—Y esto es así. —Le explicó todo paso a paso.
—¿Y esto como se obtiene, Hyung? —Preguntó.
Young suspiró pesadamente para luego mirar el cuaderno de su menor.
—Se supone que primero debes sacar el resultado de esto, para que obtengas esto.
Chan miró con asombro a su mayor para luego darle un corto abrazo.
—Muchas gracias, Hyung. —Agradeció el menor. Young negó.
—No tienes nada de que agradecer, después de todo para eso estoy aqui, ¿no? —Sonrió alegremente.
No podía molestarse con él, lo conocía desde que era pequeño, y era un buen chico, aunque era muy travieso era muy bueno en todas las materias, a excepción de matemática.
Esto no le iba muy bien al menor.
—Sí. —Canturreó el más joven, para luego proceder a hacer los ejercicios que le habían dejado de tarea.
. . .
Ya eran cerca de las ocho de la noche, Young arregló todas sus cosas para encaminarse a la mesita en donde se encontraba Channie haciendo aún su tarea, era la hora de irse.
—Lee Chan, ya debo irme.
El menor le miró desconcertado, se había quedado dormido durante todo ese tiempo.
—¿En serio, Channie? —Le preguntó molesto.
Había confiado en él, pero era más que obvio, se quedaría dormido si tuviera un maldito policía encima.
—Lo siento. —Contestó aún con el sueño encima.
El mayor se acercó a su menor para darle un ben golpe en la cabeza, haciendo que este chillará del dolor.
—¿Ahora qué hice, Hyung? —Preguntó molesto, estaba sobando con cuidado la parte afecta por aquel golpe.
—No sé. —Se encogio de hombros. —Tal vez te quedaste dormido por "accidente" y ahora tendrás que madrugar y yo tendré que quedarme toda la maldita noche aquí para cuidar del bebé. —Sonrió con rabia. —¿Te parece poco? —Tiró su bolso con brusquedad. —Iré a hacer café para que el niño de la casa no se duerma otra vez.
El pequeño solo permaneció en silencio mientras observaba como su Hyung salió de la sala y se adentraba en la cocina.
—No había necesidad de gritar. —Se quejó. —¡Yo estoy bien solo! —Hizo un puchero. —Y tal vez si sea un bebé, eso no te lo puedo negar.
Young bufó audiblemente, haciendo que Chan se riera.
—Que divertido. —Susurró para si mismo.
. . .
4:19AM.
—No te quedes dormido. —Su voz ronca hacia ver que SoonYoung estaba muriendo lentamente.
Y Chan, bueno él solo estaba babeando la mesa en donde se suponía que debía estar haciendo su tarea.
El mayor sacudáa con toda la fuerza que tenía a su disposición, pero solo lograba hacer que Chan roncara como una ballena.
¿Por qué diablos estaba durmiendo?
Se suponía que él era quien debería estar durmiendo ahora mismo.
—Lee Chan por lo que más quieras levántate y sigue haciendo esos malditos ejercicios. —Siguió sacudiéndolo.
—No, mañana en el instituto los terminaré. —Susurró con los ojos cerrados.
—¿Por esto me quedé aqui?, ¿para verte durmiendo como una vaca mientras yo soy el que se esta trasnochando como una sirvienta? —Le gritó molesto. Chan solo frunció el ceño.
—Duerme, llorón.
—No.
—Hazlo.
—Dije que no.
—¡Hyung no seas tan idiota y solo duerme! —Levantó su mirada. Young estaba muriendo, literalmente.
Sus ojeras eran muy evidentes, sus ojos no podían estar abiertos de lo cansado que estaba. El menor suspiró.
Este le abrazó.
—Durmamos juntos, Hyung.
—No, tu madre me matará si repruebas ese examen. —Se quejó.
—No lo hará, deja de llorar. —Se acostó en es suelo, tomando a Young por la espalda haciendo que este cayera, claro, la caía no fue tan fuerte ya que él le ayudó a recostarse en el dichoso suelo.
—Chan, si tu madre me mata, te juro que antes de que eso suceda yo te mataré a ti, niño. —Sus ojos ya estaban cerrados, pero aún seguía quejándose.
—Ajá. —Acarició su cabeza.
SoonYoung cayó rápidamente en su profunto sueño, al igual que Lee Chan. Estaban abrazados, como dos hermanos que se querían y mucho.
Minutos después llegó la madre del menor, al ver estaba hermosa escena ella se llenó de ternura. Buscó una manta y arropo con esta a los dos niños.
—Muchas gracias por todo, SoonYoung. —La señora besó la frente de cada uno y apagó la luz de la sala.
Dejando a los dos descansando en la sala.
