Capítulo 12

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— Mucho gusto, señora Wilson. Soy William Fairchild –mi mamá sin dudar dos veces estrechó su mano. Le dio una mirada que yo conocía perfectamente y era cuando trataba de reconocer a alguien.

— ¿Fairchild?, los de Kensington –William frunció el ceño y después sonrió.

—   ¿Fairchild?, los de Kensington –William frunció el ceño y después sonrió

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— Sí, mi familia siempre ha vivido ahí. ¿Usted los conoce? –pregunto y mi mamá sonrió como gato rizón.

— Era la mejor amiga de Alice, me imagino que ha de ser tu tía o algo parecido –dijo y William la miró sorprendido.

— ¡Sí!, mi tía Alice siempre hablaba de su amiga Ginette, mire el mundo es tan pequeño –mi madre sonrió y yo los mire confundida.

— Tu padre es Dominic, porque te pareces muchísimo a él de joven –dijo y William asintió.

— Veo que conoce a mi familia –dijo y señaló las sillas para invitarnos a sentar.

— Si, tu tía estudio conmigo en Paris, pero cuando me fui perdí el contacto. Me gustaría que me dirás su número, me encantaría volver hablar con ella – mi madre abrió su silla y se sentó. William se acercó a la mía y la abrió, después de sentarme me acerco a la mesa delicadamente, solo me guiño el ojo y se sentó.

 William se acercó a la mía y la abrió, después de sentarme me acerco a la mesa delicadamente, solo me guiño el ojo y se sentó

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— Si, si quiere se lo doy ahora mismo –metió su mano en su bolsillo del saco para sacar su teléfono y mi mamá se emocionó.

— Gracias William, quien diría que el sobrino de mi amiga fuera el jefe de mi hija. –William me miró y sonrió.

— El mundo es muy pequeño señora. Lo bueno es que ahora podrá contratar a su amiga –dijo y mi mamá asintió.

— Exactamente... y William, ¿Qué piensas de Raven?, ¿es una buena alumna? –pregunto y le mire mal. El calor empezó a subir por mis mejillas.

— Creo que es una chica brillante, le gusta su trabajo y le encanta lo que hace. Es una excelente alumna, la verdad sus calificaciones son intachables –dijo y mi mamá sonrió.

— Gracias William, es que mi hija no me cuenta mucho de su vida –gire los ojos y William río.

— Mamá, si te cuento, pero no todo –dije incomoda.

Enamorándome de mi mejor amigo: La historia continuaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora