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  — ¡Abre el mío, hijito! Lo hice con mucho cariño— dijo la abuela Kim mientras le regalaba una encantadora sonrisa y le ofrecía un paquete con un lindo moño.

  El menor tomó el paquete y le regaló una espléndida sonrisa, que derritió el corazón de todos los presentes, pero en especial de un pequeño pelinegro que lo observaba intensamente, sin apartar los ojos de su hyung en ningún momento. Estaba muy nervioso, luego del espectáculo en el circo había tomado el primer bus de vuelta a casa del pelinaranja y el mayor parecía evitarlo con la mirada.

  "¿Estará arrepentido? Tal vez se siente avergonzado o algo así..."

  — ¡Gracias abuela! Necesitaba un par. — agradeció el mayor alegre mientras sujetaba un lindo par de guantes negros tejidos a mano y un lindo gorro.

  — Cuídalos mucho Taehyunggie, para que así te duren mucho tiempo y te acuerdes siempre de esta vieja que te quiere tanto. — le recomendó la mujer, para luego pellizcar su mejilla y sonreírle con cariño.

  — Claro que sí abuelita. — le aseguró el pelinaranja mientras le daba un cariñoso abrazo en modo de agradecimiento.

  — ¿Quién sigue ahora?— preguntó la madre para luego tomar un regalo del pequeño montón que se había formado— ¿De quién es este regalo?

  — ¡Nuestro!— exclamó Jimin para luego ponerse de pie junto a Jungkook— Es de parte de Jungkook y mío, TaeTae.

  — Espero le guste, hyung— agregó el menor mientras le regalaba una tímida sonrisa.

  — ¡Claro que me va a gustar, si es de su parte!— dijo el menor alegre mientras comenzaba a quitar el papel de regalo. De pronto se detuvo, al ver que era.

  — Es broma... Ustedes no lo hicieron, ¿verdad?— preguntó el menor sin apartar la vista de su regalo.

  — Taehyung, nosotros queríamos darte algo que de verdad te gustara y sabíamos que estaba deseando una cámara nueva desde hace varios meses; así que con Kookie pensamos que serías muy feliz si te regalábamos una. — explicó el rubio con una sonrisa.

  — Pero chicos, yo no puedo aceptar esto. Es demasiado— dijo el menor mientras los miraba a ambos. Taehyung sabía lo suficiente de cámaras como para reconocer una y poder darle un precio aproximado, y la cámara que tenía entre sus manos debía costar aproximadamente unos trescientos dólares, si es que no era más.

  — Hyung, nosotros realmente queremos que usted pueda ser un gran fotógrafo en el futuro, porque tiene las habilidades y la pasión. — dijo el pelinegro con una dulce sonrisa— Así que no diga tonterías y acepte nuestro regalo.

  — Chicos... Ustedes son demasiado buenos conmigo. — dijo el pelinaranja con los ojos llenos de lágrimas, para luego abrazarlos a los dos con fuerza.

  — Feliz cumpleaños TaeTae. Disfruta mucho de tu regalo, ¿Sí?— le pidió el rubio mientras le revolvía el cabello con cariño.

  — ¡Lo p-prometo ChimChim! La cuidaré mucho y sacaré muchísimas fotos con él— exclamó el mayor para luego secarse unas lágrimas indiscretas que rodaban por sus mejillas.

  Los integrantes de la familia felicitaron al cumpleañero por el lindo regalo que había recibido y luego de unos cuantos regalos más Sunhee anunció que el pastel estaba esperando ser cortado.

  Rápidamente los invitados tomaron asiento en sus lugares, Taehyung en la punta de la mesa y sus amigos a su lado.

  — Creo que deberías usar tu regalo y sacar una linda foto, ¿No crees hijo?— le sugirió Taeyang a su primogénito, a lo cual éste respondió con un gesto afirmativo.

friends ;; taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora