Querida Isabel:
Ayer me encontré a tu hermano el mediano, se le ve cansado de la vida, es todo un casanova. Me recuerda mucho a mí, eso no me gusta. Va por la vida haciendo lo mismo que yo te hice hace unos años atrás. Pobre chico, no sabe el final que le espera.
Intente aconsejarle, pero me mandó a la gran mierda. Me dijo que no soy nadie para decirle que hacer y ¿sabes? tiene toda la razón, una basura como yo no es nadie para andar dando consejos, cuando yo fui quien lanzó la primera piedra a todo esto.
Lo siento Isa, no pude hacer nada por él.
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Cartas a un viejo amor
ContoQuerido tú, sé qué hace mucho tiempo lo nuestro acabo y lo entiendo, lo que no entiendo aun es la razón por la cual sigues rondando en mi cabeza, escabulléndote a cada segundo en mis recuerdos, siendo el fantasma de mis anhelos y deseos sin complet...