-Louis, verás esque.-No se me ocurría nada para escusarme y poder desaparecer de ahí.
-¿Sí?.-Dijo.
-No... No me encuentro muy bien, será mejor que me-Dije.
-¿No estás bien? ¿Te duele algo?.-Preguntó preocupado, eso es lo único que conseguí, preocuparle.
-E-Esque, estoy cansada.-Dije.
-Tranquila, sientate.-Dijo dandome la mano y acompañandome hasta el sofá.
-Ahora vengo con un baso de agua y una pastilla.
-¿Una pastilla? Louis... sólo estoy cansada no te preocupes.-En parte me daba pena, estaba preocupado
-Si, bueno, no es una pastilla, son como vitaminas.-Genial, hasta vitaminas tienen en esta casa.
-Tu tranquila, tú sólo túmbate. Ahora vengo.-Dijo, desapareció tras una puerta de aquella casa.
Pensé en salir corriendo, esque... Ver a Zayn y a Niall. DIOS Niall... Hoy le he dicho que no a quedar porque había quedado con Louis, no quiero ver su cara cuando me vea aqui...
-Tierra, trágame.-Supliqué en voz alta.
Medio minuto después Louis salió por la puerta entrando al salón (o como se le pueda llamar a eso) y se acercó con las supuestas vitaminas y un vaso de agua.
-Toma, te sentirás mejor ya verás.
Yo agarré el vaso y me tomé las vitaminas. La cosa no para de mejorar. (Clara ironía)
-Escucha.-Dijo Louis.
Nos quedamos en silencio, no tardé en escuchar gritos y risas que venían desde fuera.
Se escucho un:
-¡Malik, una carrera!.
Esa era a voz de Niall. Dios. Alisson Sanz, atragántate con una de estas malditas vitaminas o sal por la ventana del baño. Pero era imposible. Además, seguramente no habría un baño.
-¿Estás mejor?.-Preguntó el oji verde.
-Si.-Dije rendida. No quería liar más las cosas.
Él sonrió. Nos levantamos y salimos por la puerta, ví a dos chicas, ambas con el pelo liso y oscuro, una tenía el pelo más largo, y la piel mas clara, y era más alta, y la otra tenía una estatura normal, y era más morena. Una sería Mirari, la otra nose, pero no paraba de reirse, y hacía reir a la otra, parecían simpáticas. Por otro lado había muchos más chicos. Vi a Niall y Zayn haciendo una carrera en bici y había otros tres chicos más. Pero estaban de espaldas. Así que no les vi,dos del pelo ondulado y otro moreno. Serían unos ocho aproximádamente.
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Amando a través de miradas.
RomanceCuando el invierno terminaba, y las ultimas gotas de lluvia colgaban de las ramas de los arboles de la ciudad de Londres, aparecí yo. Tras la separación de mis padres tuvimos que mudarnos desde España y empezar de cero. Sin amigos del pasado ni gent...