Amor Verdadero

Parte 36

M- mi amor... (Pasando una mano por el largo de su espalda) Esteban....

E- ¿qué pasa María? (sin moverse)

M- detesto que me ignores, perdóname mi vida

No obtenía respuesta, se sentía mal por haberse enojado así con aún marido. Hasta que el giró y ella enseguida se recostó en su pecho.

M- perdóname

E- ya, no te preocupes (la abrazó más a él) estabas muy nerviosa

M- sé que no me avisaste para no preocuparme, pero es que perdí tanto de la vida de mis hijos que tengo miedo

E- no tengas miedo mi vida, no volverás a separarte de nosotros, no lo permitiré

Levantó la cabeza y acarició su mejilla para acto seguido unir su boca a la de él.

M- te amo

E- no más que yo a ti (vuelve a besarla)

Al otro día...

*Empresas Sanromán*

Mariana- Licenciado, que sorpresa verlo tan pronto por aquí (viendo a su jefe salir del elevador)

E- Buenos días Mariana, imprevistos, mi hijo se fracturó el brazo en el viaje, por lo tanto volvimos antes de tiempo

Mariana- espero se recupere pronto

E- mi mujer no vendrá, prefiere quedarse hoy en casa por si a Héctor se le ofrece algo

Mariana- entiendo, en lo que guste puedo ayudarlo

E- muchas gracias (amablemente) luego te aviso tengo que elaborar un contrato y necesitaría que lo trasmitieras a la computadora

Mariana- claro que sí

E- ¿algún pendiente que tenga que revisar o algo pendiente de María?

Mariana- la señora María tenía una reunión a las 11 en las compañías Donado y Asociados

E- lo recuerdo, por favor, llama y diles que iré yo en su representación y preparame un resumen de temas a tratar

Mariana- enseguida se lo alcanzo con un café

E- excelente, muchas gracias

Leonel- ¿Esteban? ¿Qué haces aquí tan pronto? (venía de su oficina con papeles en la mano)

E- Leonel, ¿cómo estamos? Héctor, se calló y se fracturó el brazo, tuvimos que volver

Leonel- ¿volvemos a ser pequeños?

E- así parece (riendo) con la diferencia que ahora está su madre planteándome el por qué no le avisé

Leonel- ¿se enojó?

E- bastante, tuvimos una discusión pero después pasó todo, ven que te cuento de lo poco que pudimos hablar en Nueva York

Leonel- claro, Mari, ¿me sacas dos copias de esto por favor? (dirigiéndose a la secretaria)

Mariana- claro que sí licenciado

Leonel- muchas gracias

Mansión Sanromán....

Inés- pero ¿cómo no nos avisaron anoche lo que pasó? (sentada al lado de su nieto en el sofá de la sala)

H- no abuela, no las íbamos a preocupar, no fue nada, como me pasó en la infancia