Sangre Lobuna ® [#Inconclusa]

Capítulo 7 : Comienzo de una nueva vida.

Jason:

Nos subimos a un auto algo viejo que está estacionado en la parte trasera de la fábrica, y emprendemos camino hacia el pueblo.

El auto parece ser de Matt, ya que el está manejando. A pesar de la herida que tiene a un costado del torso, no luce tan mal, de vez en cuando lanza un quejido de dolor. Solo eso.

Después de unos minutos de camino silencioso en el auto, llegamos al pueblo y nos detenemos en una pequeña casa de color blanco.

Nos aseguramos de que no halla nadie cerca y salimos del auto rápidamente. Matt y yo sostenemos a Alik, quien apenas puede mantener los ojos abiertos, y nos acercamos a la casa.

Robert toca el timbre y una chica de cabello rubio y ojos azules nos recibe en la puerta.

—¡Oh por Dios!— dice cuando ve nuestra facha, mientras abre la puerta completamente para que pasemos— ¿Qué les pasó?

—Larga historia. —dice Robert mientras Matt y yo colocamos a Alik lentamente en uno de los muebles de la casa.

La chica sale de la sala con pasos rápidos y entra a lo que parece ser su habitación. Ella lleva puesto unos leggins grises y una sudadera verde.

Cuando vuelve, lleva un botiquín de primeros auxilios en las manos —Vaya manera de comenzar mi día libre, justo cuando iba a hacer mi rutina de ejercicios. —dice lanzando un largo suspiro.

Con unas largas pinzas y una increíble destreza, la chica retira la bala y la flecha del cuerpo de Alik, y luego sutura sus heridas con extrema delicadeza, para luego ayudar a Matt y a Robert.

Esa chica es muy buena tratando heridas, tiene que ser algún tipo de enfermera o algo, si no, no me explico esas grandes habilidades medicas.

—Listo —Dice la chica poniéndose de pie de un brinco luego de acabar con Matt.

Sus ojos se postran en mi por primera vez desde que llegamos -que fue hace mas de cuarenta minutos por cierto- y entrecierra los ojos un poco. Supongo que estaba muy concentrada en su trabajo —¿Quién es el?

—El... es el nuevo miembro de la manada —Dice Robert quitándose los zapatos para acostarse en uno de los muebles libres.

¿Manada? ¿Cuando me uní a una manada?

—¡Oh, genial! —Se acerca a mi rápidamente y toma mis cachetes con ambas manos— ¡Ay, es lindo!

¿lindo?

Bueno, no es que no lo sea pero... nadie me lo había dicho antes. Me sonrojo.

—Dejalo Ana, lo vas a espantar —Dice Matt mientras saca una cerveza del refrigerador y la destapa con sus manos para dirigirla a su boca.

—No seas aburrido —La chica voltea los ojos dramáticamente— ¡Ah, por cierto! Soy Ana —Dice soltando mis cachetes para luego abrazarme— Hace tiempo que no tenemos un nuevo miembro en la manada.

Es muy simpática, me agrada.

Miro el reloj de pared, y me doy cuenta de lo tarde que es. Ya no podré ir a la escuela.

Es época de exámenes y yo aquí, con un grupo de... licántropos, o lo que sea que sean estas personas.

—Y... ¿Como te llamas? —Me pregunta Ana sacándome de mis pensamientos.

—Jason.

—Jason... me gusta tu nombre —dice tomando asiento y señalando una pequeña silla libre— vamos, ponte comodo.

Yo obedezco y me siento en la silla.

—Y... ¿Ya conoce a toda la manada? —Le pregunta Ana a Robert.