MUNDO PERDIDO: El nuevo futuro

Última mirada a la Luna (PRÓLOGO)

ESTA PARTE ES UNA INTRODUCCIÓN, POR ESO ES CORTA, PERO LOS SIGUIENTES CAPÍTULOS SERÁN MÁS LARGOS. ¡¡DISFRUTEN DE LA LECTURA!!

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Después de tantos años encerrados en ese lugar, ya no merecía la pena contar el tiempo. Nadie se paraba a pensar si amanecía o se hacía de noche, basicamente porque a ninguno de ellos parecía importarle el paso de cada monento, ya que simplemente pensaban que acabarían muriendo allí, sin hacer nada realmente útil ni sacrificarse por algo, a parte de que no tenían nada por lo que esperar. Su vida simplemente consistía en trabajar y esperar ese momento. 

Por lo que he dicho, pensaréis que la actitud últimamante estaba por los suelos. Y así era. Desde que abandonaron el planeta azul, las pocas veces en las que hallaban un lugar mínimamente interesante, solían pasar de largo, por el riesgo que suponía. Otras veces se aventuraban a explorarlo, muriendo bastantes personas en el proceso. En la mayoría de las expediciones, eran azotados por lluvias ácidas o vientos huracanados. En una ocasión, el agua parecía sana, pero no se fijaron suficiente en su composición. Resulta que en el fondo del mar, unas algas marinas segregaban un veneno potencialmente mortal y casi imposible  de detectar de forma constante. La excursión no acabó muy bien.

Por si fuera poco, al principio del viaje, eran varios miles de personas, pero por amenazas que surgieron y la dificultad para tener hijos en el espacio, la población se redujo a 500 seres humanos, (300 de ellos soldados y militares). 

A parte de eso, al principio contaban con 5 grandes naves, y ahora solo una, la H-5. Mientras se enfrentaban a todos esos problemas, el  resto de grupos colonizadores ya habían creado civilizaciones en otros planetas. Ellos eran los únicos que no encontraron ni un solo sitio habitable y seguro.

Pero como el todo viaje, tenían una razón para irse, y no era por gusto. Desde hace muchísimo tiempo, casi toda la superfície de la Tierra era inhabitable. Las ciudades cerca de la costa estaban inundadas por completo, arrastrando con la marea millones de cadáveres, haciendo de esos lugares cementerios marinos, sucios de sangre y barro. 

¿Y que pasó con los otros sitios? Se transformaron en desiertos, reduciendo a cero las posibilidades de vivir allí. Ya no habían ríos ni lagos, y las pocas plantas que quedaban eran secas como el cemento de las calles, haciendo que los animales herbívoros murieran, por lo que los carnívoros tampoco prosperaron. 

Pero en ese apocalípsis, todavía quedaba un rayo de esperanza, Groenlandia. Por suerte, fueron los más preparados, y era la única zona del mundo que seguía en pié después de que casi se perdiera la humanidad, donde los últimos seres humanos crearon el proyecto COM, (Colonización Interplanetaria Múltiple). Mandaron una gran cantidad de naves en busca de nuevos lugares en los que vivir, antes de que fuera demasiado tarde, y eso nos lleva a donde estábamos antes.

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Aldo observaba a su alrededor aburrido, en busca de algo que le ayudase a descansar. No dormía desde unos días atrás, por culpa de una preocupación enorme, que ocupaba sus pensamientos en todo momento. 

Se había expandido un rumor que le afectaba para mal, y no solo a él, también a todos sus compañeros. Según lo que le contaron, si no cumpliesen la misión en menos de unos meses, regresarían a la tierra. El nunca viviría suficiente para verla, pero tenía miedo de que todos esos años vagando por el espacio fueran inútiles, porque eso significaría que lo que hicieron sus padres, sus abuelos y el resto de sus ancestros, no sirvió para nada.

Abrió un cajón de la còmoda, que estaba al lado de la cama, y sacó una carta escrita a papel, tan antígua que costaba abrirla sin romper el sobre amarillento y estropeado que la contenía. Comenzó a leer:

-Buen día, mi nombre es Esteban. Si lees esto, debes de ser un descendiente de mi familia, y lo más importante, has presenciado el fin de la misión. Este material en el que te escribo, ha sido creado a partir de una planta de nuestro planeta natal, lo digo por que seguro que ya hace tiempo que se dejaron de utilizar. Aunque sea interesante, no escribo esto para hablar del pasado, sinó del futuro, así que voy a centrarme. Necesito que me hagas un favor cuando llegues al nuevo mundo. Sé que realmente no tienes por qué hacerlo, pero esto nos beneficiará a ambos. Consiste en...-

Un sonido de pisadas irrumpió su lectura. El chico escuchó con atención, hasta que se detuvieron. Alguien llamó a la puerta, y pasó sin permiso, de forma frenética y ágil. Era Clara, una compañera de trabajo con la que pasava a veces su tiempo libre. Se conocían desde niños, y seimpre compartieron el sueño de ser los primeros en pisar aquel lugar ideal que todos buscaban. 

Su expresión denotaba emoción e intranquilidad. Antes de que comenzara a hablar, él dijo de froma desanimada: -¿Que haces aquí a ahora,  no te das cuenta de que no son ni las cinco de la mañana?-

Ella respondió levemente molesta: -No entiendo de que sirve usar el horario de la Tierra, si casi ni nos llega la luz del Sol. ¡Pero eso ahora no importa, porque ha pasado algo increíble!-

-¿Increíble?-

-¿Recuerdas ese rumor del que todos hablaban hace poco?-

-Pues claro, si me lo dijiste tú.-

-¡Resulta que ya no nos tenemos que preocupar por eso!-

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EN MENOS DE UNA SEMANA PUBLICARÉ EL PRIMER CAPÍTULO (SIN CONTAR ESTA PRESENTACIÓN). GRACIAS POR SU LECTURA.