prologo

16.5K 577 55
                                    

  El mismo día de la invasión del Kyubi no Yoko a la aldea Konoha, el cuarto Hokage Minato Namikaze se sacrificó para lograr que su esposa, Kushina Uzumaki, sobreviviera con sus dos hijos, Naruko y Naruto, y en ellos encerró al temible Biju. En su hija Naruko fue sellado el chakra del Kyubi, mientras que su cuerpo y alma fue al interior del pequeño Naruto. Misteriosamente el sello quedo plasmado en el estómago de Naruto, pero con Naruko no quedo sello alguno. Pero los problemas no se iniciaron allí, poco después de eso hubo una junta del consejo para discutir un gran problema que tenían.

-Entonces como queda expuesto en el tratado entre los países elementales, los jinchuriki no pueden ser adoptados o estar bajo custodia de una sola persona para evitar ser mal influenciados –Explico un anciano de cabellos negros que parecía ser más una momia que un ser humano –Así que el pequeño Naruto Namikaze debe de estar en custodia de la aldea y no de su madre, a menos que decidan déjamelo a mí para que lo entrene y hacerlo alguien productivo para la aldea

-¡Pero eso no puede ser, soy su madre y puedo cuidarlo! –Grito Kushina enfadada -¡Yo soy de los ninjas más fieles de la aldea!

-Lo lamento Kushina, pero por más que me duela Danzo tiene la razón –Exclamo con gran pesar el Sandaime Hokage Hiruzen Sarutobi –Pero aun así, no se quedara con Danzo, el será un miembro de la aldea

-¡Hokage-sama, por favor recapacite! –Grito uno de los civiles levantándose de su lugar -¡Esa bestia debe morir!

-¡No podemos! Si Naruto muere el Kyubi también lo hará –Protesto Danzo de inmediato

-¿Solo piensan en el Kyubi? –Exclamo una molesta Kushina –Es mi hijo del que hablan, lo tratan como si fuera...

-¡Un monstruo, porque eso es lo que es! –Grito otro de los integrantes del consejo civil enfurecido -¡Por su culpa se perdieron muchas vidas!

-¡Silencio, la decisión ya está tomada y aquel que le ponga una mano encima será ejecutado, ¿Entendieron?! –Grito el Sandaime con una voz autoritaria a la cual nadie se pudo negar o discutir

El tiempo paso poco a poco y Naruto creció en soledad, los adultos lo golpeaban y los niños se alejaban de él, casi nadie se atrevía a acercarse a hablar con él a excepción de Kushina que de vez en cuando iba a verlo sola y a platicar con él. Cuando Naruto cumplió 8 años, el Hokage le dio su casa propia para que saliera del orfanato donde lo tenían y pudiera comenzar a ir a la academia ninja en unos dias, para desagrado de muchos.

El mismo día que Naruto cumplió los 8 años, Kushina lo invito a su casa para que fuera festejado junto con su hija. Naruto llego vestido con una playera negra con una flama roja y un short café, además de sus típicas sandalias. Al entrar encontró a Kushina viendo a varios niños ir y venir por la casa riendo y jugando con una niña muy parecida a él, solo que su cabello rubio estaba peinado en dos trenzas y llevaba un vestido azul oscuro. Allí mismo también se encontró a Sasuke Uchiha, un niño de cabellos azabaches y ojos negros, con una mirada alegre y tranquila, iba vestido con una camisa negra de cuello alto y un short blanco, este iba también con su hermana menor Shigure Uchiha, una chica de cabellos negros amarrados en una coleta y de ojos parcialmente grises.

Después de jugar todo el día, Naruto durante la noche volvía a su departamento y como siempre no se hicieron esperar las persecuciones por la aldea, pero esta tenía algo de diferente, no solo había borrachos entre el grupo de perseguidores sino también varios ninjas armados que los perseguían con ira en sus ojos.

Llegaron hasta uno de los campos de entrenamiento y fue cuando comenzó el infierno para Naruto, un kunai le rozo la mejilla e inmediatamente intento salir del lugar, pero fue detenido por varios aldeanos que comenzaron a golpearlo con piedras y palos que llevaban consigo.

El cazador del infierno (Naruxharem)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora