You Are My Prince (Luhan, Baekhyun y tu)

Capítulo 25: "¿Cómo?"

     Los rayos de sol viajaban a través de cada ventana de cada casa de aquel barrio, causando así que todas sus familias despertaran. No se divisaban nubes en el cielo y, si prestabas atención suficiente, podías oír a los ruiseñores realizando sus cantos matutinos mientras buscaban comida para sus pichones. Niños andando en bicicleta entregaban el periódico, los gatos volvían a sus hogares y los perros salían a la calle a correr y jugar entre ellos, la paz misma se podía sentir en la brisa. Era un domingo realmente caluroso de verano, el perfecto día para que uno se encuentre con sus parientes y almuerce mirando al lago, y la gente así lo hacía.

     La familia Zhang no era una escepción a esa tradicional rutina, ambos padres preparaban la comida para su "picnic" mientras los niños aún dormían. El hombre, siempre servicial, ayudaba a la mujer en la mayoría de las tareas, ya que su barriga ya crecida debido al embarazo le impedía mover materiales pesados y, sobre todo, levantar cosas del suelo. Mientras preparaban el almuerzo y la mujer horneaba las galletas para la tarde, el hombre salía de su hogar para conversar con los vecinos, quienes tenían los mismos planes para pasar el día.

     La primera en despertar de los niños fue la pequeña ________, quien a sus cinco años, como a toda niña de su edad, amaba pasar días en aquel bosque y jugar con su hermano, por lo que procuraba despertar siempre temprano. Yixing a sus doce años era el único muchacho en su escuela al que le agradaba su hermanita menor, pues estaba acostumbrado a jugar con ella y a cuidarla. Él disfrutaba enseñándole cosas y ayudándole a estudiar, ya que para él era muy fácil leer y escribir. Practicaban inglés juntos, hablando de cosas cuyos padres no podían entender, pues ninguno de los dos dominaba ese idioma.

     _________ despertó mientras abrazaba uno de sus osos de peluche, y lo primero que hizo al levantarse fue abrir sus ventanas. Al ver el gran sol que se asomaba a las nueve de la mañana, gritó de felicidad, recordando la promesa de sus padres de pasar la tarde afuera. Acto seguido, se vistió, se lavó los dientes y corrió hacia la habitación de su hermano, quien aún dormía plácidamente junto a sus libros y autos de juguete. Se trepó a su cama y comenzó a golpearlo con almohadas.

- ¡Yixing-ah, iremos al bosque! ¡Despierta, Yixing-ah!

     Su hermano despertó muy rápidamente y tomó su puesto de defensa agarrando los almohadones del suelo y golpeando despacio a su hermana con ellos, riendo. Al ganarle, se levantó de su cama, tomó a su hermanita en sus brazos y la lanzó por los aires, atrapándola a los pocos segundos. Sabía que a ella le gustaba que la cargaran, y a Yixing le encantaba escucharla reír cuando él lo hacía.

- ¿Iremos al bosque después de todo? -dijo, dejando a _______ en el suelo, con los cabellos despeinados, sonriendo.

- ¡Lo haremos! ¡El sol es grande y veo a mamá subiendo comida al auto desde la ventana!

- ¡Genial! ¿Y sabes qué es lo mejor de todo esto? -la sonrisa de Yixing era más brillante y grande que la de siempre, y su hermana menor podía notar eso.

- ¿Qué es?

     Yixing ya había llegado a esa edad en la que quería ser mayor con todas sus fuerzas, y eso su padre ya lo entendía. Hace poco tiempo, el hombre le había preguntado si él quería aprender a conducir, ya que a sus doce años se estaba convirtiendo en un hombre grande y fuerte. Yixing asintió mil veces, feliz, ya que él amaba todo lo relacionado con vehículos y velocidad. Entonces, su padre le prometió que la próxima vez que viajaran a ese bosque todos juntos, Yixing aprendería a conducir su auto nuevo.

- Aprenderé a conducir hoy, _______. ¿No es eso genial?

- ¿Aprenderás a conducir autos grandes? - excamó ella, emocionada, con ojos que brillaban.