La Llamada

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Hace más o menos una hora que mis padres se marcharon a un reunión con sus antiguos compañeros de la universidad. Yo simplemente me quedé en casa viendo cualquier cosa en la tv, ya era pasado de la media noche cuando decidí subir a mi habitación y seguir viendo la televisión ahí, debí pasar los mismos canales unas cuatro veces, intentando encontrar algo de mi agrado, estaba a punto de darme por vencida y dormir de una vez, cuando me detuve en un canal para adultos al que ocasionalmente le dedicaba unos minutos de mi tiempo, ya saben para recrearme cuando lo necesitaba... y ya que estaba sola vi la oportunidad, no habría interrupciones. El trama del rodaje iba sobre una chica liándose con la mamá de su novio, la escena no era exagerada y tosca como suele ser en la industria del porno, de hecho, todo lo contrario era candente, sensual y erótica entre ambas mujeres por lo que le dí una oportunidad para verla.

Podría considerarme bisexual pero a decir verdad no he tenido el coraje de intentar algo que no vaya más allá de un beso con otra mujer. Mientras mis pensamientos divagaban en la tele todo comenzó a subir de tono y con ello mi cuerpo empezó a reaccionar como era de esperarse. Moví dos de mis dedos ligeramente sobre la tela de mi braga, suspiré por la sensación que me produjo, hice más presión sobre mi punto sensible, dibujando círculos o trazando línea recta de abajo hacia arriba, pronto ansié más, así que me deshice de la braga para tener más acceso a mi raja, humedecida por la excitación deslice la punta de mi dedo corazón en mi coño mientras veía como la milf se follaba con vehemencia a la chica de su hijo, en mi mente era yo a quien estaba follando. -Mmm- gemí queriendo algo más intenso, me felicite por haber recientemente adquirido un nuevo juguetito, abrí la cajonera de mi armario y saque una caja con una escritura en letras doradas "lovence lush" oculta al fondo, me acomode de nuevo en la cama y tome el aparato, una bala en forma de media luna, lo encendí en la primer velocidad colocándolo sobre mi vulva, gemí más fuerte volviendo a introducir mis dedos.

Maldición era casi tan delicioso siempre he disfrutando de masturbarme tanto como tener sexo con alguien más, estaba tan jodidamente sumergida en mi placer que cuando sonó el teléfono que dio un brusco salto de la cama con el corazón en la garganta. Mierda.

Decidí ignorar el timbre, pero el jodido teléfono siguió sonando sin cesar, refunfuñando vi la hora 1:48 a.m, quizá era una emergencia, ¡Mis padres! Me levante de la cama con las piernas temblorosas y un poco preocupada.

― ¿Aló?― conteste nerviosa pero no se escucho más que una respiración al otro lado de la linea.― ¿Aló? ― Espero de nuevo por una respuesta no obteniendo nada a cambio.

― Maldición si es una jodida broma, púdrete imbécil. ― colgué frustrada por la interrupción. El teléfono volvió a sonar y respondí al primer timbre.

― Te dij...― me vi interrumpida a media frase ― No te atrevas a volver a colgar Camila...

― ¿Q-quien carajos er-es?- ignorando mi pregunta volvió a hablar― ¿Sabes? tu voz me prende mucho, sobre todo cuando estas excitada como ahora, uhmmmm y ni hablar de ese hermoso culo tuyo.

Mi nerviosismo volvió pero esta ocasión por razones diferentes.

Susurrando pregunte de nuevo quien era. Alguien que te dará lo que necesitas ahora... mucho placer.

― Neces... Ahora? Estás loca. Llamaré a la policía!― NO.- demandó ― No lo harás. Lo que si harás será volver a tumbarte de nuevo en esa cama y seguir jugando justo como lo hacías hace unos momentos mientras yo te digo exactamente lo que me muero por hacerte. - La voz aterciopelada y ronca de la extraña activó de nuevo el cosquilleo en mi sexo.

Mojada - Camren HotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora