capítulo 29 (2/?)

852 52 0
                                    


Barbara POV's

–Yo la vi, con Bar, —dijo Thomas y yo lo interrumpí—

–Thomas.

–No te imaginas lo que lloro esta chica,

–Cállate Thomas. —volví a decir.—

Mientras tanto Fran prestaba atención con una sonrisa burlona en su rostro. Y Thomas de igual manera seguía.

—Por un momento pensé que venia un tsunami. Va enserio —dijo y yo lo fulmine con la mirada—

–Y yo que mañana tenia pensado llevarte al taller conmigo. —dije restándole importancia—

–Y bueno, luego desperté, ya que todo era un sueño, nunca vió esa película, tendríamos que verla. —Dijo Thomas y Fran y yo reímos—

...

–Bajo la misma estrella!! —Gritaron Thomas y Francisco—

Estábamos en mi departamento en un debate de que película ver

–QUE NO! esta es mejor!

–Somos dos contra uno. —Dijo Fran de forma superior y Thomas asintió estando de acuerdo.—

–Pero es mi departamento! —dije intentando que funcione—

–No puedo contra esa lógica. —contesto Fran—

–¿¿Que??

–¿¿Que?? —dijo Thomas copiando mi acción— Te rindes así de fácil? Que perdedor.

–Déjala, ¿no te da pena su carita de cachorro mojado?—le contestó Fran y me señaló y yo los mire de forma neutra a lo que ellos rieron y me contagiaron por lo que termine riendo yo también.—

...

–Siento la adrenalina todavía!! —dijo Thomas y empezó a correr por todo el cuarto y luego a saltar en mi cama—

Yo solo reía por las bobadas que hacía Thomas. Por si no cacharon, Thomas se refería a la película de acción, lo dejo con mucha energía por desgracia.

–THOMAS ME APLASTAS!! —grito Fran—

–DIJISTE QUE NO TE GUSTO! ESA PELÍCULA ES LA MAS COOL QUE VI!¡ —dijo Thomas—

–SE INSULTAN MUCHO THOMAS! ERES MUY PEQUEÑO PARA OÍR ESO!! —dijo Fran defendiéndose—

–Pero se trataban de usted, tienen modales weón. —dije y rieron—

Y así pasamos toda la tarde, viendo películas, comiendo, riendo

Ya eran las 8:30 y Fran nos ofreció ir al parque y luego a comer a su casa.

Estábamos de camino, al llegar nos sentamos en una banca mirando al frente y Thomas se fue a jugar al parque.

–Mañana irás a la uni o que? Ya ni vas. —dijo Fran—

–Sí. —dije sin darle importancia—

–Te peleaste con tus amigos, verdad? —preguntó y me miro.—

–Si así podría llamar los, sí. —dije y lo mire y el me sonrió tiernamente y volvió a mirar al frente al igual que yo.—

El silencio nos inundó, para nada incomodo, transmitía paz, tranquilidad.

–Si no te conocería... Y me dirían que en realidad eres así, —dijo y me volvió a mirar y yo le mire— en realidad, siéndote sincero, diría que están locos —dijo y río—

–Así como? —pregunte sin saber a que se refería—

–Así... —dijo y antes de comenzar miro al frente— No se, cuando te conocí te imaginaba distinta, seca, fría, sin querer conocer a nadie, como si odiaras al mundo. Pero cuando te conocí realmente me di cuenta que eres todo lo contrario, es como si eso le mostraras a las personas, como diciendo "No te me acerques" como si escondieras lo que realmente sos, como lo haces ahora. —termino de decir. en ningún momento me miro, seguía con su vista clavada al frente, al igual que yo—

–Algo así, algunas personas en las que confiaba me hicieron desconfiar de todas las personas, y de las que necesitaba el apoyo, nunca estuvieron. —dije y l ok mire y el a mi— Quizás hice algo mal yo, en confiar en personas equivocadas, o tal vez me lo merezca, no lo se. La verdad no lo se. —dije y sonreí de costado—

–Tu no tienes la culpa de nada, okey? Es que hay personas de mierda que están en este maldito mundo. —dijo. Pero lo sentí como si lo dijera mas para el que para mi— Ellos se pierden de no haberse dado cuenta de que eres una excelente persona Barbara. —dijo y paso su brazo sobre mis hombros y me sonrió— Siempre estaré contigo, ya nos conocemos hace tiempo y me sería difícil dejarte —dijo y reímos—

–A mi igual —dije y pase mis brazos por su cintura abrazándolo—

–Podría acostumbrarme a esto. —dijo y río.—

–Cállate.

–Ya volviste a ser la Barbara agresiva que conozco. —dijo riendo y le pegé en su abdomen.— Heyy! Era broma —dijo quejándose—

–Si, ya, ya. Vamos por un helado? —dije sonriendo—

–Si te digo que no me golpearas.

Creo que si lee mentes.

Fuimos por Thomas a los juegos y luego caminamos hacia la heladería.

Íbamos de camino al piso de Fran ya que comeríamos en su apartamento, llamamos a una pizzería y nos sentamos en el sofá a ver películas.

–Ya debe estar por llegar, iré a preparar la mesa. —dijo Fran y se levanto del sofá.—

–Te ayudo. —dije y lo seguí a la cocina junto con Thomas.—

Estábamos poniendo los vasos y terminando de acomodar la mesa cuando tocaron el timbre.

–Ve tu Bar que yo le ayudo a Fran. —dijo Thomas.—

Fui hasta la puerta y la abrí pensando que era el repartidor

¿El resto? No importa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora