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Ups, se me hizo de noche de tanto hablar y joder con los chicos. Miro mi teléfono, y diez llamadas de Ale, tres de Rami, cinco de Gero y dos de Ren. Creo que hoy muero.

-Chicos... no sé si me vean el lunes en la escuela- digo.

-¿Por qué?¿Pasó algo?- Pregunta Nahui preocupado.

-Probablemente muera, tengo un millón y medio de llamadas de mis hermanos... hablando del rey de Roma- digo, al ver que mi celular sonaba con una nueva llamada de Ale-. Ya vuelvo- digo, y me voy a sentar a un banco de la plaza, ya que todos estaban en las hamacas-. Hola, ¿Ale?- digo, nerviosa.

-¡ABRIL!¡¿SE PUEDE SABER DÓNDE TE METISTE?! ¡HACE DOS HORAS QUE TE ESTAMOS LLAMANDO!- dice un Alejo muy enojado.

-Perdón, es que salí con unos amigos y me olvidé de llamarte- dije, omitiendo la parte en que iba a tomar el helado con Nahui.

-Está bien, pero nos tenías preocupados. Vení ni bien puedas, hoy vienen unos amigos a cenar- Dice.

-Está bien, hermanito, ya salgo para allá. Te quiero- le digo

-Yo más- me responde, y la llamada se corta.

Yo vuelvo hacia donde están los chicos, y ellos me miran.

-Ehh, yo... me tengo que ir- digo- mis hermanos quieren que vaya rápido a casa.

-Bueno, ¿querés que te acompañe?- se ofrece Nahui, seguido de eso se escucha un "¡Los shippeo!" por parte de Alli.-¡Te escuché!- le dice, y todos reímos.

-No, gracias, creo que los chicos ya están enojados, no creo que mi situación mejore si me ven llegar con un chico- le respondo.

-Oh, está bien- dice.

-Ok, ¡Chau, chicos! Nos vemos el lunes - les digo a todos - ¡Ah! y gracias devuelta por el helado, Nahui- le digo, y me voy rápido de ahí.

Por suerte ese parque quedaba a solo cinco cuadras de mi casa y llegué rápido, sino creo que los chicos me mataban. Cuando llegué, veo que había un auto que no conozco afuera. Debe ser de los amigos de los chicos. Entro, y me llevo una gran sorpresa: ¡KEVSHO Y COSCU ESTÁN EN MI COMEDOR! Creo que me voy a morir acá mismo.

-H-Hola- digo. Bien, Abby, tartamudeá un poquito más si querés.

-Oh hola, vos sos la famosa Abril, ¿No?- dice Kevin- Yo soy Kevin o Kevsho, como vos prefieras llamarme- dice. Es aún más hermoso en persona.

-Hola, hermosa - dice ahora Coscu- yo soy Martín, pero me dicen Coscu, o Marto.

- Y-yo... soy muy fan de ustedes, chicos, ¿L-los puedo abrazar?- ¡BILL DENBROUGH SAL DE MI CUERPO!

-Obvio, vení -dicen, con los brazos abiertos, por lo que yo voy corriendo hacia ellos y, sin pensarlo dos veces, me tiro a sus brazos. Todavía no me creo que estoy abrazando a dos de mis ídolos, ni que están en mi casa, ni que son amigos de mis hermanos, que también son mis ídolos.

-La comida ya está en el horno, va a estar lista en unos veinte minutos... ¡Abby! ¡Hasta que llegaste!- dice Ale, apareciendo por la puerta.

-Sip, acá estoy, no soy un holograma -digo riendo, mientras me separo de los chicos -. Pará, ¿como es eso de que la comida está en el horno? Por favor decime que no cocinaron ustedes -digo, mientras veo que Kev y Martí van hacia el comedor.

-Cociné yo, pero tranquila, yo si sirvo para eso, no como los otros pelotudos que están en el comedor -dice.

-Eso espero, no quiero que Kev muera intoxicado, me cae re bien-digo.

Adoptada por Looking UpDonde viven las historias. Descúbrelo ahora