Capítulo 8 - El primer día

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En el momento que pisamos aquella entrada del campamento...

·YAH! -gritó Avellana de golpe y subiéndose encima mía.

·¿Qué demonios haces? ¡Bájate de mi ahora!

·Para tu información solo estaba protegiendote, escuché un sonido de una bestia y salté para defenderte-puso sus manos en sus caderas y elevó su mentón con aires de superioridad -deberías de agradecerme.

· Agradecerte? Pero serás...

· Vaya manera de recibir a alguien llamándole bestia.

Todos nos detuvimos, bueno menos Bel que estaba entreteniendose mirando una mariposa que había por ahí. Cuando nos giramos Avellana se le calló la boca y por un instante tenía miedo de que se le cayera al suelo, luego se puso a gritar palabras indescifrables para acabar poniéndose de rodillas delante de aquella extraña.

· A-Almendra, no sabía que estarías por aquí.

· ¿Cómo no iba a estarlo? Se ve que olvidaste que me comandaron para entrenar a los jovenes guerreros- sus ojos se encontraron con los míos- vaya vaya, ¿no me presentas a tu nuevo amiguito?

Por qué me tengo que poner nervioso en estos momentos... Justo ahora debería de sonreír o cosas así pero me quede haciendo una mueca extraña y juraría que estaba dando una imagen errónea sobre mi por la cara de Bel. Por mi suerte habló Avellana por mí.

· Este frutito delgadito y irritable es Cacahuete-me golpeó en los hombros con intenciones de que de un paso al frente y así lo hice- es el de la profecía

·Ohh~así que... -comenzó a caminar "sensualmente" al rededor mía, y pongo comillas por si acaso... Estoy en la época donde mi sabia se revoluciona- eres el que va a matar al gran mago?

·Ehh... Si si, yo... Sí.

· Madre chaval no sabía que podrías ponerte así de nervioso- comenzó a reírse mientras que yo lo miraba de mala gana, bueno como siempre.

· Bueno bueno, ¿que tal si vamos dentro y te voy explicando las cosas? Vas a aprender a luchar espero que no tengas la mentalidad de que esto sea un camping.

· N-no no, sé q-que esto va a s-ser duro.

Dicho esto y ganándole unas risas por parte de Avellana, la tal Almendra me guió por el campamento enseñándome las instalaciones; las salas de entrenamientos de distintas clases que ellos entrenaban, campos de recresmientos de batallas para que otros se enfrenten con otros (sin llegar a matar obviamente), tiendas que según tu nivel podías intercambiar armas y alimentos a cambio de recados o materiales que te pedían, las habitaciones y finalmente llegamos a una especie de mini plaza donde habían tres tiendas de campaña enormes.

· En estas tres tiendas es donde se reunen las tres clases de luchadores que entrenamos, en la tienda verde se encuentran los cazadores, personas ágiles, astutas y con mucha paciencia no dudarán en hacerte daño pero solo en el momento justo, en la clase de cazadores se suelen clasificar luchadores arqueros y asesinos, ten cuidado con ellos giró para seguir hablando pero esta vez se dirigía a la tienda del centro- en la tienda roja se encuentran los luchadores guerreros, valientes, apasionados y leales, estos tienen resistencia y causan un daño atroz pero suelen ser mas lentos que los demás, los luchadores que se encuentran son los guerreros de lanza/espada y en ocasiones escudo pero eso también depende de la persona, y los berserker con estos mejor que ni te enfrentes son los mas brutos que vas a encontrar, suelen usar hachas y básicamente armas que tengan pinchos que te destrozan vivo- al terminar me angustie un poco porque no me veía en ninguno de las clases mencionadas aún así escuché lo último que tenía que decir Almendra sobre la última tienda- y por último, la tienda amarilla es la de los hechiceros, gente inteligente, sabia y con un sentido del aprendizaje subdesarrollado que los demás, estos luchadores son como el término intermedio, aunque cabe a destacar que las velocidades y el ataque mágico es lo mas destacable, entre los luchadores tenemos a los bardos, mediante un objeto y un canto o recitando palabras pueden provocar hechizos impresionantes y los objetos pueden variar entre un anillo, un collar, una baraja de cartas, una varita... El caso es que si eres este luchador el objeto te elige a ti en vez de elegirlo tu, y por otro lado tenemos a los hechiceros, magos que no dependen de ningun objeto solo de su poder mental, a diferencia de los bardos que suelen usar mágia no tan grande los hechiceros al usar poder mental suelen crear hechizos bastante mas llamativos como invocar espíritus, crear campos mágicos como defensa etc, el problema es que al usar poder mental éstos se cansan mas rápido que los bardos ya que los bardos no necesitan gartar tanta energía.

· Vaya si que hay cosas...- ¿soy el único que piensa que quedó como estúpido? Osea ella me dice todo eso y voy y suelto eso, ¡agh maldita timidez!

· Bien, ¿estás listo para averiguar tu destino como luchador?


El dios KkweteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora