Elif P.O.V
-¡¿Pero qué mierda!?-Grite saltando de mi cama
-Esa boquita-Mi padre estaba en la entrada de mi cuarto con una corneta en las manos
-¿Cómo quieres que no me espante si tocas eso en la madrugada?-Dije acomodándome de nuevo para dormir pero él se apresuró y me quito las cobijas
-No seas dramática, que así mismo levante a tus hermanos, quiero que te alistes por que no tarda en llegar su entrenador-Dijo cerrando la puerta
De mala gana me levante, me vestí y baje. Ahí ya estaban todos, y me refiero a Ethan, Thomas, Dove, y mi padre.
-¿A qué hora llegara?-Me lance al sofá
-No tarda en llegar-Contesto mi padre con la mirada perdida en su móvil
-Una pregunta ¿Aquí entrenaremos?-
Dijo Thomas dándole un sorbo a su taza llena de café
-No, no quiero que los vecinos vean a como les enseñan cosas… diferentes-Dijo mi padre con una sonrisa
-Si yo tampoco estaría muy orgullosa-Dije entre dientes
-Estará aquí en 5 minutos, salgamos para no perder tiempo-Mi padre agarro su bolso y salió
Todos de mala gana lo seguimos, nos sentamos en la banqueta y esperamos, efectivamente no tardo ni 5 minutos cuando una gran camioneta negra se estaciono enfrente de la casa.
Nos quedamos en silencio por un rato, la puerta del conductor se abrió y de ahí bajo nuestro “Entrenador” que no parecía uno en sí, sino en un modelo de Dolce & Gabbana o de Calvin Klein.
Mi mandíbula cayó completamente al suelo cuando lo vi acercarse, era alto, muy pero muy musculoso, con una bonita sonrisa, sus ojos eran color chocolate y por un momento me perdí en ellos, su cabello era café claro, era prácticamente un dios griego.
-Mucho gusto, mi nombre es Michael Schell y seré su entrenador-Dijo sonriendo
-Mucho gusto, soy Eth…-Pero el tal Michael lo interrumpió
-No es necesario que se presenten sé exactamente quienes son, Ethan, Thomas, Dove y Elif ¿Me equivoco?-
-No-Thomas lo miraba demasiado serio para mi gusto
-Bien, creo que es hora de irnos, tenemos mucho trabajo que hacer-Dijo y se subió nuevamente a la camioneta
Todos hicimos lo mismo y el arranco.
-No creo que hagamos mucho, tenemos clase a las 8, y eso es dentro de 3 horas-Dijo Ethan
-No te preocupes hijo, hable con el director y me dijo que no había ningún problema en que faltaran hoy-
Mi padre nos sonrió como si hubiera hecho lo mejor del mundoTodos volvimos a guardar silencio hasta que llegamos a nuestro destino, todos bajamos e inspeccionamos el lugar.
-¿Estamos en una bodega?-Dije viendo a Michael
-Eres una gran observadora-Dijo guiñándome el ojo
Nos adentramos a la bodega y por segunda vez en el día mi mandíbula cayó al suelo, había una mesa repleta de armas de diferentes tipos, habían figuras especiales para disparar, y otras para practicar golpes.
-Estoy soñando ¿Verdad?-Dijo Dove viendo a Thomas
-Quisiera que fuera un sueño-Dije mirando a mi padre que ahora si tenía la mirada fija en los cuatro