Capítulo 7

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—¡No lo entiendo! —gritó Kakashi frustrado. —si usted sabía que iba a necesitar ninjas más experimentados y que nos atacarían. ¡¿Por qué nos lo oculto?!

—porque la tierra de las olas..., Es una nación pequeña y empobrecida. Ni nuestros nobles tienen mucho dinero. —explicó Tazuna en voz baja.

Kakashi lo miro serio. Talvez, era verdad. El pedir mayor protección para la misión se haría una deuda. Sin embargo, no debía porque pedirla a unos simples niños. Claro, omitiendo el detalle de que estaba él presente.

—los que están construyendo el puente no pueden pedir por una misión más grande, clasificada como A o B. Eso sería muy caro. Si ustedes terminan su misión dejándome en tierra, no habrá ningún puente. Me asesinaran antes de que llegue a mi casa. Pero..., No se sientan mal por eso. Por supuesto que mi dulce y pequeño Nieto se molestará, llorara y gritará. “¡Abuelo, Quiero a mi abuelo!” —gritó lo último fingiendo la voz de un niño pequeño.

Sakura y Naruto lo miraron con vergüenza ajena. No era momento de hacer bromas y estupideces. Pero ahí estaban, junto a un hombre mayor. Escuchando como hacía una mala interpretación de su nieto.

Absurdo, pero gracioso.

—y mi hija condenará a los ninja de la aldea de la Hoja. Vivirá su vida con sufrimiento. Denunciandolos y maldiciendolos por haber abandonado a su padre. —se excuso Tazuna.

Hubo un silencio incómodo. Solo se escuchan los gruñidos de molestia de Naruto y Sakura. Sasuke solo observaba la situación sin gesto alguno.

Todos Suspiraron. No les quedaba de otra, tampoco eran malas personas.

Kakashi se rasco la frente.—en fin, no nos queda de otra, mantendremos su seguridad. —aseguró.

—estoy agradecido. —comento Tazuna.

Aunque, la realidad era que no los quería para eso. Había algo más gordo para enfrentar. Y talvez si se lo contaba a los demás, saldrían huyendo como mariposas.

De nuevo, solo silencio. El agua salpicaba la cara de Naruto. Mojando sus mejillas. El señor solo se dedicaba a remar, haciendo que el agua saltará y volviera a tocar la cara del chico.

Ya comenzaba a perder la paciencia, ¿Lo hacía apropocito, o qué? «respira, respira» se repitió por doceava vez en un solo minuto.

Se limpio la gota de agua con el antebrazo. «el agua tiene olor a los pies del viejo Hokage» el aroma nauseabundo del mar le comentaba a dar arcadas.

—ya casi llegamos a la costa. —avisó el hombre de ante mano.

Naruto volteó a ver la parte de enfrente del bote. Y sí. mientras se contenía de vomitar, ya casi estaban por llegar a la orilla.

—menos mal que llegamos sin que nos notarán. —comentó, mientras no paraba de remar.

—bien echo. —felicitó Tazuna.

El bote continuó de largo. Pasando por debajo de un puente.

Todo se había vuelto oscuro. Naruto, del susto. Volvió a pararse. Mirando para todos lados, buscando con vista alguna fuente de luz. Avanzo varios pasos.

—Naruto, siéntate. Estás moviendo todo el barco. —explico, la voz que para él, era de su sensei.

Extrañamente. Entendió el regaño. Los deseos de vomitar habían vuelto. Y si no se controlaba y sentaba. Talvez expulsaría absolutamente todo.

Se sentó sin previo aviso donde creía que estaba el asiento del bote. Había aterrizado sobre algo suave. ¿Pero no eran de madera los asientos?

Sasuke sintió un leve «pero poco» peso en su regazo. Arrugo el entrecejo. Dejo estar esa sensación. Se fijaría cuando la luz volviera. Después de todo, se hacia un escándalo mientras no había luz, alguien podría caer de bote.

A lo lejos. Una potente luz llamó la atención de todos. El barco ya había pasado el túnel.

Frente a sus narices. Estaba un bello paisaje. Pajarillos cantaban, he incluso, el agua de ese lado estaba muchísimo más limpia. Tampoco los cubría una capa de neblina, como la vez anterior.

—¿Con qué no eran novios, he? 

Naruto volteó totalmente enojado. Le habían arruinado el hermoso expectaculo que le está dando la naturaleza. Y todo por ese viejo metiche, ¿No le habían enseñado a no meterse en “asuntos” de los demás?

«momento..., ¿Asuntos?, Si yo con Sasuke no tengo absolutamente nada. ¡Somo como extraños Dettebayo!»

Cruzó los brazos sobre su pecho. Mordiéndose el labio inferior.

—¡Yo no soy su novio! —gritó con frustración.

Tazuna alzó una ceja. Ensanchando una sonrisa. —¿Entonces por qué estás sobre sus piernas?

Pfff, ¿Él?, ¿Sobre las piernas de Sasuke?, ¡Impo...!

Giró su cuello exaltado «esto no es verdad» Detrás de su nuca, estaba una persona un tanto especial.

La cara neutra de Sasuke estaba sonrojada. Sus ojos apuntaban a otro lado, en un intento de evadir la incomoda situación. Naruto sentía la respiración del chico. Lo que le producido un impacto. No podía moverse, no lograba correrse. Solo atinaba a mirar los ojos oscuros del contrario.

¿Qué es esto?,¿Qué es lo que me pasa?, ¿Me voy a morir?, ¿Por qué me quiero quedar horas mirando su rostro?, ¿Por qué me resulta tan guapo?

¿Estoy enfermo?, ¿Cuál es la razón de que me sienta tan..., Extraño?

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