Capítulo 1: una rata soñadora

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Remy definitivamente se consideraba distinto a su familia; mientras los demás se dedicaban a robar comida para sobrevivir y hacer el nido más grande; ella era una rata que había desarrollado un olfato fuera de lo ordinario y tenía un talento para la cocina. así que una de sus más grandes metas en la vida era convertirse en el más grande chef que existía y seguir los pasos de su héroe Auguste Gusteau; cuyo lema era "Cualquiera puede cocinar"

y por tal razón, él no se rendiría hasta cumplir su más grande sueño.

un día; Remy estaba decidido a preparar un delicioso platillo para su familia y hacer algo diferente para variar; cuando descubrió a su hermano mayor Emille huzmeando entre la basura con el propósito de buscar algo de comer.

-¡Emille, ¿qué estás haciendo?!" Remy exclamó horrorizado al ver que su hermano estaba a punto de comerse una fruta echada a perder.

"tengo hambre...ya sabes que cuando estoy nervioso como" Emille contestó a punto de comerse la fruta.

"No!!! escupe eso!!" Remy exclamó. "¿cuántas veces te tengo que decir que no comas cosas de la basura?" la rata se llevó la mano a la cara con frustración. "definitivamente te tengo que enseñar a comer; ven conmigo"

"¿qué vas a hacer? no podemos entrar a la casa de la anciana y si papá se entera que salimos sin permiso estaremos en graves problemas" Emille susurró a punto de darle otro mordisco a la fruta; afortunadamente Remy le arrebató la basura y la olfateó horrorizado al ver que en realidad la fruta no estaba echada a perder y tenía veneno para ratas.

"no comas eso!" Remy exclamó tomando el brazo de su hermano y lo llevó hasta el pasto. 

"sólo era basura" Emille dijo inocentemente.

"era algo mucho peor...¡estabas a punto de comer una fruta con veneno!" Remy respondió. "¿recuerdas lo que pasó la última vez? papá casi muere por comerse una verdura alterada"

"Aún así no creo que sea una buena idea" Emille volvió a decir cuando de repente Remy abrió los ojos como platos y descubrió entre las hierbas una fruta; la más jugosa que existía y después encontró queso. "Intenta probar esto" su hermano tomó la fruta y se la tragó. "¡No! No! No! No sólo te la tragues!" él añadió dándole otro pedazo de fruta. "Mastica despacio...piensa en el sabor"

-¿sientes una sensación de cosquilleo y un poco ácido?- Remy preguntó.

-lo tengo- Emille respondió hablando entre bocados.

-ahora prueba esto- la rata respondió dandole a su hermano un pedazo de queso.  Emille lo tomó y volvió a masticar. -es una sensación suave, que se derrite en tu boca, salado?

-mm?- Emille simplemente se limitó a masticar.

-ahora pruébalos juntos- Remy indicó asombrado.

Emille cerró los ojos y fue masticando despacio tal y como su hermano le indicaba; sin pensar en nada más, sólo en combinar los sabores y degustar la comida.

"Ahora imagina los sabores en sensaciones infinitias! Sensaciones que nunca nadie haya probado antes! ¡sabores por descubrir!" Remy exclamó con asombro.

"Remy....Remy...¡Remy!" una voz que no era la de su hermano trajo al pequeño ratón de vuelta a la realidad y se encontró cara a cara con Django; su padre, quien no lucía para nada contento. "Deja de soñar despierto y come tu basura"

"Papá, ¿por qué tienes que interrumpirme cuando sueño?" Remy preguntó mientras miraba con desagrado un pedazo de queso viejo. "No tengo ganas de comer esto"

"Tendrás que hacerlo y tienes que dejar de pensar en fantasías y poner las patas sobre la tierra" Django le dijo a su hijo. "Somos ratas y tú tienes que actuar como tal. No quiero ver que te mezcles con los humanos y menos que hables o actúes como ellos"

"¿pero y si quiero ser una rata diferente y dejar mi huella en el mundo?" Remy preguntó. "Tal vez yo quiero inventar cosas en vez de robar comida"

"Ni una sola palabra" Django respondió. "Ahora come tu basura y se acabó la discusión"

Remy suspiró de frustración y vio que todos los demás lo miraban en shock por lo que acababa de pasar; normalmente una rata no pensaba como un ser humano y por esa forma él tenía constantes altercados con su padre.

Aún así él tenía la esperanza de cumplir su sueño como un gran chef gourmet.


A/N: ahí tienen el primer capítulo; espero que les guste. Yo no soy dueña de Coco y Ratatouille porque es propiedad de Pixar pero la historia es mía. En el segundo capítulo conoceremos a Miguel y como es su vida en Santa Cecilia.

Una aventura en París (crossover de Ratatouille y Coco)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora