BTS being a brokenhearted

xxviii

[nm]

—Cuentame, estoy aquí para escucharte—Le dijo el psicólogo anotando los detalles en su pequeña libreta, recostando su espalda en el mullido sofá mientras cruzaba sus piernas.

Jimin suspiro, acostado en el sillón al lado del ‘especialista’, y comenzó a relatar su trauma.

—T-to-todo paso de-demasiado rápido—Empezó Jimin jugando con sus dedos— Todo inicio con una pe-pe-pequeña b-broma, si, una broma—Ahogaba las lágrimas que desean salir de sus ojos.

El psicólogo retiro los lentes de su rostro para dirigirle una comprensiva mirada de tranquilidad, aquel petizo joven había pasado por algo inexplicablemente inhumano, nadie debía pasar por semejante situación, ni Hitler, ni Bin Laden.

—E-en-entonces, simplemente.. —las lágrimas se abrieron paso por si solas y recorrieron sus mejillas— Pasó, él lo dijo, ¡él lo dijo!—lloriqueó.

—¡dejen de armar un drama por todo!—grito Namjoon.

—¡usted callese, insensible!—calló el psicólogo abrazando su paciente.

—¡Taehyung, deja de fingir ser un doctor! ¡y Jimin, no exageres!—pidió Namjoon con frustración.

—¡NEVEEEEEEEER!—gritaron ambos menores.

—¡yo tan sólo dije qu--…!—

—¡NI SE TE OCURRA DECIRLO!—le retó Taehyung y los llantos de Jimin aumentaron.

—¡YO SOLO LE DIJE: “YOU GOT NOT JAMS”!—confesó Nam.

Y Jimin siguió llorando, y Taehyung también lloró, hasta Hitler lloró, y Bin laden le acompañó.