ocupar el asiento de jefe. Había descubierto que cuando éramos más chicos yo le gustaba por eso el constante intento de alejarme, que había estado pagando plata a varias oficiales para protegerme y que si te dabas la oportunidad de conocerlo era asombroso. Ahora era el novio de Naia, todo estaba claro entre nosotros y se podía decir que íbamos en camino a ser muy buenos amigos.
_ Ya verás que si
_ Ahí está- comento entusiasmada y ambas corrimos hacía Iris
_ Mis hermosas hijas están juntas aquí- dijo entre lágrimas. Jamás la había visto llorar antes y eso me hizo llorar a mí
_ Claro que sí, ahora tendrás que aguantarnos a ambas
_ Sera un placer
Y así de a poco las cosas se iban acomodando. Iris que era como mi madre estaba libre, Naia era feliz con Ivo, yo había decidido ponerlo a él a cargo después de una intensa charla y yo dedicarme a estudiar Asistente Social con Aria.
Aria. Aria me había pedido que nos encontráramos en un rato.
_ ¡¡¡¿Qué?!!!- exclame luego de que mi mejor amiga me lanzara una bomba
_ ¡Que estoy embarazada! De tres meses así que más te vale no meterte en ningún problema porque vas a ser la madrina de tu sobrino
_ ¿Ahora me lo decís? La próxima te acompaño yo a la ecografía. ¿Ya pensaste nombres? ¿Estas segura que es nene? ¿Ethan como lo tomo?
_ Okey, veo que estas emocionada. Ethan lo tomo bien, nos enteramos hace dos horas cuando fuimos a hacerme unos estudios porque últimamente no me estaba sintiendo bien. Nos sorprendimos pero estamos felices. Muy. Y sin dudas queríamos que fueras la primera en enterarte y la madrina. El doctor dice que es un niño y sabes que siempre he pensado en nombres para mis hijos. Probablemente se llame Ian Vent.
_ Voy a ser tía- dije emocionada- Es el mejor regalo que podrían haberme dado
_ Habrá más mañana para tu cumpleaños pero no creo que tan hermosos- respondió acariciándose el lugar donde pronto empezaría a notársele la barriga de embarazada.
Sonreí. Creí que me llevaría más tiempo ser feliz pero hoy las lagrimas por momentos hermosos me desbordaban y sentía que todo lo malo había quedado finalmente atrás.
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Había pasado un mes desde la última vez que había visto a Alexa. Treinta y un días en los que me había obligado a mantenerme lejos de ella por más ganas de besarla, abrazarla y contenerla que tuviera. Días en los que había estado en contacto con sus amigos para saber cómo lo llevaba. Días que habían llegado a su fin.
Llevaba un traje negro, una camisa blanca, una corbata y unos zapatos negros a juego y el pelo suelto. Quería impresionarla.
Espere hasta pasadas las doce de la noche para tocar a su puerta.
_ Shannon- dijo sorprendida cuando me vio
_ Feliz cumpleaños- respondí y la bese. No podía aguantarme más las ganas de hacerlo.
_ Gracias
_ De nada
_ ¿Y mi regalo?
_ Justo frente a tus ojos- respondí
_ ¿Y podre desenvolverlo?
_ Realmente espero que lo hagas
_ Bien- respondió y me entro a su casa tirándome de la cordata. Cuando la puerta estuvo cerrada volvimos a besarnos. Esta vez no habría nada ni nadie que pudiera separarnos.
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Fugitiva
Teen FictionTras la muerte de su padre, Alexa Koslov es acusada de su asesinato y puesta tras las rejas durante 20 años. Aunque nunca cumplirá la totalidad de su condena pues luego de tres años encerrada en Zergat- una prisión de máxima seguridad entre San Fran...