Mileven Oneshots

13- Mi mejor amiga.

-Bueno entonces, ¿Mañana te parece bien? - La voz de Max sonaba alegre a través del teléfono, El sonrió.

- Si... cool. - Asintió ella tomando el teléfono con un poco más de fuerza.

-Cool. - Repitió ella. - Te lo aseguro El, será la mejor noche de todas.

El asintió, la mejor pi-yamada de todas.

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Hacia varios meses que El ya podía hacer vida normal, desde que Hopper se aseguró que nada más malo podría pasar en Hawkins liberó a la pobre joven adolescente y la dejó ir al instituto con sus amigos y salir a corretear por allí.

Por supuesto que cuando se ponía el sol debía estar en la casa.

El tiempo se encargó de arreglar las cosas entre El y Max, ahora eran ambas mejores y únicas amigas en el grupo que se había conformado de cuatro hombres y ahora dos mujeres.

Y las reuniones de grupo eran muy divertidas pero tanta testosterona estaba alterando a estas dos jóvenes y hartas de los concursos de eructos y las pizzas de piña que Dustin pedía decidieron (o va lo hizo mas Max) armar su propia piyamada.

-SOLO. PARA. CHICAS. - Le dijo por ultima vez El a su novio Mike, quien se negaba a soltarla.

Había pasado todo el día con Mike, primero para estudiar y después para estar abrazados. Mike pensó que se quedaría a dormir, pero al parecer su chica tenía otros planes. - ¿Desde cuándo Max hace piyamadas?

El rió en los brazos de Mike. - Desde que hacen sus concursos de eructos, son asquerosos. - Dijo ella y Mike rodó los ojos.

-Sabes que yo no participo. - El levantó una ceja. - ¡Ser jurado no es participar de los eructos! Deberías quejarte con Will en todo caso, el si que eructa fuerte... no se como hace siendo tan pequeño al lado de esos dos.

El soltó una pequeña risita y Mike se quedó mirando a El, quien se separó de Mike para seguir estudiando.

De fondo el sótano se inundó con "last chrismas" uno de los temas más nuevos, las fiestas ya se acercaban, con ello la tercera navidad de Eleven; y Mike se levantó estrepitoso de su silla frente a la mesa de estudio; era una muy buena canción como para desaprovecharla. Su novia lo miró extrañado y el le tendió una mano.

- ¿Baila, milaidi? - Mike simuló una grave voz al compás de que mecía sus cejas.

Ella gustosa la aceptó, Mike la llevó al centro del sótano y se acomodaron para bailar un pequeño lento.

-Me prometiste que esta noche te quedarías conmigo. - Le dijo algunos minutos luego haciendo cara triste.

El jugó con uno de los mechones de cabello negro de Mike. - Vamos Mike, es una noche, podemos vernos mañana, y pasado y pasado y así sucesivamente. - Le dijo ella balanceándolos a ambos mientras le hacía ojitos.

-Los amigos no mienten. - Le dijo el sacándole la lengua.

El acercó a Mike bastante cerca y le susurró. - ¿Quién dijo que somos amigos? - Dicho eso, le plantó un beso para recordarle a Mike que una noche sin ella no era la muerte de nadie.

Además, la había esperado 353 días, el estaría bien.

Afuera comenzó a nevar suavemente al compás de la canción que sonó nueva,

Its beginning to look a lot like christmas...

Mike se separó de su novia para mirarla, frente contra frente, abrazados. - Esta bien, me alegra que vayas a pasar tiempo con Max, ella realmente te quiere.- Mike siempre entendería, Mike siempre apoyaría a El en todo.