Love in London

Cap. 39 tutoria hospitalaria

Narra Sam:

No se cuanto tiempo a pasado desde que Liam me trajo al hospital, una doctora llamada Cody a estado al pendiente de mi o al menos eso escucho en intervalos, me sedaron para no sentir más dolor y lo agradezco, me siento sumamente débil y estoy asustada, no se que pasara conmigo y porque regresó este dolor infernal que me trae recuerdos horribles

-Liam.. Donde esta Liam...- digo lentamente intentando abrir los ojos

-como te sientes?- creo que no me escucho

-no siento nada- confesé de igual forma en susurro

-aún tienes el efecto de los tranquilizantes así que no te preocupes- decía la que reconocí como Cody al oír su voz

Era castaña y de tez clara como Liam, a decir verdad tenían cierto parecido, sus ojos eran de un color miel con marrón y sus pestañas eran largas, vestía claro está una bata blanca y pantalones formales negros, tenía su mirada puesta en mi y sus manos metidas en las bolsas de la bata y su estetoscopio rodeando su cuello

-que anda mal- mi voz era frágil y no quería escuchar la respuesta

-tuviste una recaída en tu columna dado que no fuiste a las revisiones mensuales, nunca notaron que tu problema empezó nuevamente- me explico con una leve sonrisa

-y que pasara conmigo ahora- mi visión se tornó borrosa

-por ahora necesitas quedarte aquí para examinarte mejor y hacerte más exámenes- tomo mi mano al ver que cerraba los ojos

-donde esta Liam?- quería verlo y olvidar esto

-esta afuera- su voz era sutil

-puedo verlo?- pregunte esperando un si de su parte

-claro linda, el estará encantado, ahora vuelvo- acaricio mi mano y salió de la habitación

Mire la habitación y era completamente distinta a la que había estado la semana pasada, esta era más grande y lujosa, la cama era mucho más cómoda y grande, las sábanas eran de seda color perla, había un televisor plasma en la pared apagado, al lado de este había un reloj digital marcando las 12:20, a mi lado izquierdo había un sofá largo de piel color blanco pegado a la pared y frente a este había uno individual, a mi derecha estaba una ventana que estaba a todo lo largo y ancho de la pared dando a parecer que era completamente una pared de cristal, las persianas estaban cubriendo la mitad de la ventana y a lo lejos podía ver el London Eye alumbrando la gran ciudad, escuchaba el interminable y aturdesedor pitido de aquel aparato que marcaba el ritmo de mi corazón y aunque se escuche exagerado escuchaba aquel goteo que provenía del suero intravenoso que me pusieron al instante que entre a esta habitación extremadamente lujosa

Cerré los ojos por unos segundos y deje que el sonido me inundara por completo hasta el punto de no escucharlo tan fuerte, se que mi madre no le interesara si estoy hospitalizada y mi padre está en Nueva York por ahora haciendo un trato para los hoteles de mi familia, mis hermanos probablemente intenten venir pero seguramente mi madre no se los dirá o no los dejara aunque por el momento no creo que ella esté enterada, me alegraría saber que esto es una pesadilla más de aquellas que parecen tan reales hasta que te pellizcan, quisiera que esto no hubiera pasado aquí, en Londres, frente a Liam, que ellos se enteren de mi pasado me altera más, no puedo imaginar que esta pasando a continuación, y si mis piernas no responden esta vez? Si no vuelvo a caminar por mi cuenta? Si no salgo de esta cama como lo hice en el pasado?

Miles de preguntas inundan mi mente pero un sonido las interrumpe, se abre la puerta de cristal eléctrica, supongo que es otra enfermera y me sacará más sangre para más estudios o que se yo así que no abro los ojos, sólo espero el pinchazo