Luego de unos días en la nocheosfera decidí ayudar a mi padre a administrar el reino de llamas.
Quizás así podría sacar a aquélla chica rosa de mi cabeza.
-Marceline, hija, estas segura que no quieres utilizar mi collar para ayudarme con la nocheosfera? -dijo papá tomando el collar y extendindomelo.
-No papá, estare bien sin el- forze una sonrisa.
El collar de papá me hacia perder el control, cuando lo usaba una ira se apoderaba de mi y destrozaba todo a mi alrededor.
Tome el bajo-hacha de mi habitación por si surgía algun inconveniente o simplemente me aburria.
Hice un recorrido por todo el reino, no tuve ningun problema y no tenia nada mas que hacer. Por lo tanto decidí volver a mi habitación y tocar algún que otro tema.
Comenze a recordar a la chica de mis sueños, mientras mis dedos se desplazaban por el instrumento. Cada nota, cada vibración de las cuerdas era para ella.
¿Quién era aquella chica? ¿Porqué mi corazón se aceleraba cada vez que aparecia en mis sueños? ¿Porqué su recuerdo, su aroma y su voz me resultaba tan famíliar? y... ¿Porqué estaba en mis sueños?
Noté que algo corria por mi mejilla.. -¿qué es esto? ¿una lagrima?- ni por el idiota de ash habia llorado. ¿Porqué estoy llorando?
Papá entro a la habitación, rápidamente seque mis lagrimas y flote a su lado.
-Marcie, cariño, te he notado triste y reservada ¿que ocurre cariño? -dijo papá mientras me abrazaba por sobre los hombros.
-Nada papá, solo... solo me gustaria volver a Ooo y conocer gente nueva -mentí- necesito olvidarme de ash y de todo... Papá quiero comenzar denuevo.
La cara de mi padre se sombrecio -Marceline tu eres libre de hacer lo que quieras, si quieres volver al reino de Ooo pues ve... pero recuerda que este es tu hogar y puedes volver cuando quieras.
Sabía que a papá le dolia el hecho de que me marchara, pero no sabia que mas decirle o como contarle sobre mis extraños sueños con aquella chica rosa...
Quiza me estaba volviendo loca, quiza solo debía alejarme de la nocheosfera y de papá.
Tome mis maletas y abri un portal hacia mi antiguo hogar en la casa del árbol. Quiza no debía volver a aquel lugar ya que ash y yo vivíamos allí, pero, no dejaria esa linda casita solo por que el idiota habia estado allí.
