Hunters (Final Fantasy, Noctis-Serah)

Capítulo 12: Regreso a Insomnia.

¡Una locura! Eso era lo que todos pensaban. Los rumores que llegaban no eran nada buenos y por momentos, Gladio y el resto de guardaespaldas pensaban en retroceder, pero Noctis parecía empeñado en regresar a su ciudad. Se encontraban en Lestallum, una de las ciudades más grandes del reino de Imsomnia y allí, todos hablaban sobre cómo el ejército del Nido había sido devastado en la capital, decían que la ciudad se había cernido en la oscuridad y el gran consejero del Rey del Nido se había apoderado de la ciudad tras traicionar y asesinar al Rey.

Aquello fue como un mazazo para Aranea, al fin y al cabo, era su padre del que estaban hablando, pese a las cosas malas que había podido hacer. Dejarse asesinar por su consejero Ardyn Izunia no era algo que tendría previsto. También a Noctis y a su equipo les había pillado de improviso. Toda una buena estrategia que le había salido a pedir de boca y ahora... usurpaba el trono de su padre. Seguramente... hasta controlaba a parte del consejo del Nido si es que no le habían echado tras los rumores del asesinato del Rey. Algo que tampoco debía importarle, puesto que sólo parecía tener intereses en Insomnia.

- ¿Por qué urdir un plan como éste sólo por una ciudad? – preguntó Zack algo consternado.

- No es por la ciudad – dijo Noctis – sino por lo que tiene la ciudad. Quiere el cristal, es lo que mantiene a los monstruos alejados de la ciudad. Aún no comprendo sus planes exactos pero... sin el anillo no podría hacer nada con el cristal.

- Y por suerte lo tenemos nosotros – comentó Ignis.

- O por desgracia. Sin anillo, el cristal no sirve de nada y la ciudad debe estar llena de monstruos. Mi duda es... ¿Por qué quiere una ciudad llena de monstruos? También sería un peligro para él, ¿no?

- Quizá, es porque a él no le afectan esos monstruos – sugirió Serah – como cuando yo me convertí en cristal, los monstruos no eran un problema.

Todos dudaron un momento. ¿Cómo podían los monstruos no afectarle? Era imposible siendo humano, todos les temían y más en ese tipo de ciudades tan grandes donde no tenían que enfrentarse a ellos. Se sentían seguros y cuando una tragedia ocurría... es cuando se veía cómo la gente se había adaptado a esos tiempos de paz, donde ni eran capaces de defenderse. Muy diferente a lo que era en el Gran Paals con tantos cazadores y luchando por la supervivencia todos los días.

- Vayamos a Imsomnia cuanto antes – agregó finalmente Aranea – si ese tipo mató a mi padre, yo mismo lo vengaré, así sea lo último que haga.

- Eso está muy bien... pero, ¿qué ocurrirá si los del Nido piensan que fuimos nosotros? Los rumores por aquí es que fue Ardyn pero... ¿Y si nos ha echado el problema a nosotros? – preguntó Ignis.

- Aun así... tenemos que ir a Insomnia – aseguró Noctis.

- Vayamos y una vez allí, podremos ver mejor cuál es la situación – acabó comentando Noel – no podemos especular hasta que no veamos cómo está realmente la situación.

Noctis se levantó de la silla en la que estaba, acercándose a la ventana del hotel que los hospedaba mientras el resto de los presentes, daban la reunión por concluida y se alejaban del lugar. Serah fue la única que, pese a levantarse, se quedó allí estática unos segundos, observando la espalda de ese chico inmerso en el ambiente de fuera.

- Noc...

- Estoy bien – le añadió Noctis sin siquiera girarse.

- ¿Estás seguro? Era tu padre y...

- La muerte es algo que nos afecta, Serah, pero la verdad es que todavía no me he hecho a la idea de que no volveré a verle. De todas formas, dicen que la ausencia empieza a notarse a los pocos meses, es cuando realmente te das cuenta de que ya no está y no volverá. Es mejor acabar con todo esto ahora. Cuanto antes mejor.