Fighting for you

Tell me you love me

Bree

Mi celular suena indicando un nuevo mensaje de Aiden avisándome que está en la puerta, apurada tomo mi bolso en una mano y el celular en la otra. Camino hacia el espejo e inspecciono que mi pelo, el cual pase la última hora curvando en perfectas ondas,  y  mi maquillaje, suficiente para perecer sofisticado pero al mismo tiempo natural, estén de la forma correcta y luego salgo por la puerta. Mientras hago mi camino hacia la salida del edificio acomodo mi vestido azul ajustado en la parte de arriba y suelto en la parte de abajo. Es uno de los pocos vestidos que tengo que es arreglado. la tela es suave al tacto, es largo hasta mis rodillas, modesto, cómodo, resalta todas mis curvas pero de una manera sutil y no vulgar. Fue el vestido que utiliza para mi graduación un año atrás, junto con los zapatos de taco aguja del mismo color, que también traigo puestos hoy. Puede que mi atuendo no sea la gran cosa, definitivamente puedes ver que no es ropa de diseñador, pero es refinado y bello. Aiden es un gran chico y ambos sabemos que llevamos vidas muy distintas, este atuendo es la prueba para ver si el puede aceptar quien soy, de donde vengo, así tanto como es una demostración de que puedo hacer lo mejor que pueda para tratar y adaptarme a su estilo de vida, aunque manteniendo mi esencia.

Abro la puerta y veo Aiden parado en frente de su audi observando su celular, supongo que podría estar esperando una respuesta mía, ya que en vez de responderle decidí salir a buscarlo directamente. Camino hacia a él y aclaro mi garganta. Mi mira con desinterés y vuelve a su celular, un segundo más tarde levanta su cabeza de vuelta con la cejas levantadas en asombro. Su mirada recorre cada centímetro de mi cuerpo  lentamente. Siento la sangre correr hacía mis mejillas al mismo tiempo que las nauseas provocadas por mis nervios lo hacen. 

Aiden sonríe lentamente y susurra algo que parece un "Whow"

"Hola" 

"Hola" Me responde en un tono de voz más agudo que lo normal. Aclara su garganta y repite su saludo. "Hola... Estás hermosa, bueno siempre estás hermosa, pero hoy particularmente estás muy hermosa." 

La forma en que deje salir su vomito verbal me hace pensar que está tan nervioso por nuestra cita como yo lo estoy. Ese hecho me hace relajarme y sonreír un poco. 

"Gracias. Vos también estás más elegante que lo normal." 

"Gracias, igual no me cabe duda que todos los ojos van a estar puestos en vos esta noche." Su inusual coqueteo hace que mis mejillas se pongan color carmesí. Algo parece haber notado ya que su sonrisa se vuelve aún más grande. 

Abre la puerta de acompañante de su auto y me ayuda a subir con una mano en mi cintura. Lo cual genera un cosquillo en mi interior y que se me ponga la piel de gallina. Aiden parece no enterarse de la forma en que mi cuerpo reacciona a su persona, y si lo hace no hace ni dice nada al respecto. Camina hacia el lado del conductor y se sienta. Pone el auto en marcha y luego de asegurarse de que ambos tengamos bien puesto el cinturón de seguridad, arranca el auto. El viaje no es muy largo hacia el restaurante. Los diez minutos que tuvo de duración Aiden me dejo elegir que música escuchar, y programar el aire acondicionado a mi gusto, puso su mano sobre la mía que estaba reposada sobre mis piernas, y creo pequeña charla sobre cosas triviales y sin sentido. 

Aiden paso la prueba respecto a como estaba vestida, pero no se porque realmente eso me sorprende en lo más mínimo. Desde que lo conocí siempre mostró ser un hombre humilde, comprensivo, respetuoso, con un gran corazón y muy inteligente. Estos diez minutos en su auto me demuestras que también suele poner a los demás y sus necesidades primero o por lo menos conmigo. Si tenía alguna duda de que clase de persona es Aiden o como se sentiría estar saliendo con él, obtuve mi respuesta. Salir con él significa tener el cuento de hadas que toda chica sueña desde pequeña. Aiden Metz es material para ser considerado el próximo príncipe de Disney. Y cualquier persona que no sabe aprovechar y valorar estar siendo considera para el papel de princesa es una idiota. Mi cerebro juega todas sus cartas para convencerme que Aiden es el chico para mi, pero siendo sincera, no creo que tenga que trabajar mucho para lograrlo ya que Aiden esta haciendo un excelente trabajo para ganarse mi dañado corazón.