Habían pasado unos cuantos días, semanas tal vez, y la relación entre Min YoonGi y Park JiMin en vez de ir subiendo, simplemente iba en declive.El peliplata nuevamente se volvía alguien frío y arrogante, y eventualmente su comunicación con el más bajito era cada vez más reducida, a tal punto de ser casi nula, y esto se debía a que el paliducho estaba harto del tal YuGyeom, y es que su maldito nombre ya ni siquiera era necesariamente pronunciado por los labios gorditos del pelinaranja, al parecer media Universidad estaba enterada de la "relación" entre Park JiMin y ese completo imbécil desconocido.
Haciendo que simplemente intentará pasar del tema y obligando a su cabeza a no detenerse a pensar más en ello, porque aunque lo negara por completo, en el fondo de su corazón, realmente dolía. Se sentía un estúpido y lamentaba que esos mismos ojos que en algún momento lo cautivaron –y que tal vez aún lo hacían— ya no lo miraban a él, sino que ya le pertenecían a otro.
Salían de su última clase y para su suerte –o poca de esta misma– la compartía con el peligris.
Sus acciones eran inseguras, y es que dudaba si hablarle o no, quería arreglar las cosas, ya no soportaba la distancia que el mayor establecía entre ellos dos y una ráfaga de emociones lo invadían por dentro.
—Hola YoonGi... —Su voz era suave y baja. Hace tiempo no se sentía así de inseguro con el mayor.
—Mmhn, Hola. —Frunció el ceño. Aquel brillo que tenían sus ojos al verlo simplemente había desaparecido, ahora solo había oscuridad y molestia en su mirada.
—YoonGi, yo quisiera hablar contigo... —Su garganta dolía. Un fuerte nudo se hacía en ella y sus manos sudaban un poco.
—¿Sabes? Ahora mismo estoy bastante ocupado. Las clases ya terminaron y debo llegar temprano a casa hoy. Será en otra ocasión. —La frialdad de su voz perforaban en el interior de JiMin.
—Oh, vale. Entiendo. —Su voz salió mutilada y sus ojos comenzaban a arder. No quería mirarlo a la cara, no en estos momentos. Odiaba ser tan débil con él, haciendolo pensar que si tan solo fuera un poco más fuerte, no estaría sintiendo esa compresión en su pecho.
—Gracias. —YoonGi tomó rápidamente sus cosas y se fue.
No pudo más. Rompió en llanto.
¿Tanto le dolían sus palabras? ¿Tanto poder tenían sobre él?
Y es que realmente dolía. Dolía tanto. Esa presión en su pecho que le quitaba el aire y hacia que de sus ojos salieran miles y miles de lágrimas que no podía controlar.
Por qué simplemente era así. No podía controlar lo que sentía por Min YoonGi. No podía decirle a su corazón y a su cabeza un basta. Si pudiera retroceder y corregir aquellos errores que cometió, si tan solo pudiera...
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Tu de nuevo | YoonMin [EDITANDO]
FanfictionJiMin sigue pensando en él. Por fin regresará a Seúl trás estar fuera 12 años. Ya no es un niño y sabe que su amor de infancia tampoco lo es, pero lo que no sabía, era que en su Universidad se encontraría con alguien muy familiar... → "Cuando nos...