Solo Un Recuerdo | Chicago PD

Cap. 1

Para iniciar con esto, primero debería decir mi nombre. Me llamo Lena, tengo 21 años y estoy comprometida con un bombero de Chicago. Tengo una hermosa bebe de 5 meses de edad, ella es mí vida entera.
Aunque debo contarles algo, en estos días me he sentido demasiado agobiada. Solo cuido de mi pequeña bebe Gala y me agota solo estar en casa y presenciar aquellas cuatro paredes de cada día.
Necesitaba salir de casa aunque sea solo para correr me siento inútil de estar solamente encerrada necesito algún trabajo para distraerme, creo que seria la solución para este encierro mental que estaba teniendo.

Ahora debía ir  a la estación 51 para ver a kelly y hablar un poco con el sobre la desición que venía pensando en estos días, desde esta mañana no lo veo y lo extraño.
Me levante del sillón de mi casa para irme a dar una ducha mientras mi pequeña sigue dormida tengo que ser rápida, antes que se levante, tarde 5 minutos y salí me cambie, me puse un hermoso vestido negro con unas zapatillas cómodas blancas.

Desperté a Gala, así si se llamaba mí bebé. La cambie lo mas rápido posible por que ya era tarde le puse un vestidito rosa con unos zapatilla de charol.
La puse en el cochesito y salimos, Gala era muy tranquila y casi nunca solía llorar cuando salimos a pasear, a ella le encanta hacerlo.

No tardamos mucho en llegar, me resultaba un poco extraño ir al trabajo de Kelly, no solía ir a ese sitio. Ya que no me gustaba mucho, más por que arriesga mucho su vida y no quiero perderlo. Apenas entre escuché una voz diciendo "Hola"

—Hola buenas tardes.

—Buenas tardes, ¿Que es lo que necesita?

—Busco a mi novio —Aun me era extraño decir prometido o marido, aún no entendía el motivo pero es extraño —, Kelly Severide.

—Tu debes ser Lena la prometida del jefe —Sonríe estrechando su mano, al parecer les había hablado de mí.

—La misma —Me contagio la emoción.

—Severide nos habla mucho sobre ti —Miro a la bebé quien estaba en su coche —Que hermosa niña ella debe de ser Gala.

—Gracias.

—Yo soy Herrmann, es emocionante conocerte.

—Ven conmigo, debe de estar viendo la tele tuvo un día pesado.

Lo seguí, entramos a un comedor gigante había una cocina y una mesa enorme, unos sillones con un televisor en frente del televisor estaba Kelly sentado comiendo unas donas.

—Kelly —Lo llamó aquel hombre —, te traigo a dos hermosas damas.

—Ey —Dijo Kelly y se levantó para abrazarme y me dio un beso.

—Hola cariño.

—Hola amor —Saludo, no termino de abrazarme cuando fue directo a Gala para tomarla en brazos —¿Como esta mi niña?

—Te extrañamos —Le mencione, el sonrío para luego darle un pequeño beso a la bebé en su frente —, también quería hablar contigo

—Vamos a mi recamara allí podremos hablar .

Acepte, fuimos hacia su recamara era muy pequeña para mi gusto pero podíamos hablar mas tranquilos. El cerro la puerta y tomo asiento en la cama para estar más cómodo sosteniendo a la bebé. Comencé a hablarle sobre mis preocupaciones y mis sentimientos.

—Se que me dijiste que no debía trabajar, pero... necesitó un trabajo, estos dias me he sentido muy frustrada estando todo el día en casa amo estar allí con Gala, pero, necesito hacer algo.

—Esta bien —Respondio, me sorprendió que a la primer no se negara —¿De que trabajarías?

—No lo se aún —Me quede pensando mirando al suelo mientras Kelly jugaba con las manos de la pequeña Gala — lo estuve pensando tal vez... No se, poner un negocio de venta de pasteles.

—No eres buena cocinando —Se burló.

—Lo se, pero al menos debería intentarlo.

—Quemaras todo un barrio si lo intentas, así que hablare con el jefe haber que  puede conseguir —Dijo dándome su apoyo.

—¿Encerio harías eso por mi?

—Claro, por ti todo hermosa.

—Gracias, gracias —Lo abrase por la espalda para darle muchos besos en su mejillas y labios.

—Esta bien ya detente, tengo a Gala en brazos, provocarás un accidente.

—Esta bien amor —Me aparte de el, aún el doble de emocionada. Me acosté en la cama hasta que Kelly lograra dormir a Gala y fuera a hablar con su jefe. ¡Cielos! Estaba demasiado emocionada, por fin haré algo más que cambiar pañales, no lo digo por que no me guste, amo a mi hija pero también debo pensar en mí un poco.

De tanto emocionarme, me quede dormida y ni siquiera me había dado cuenta Kelly y Gala ya no estaban en la habitación, ¿Cuanto tiempo habré dormido? Mire mi celular y la eran las 9 de la noche, había dormído demasiado.

Me levante y fui hasta el comedor allí estaban Herrmann y otros dos hombres junto a el y la mejor amiga de Kelly que es como mi hermana por todo el apoyo que me había dado estos meses con la bebé, Shay, ella tenia en brazos a Gala, todos estaban pendientes de la bebé.

Publicada el 14/02/18.