Grey: ¿Por qué vamos a hacer esto si se supone que estais muy cansados?
Yo: Las ganas me pueden.
Dai: Y a aprte, hacia bastante tiempo que no hacia este tipo de cosas.
Grey: Es verdad, no podemos dejar morir al antiguo Dai.
Yo: Venga, vamos a avisar a Yume.
Grey: Stop.
Yo: Why?
Grey: No me digáis que soy el únicos que se ha dado cuenta.
Dai: Tranquilo, solo es Seika.
Yo: ¿El que?
Grey: Yume no sabe nada de esto, ¿verdad?
Yo: Puff, es verdad, pero pobre de ella.
Dai: No pasa nada por dejarla un día sola.
Grey: Eso si que es ser cruel. Yume esta loca por ti.
Dai: Ya, pero bueno, no tengo que estar esclavizado a eso.
Yo: Eso es verdad.
Grey: ¿Te gustaría que yo te hubiese hecho eso Seika?
Yo: Eh, no, pero lo nuestro es distinto.
Dai: Eso es verdad, sois pareja, así que duele más, a parte Grey, a ti también te duele estar separada de mi hermanita.
Yo: ¡No lo digas en voz alta!
Grey: Oh my Good. Podemos hacer eso y luego ir a por Yume.
Yo: Podemos ir a cenar por ahí los cuatro, como antes.
Dai: Tu misma lo has dicho, como antes, no se si nos dejarán.
Grey: Les suplico, seguro que eso funciona.
Dai: No tienen ni idea de que tu sabes esto. NI de que estais saliendo.
Yo: Es verdad, si lo llegan a saber, no quiero pensar en las consecuencias...
Grey: ... Bueno, ya haremos las cosas a medida que pase el tiempo, no somos de hacer planes por adelantado.
Yo: Se nota que esta nueva vida nos está cambiando – Los dos asintieron y nos fuimos hacia la plaza más cercana.
Grey: ¿Como hacemos esto?
Dai: Tengo una buena idea – Sacó esa sonrisa malvada que desde hace tiempo no veíamos.
Yo: Jajaja, esa cara dice mucho.
Grey: Comida, ¿verdad?
Dai: Sep, vamos a esa tienda, hay bastante gente, podemos aprovechar eso.
Yo: ¿Y si sale mal?
Dai: No pienses eso, venga, como en los viejos tiempos.
Grey: No tan viejos, ha pasado tres semanas desde la ultima vez que hicimos algo parecido.
Yo: Vamos allá – Nos levantamos del banco, entramos a la tienda y decidimos coger un buen queso de romero y aceite. Básicamente esto también nos beneficiaba para manejar mejor nuestros poderes y podíamos mejorar la disimulación. Nos acercamos al pasillo de quesos, cogimos el que tenia mejor pinta y Dai se lo metió bajo la camiseta - ¿Qué haces?
Dai: ¿Yo? Nada.
Grey: Hazlo pequeño.
Dai: No, Hay mucha gente, vamos a otro pasillo – Cuando llegamos a un pasillo donde podíamos maniobrar Dai cogió su diamante, pero en vez de hacer la espiral en la mano, hizo una raya encima del queso y salió una flecha a la izquierda, a medida que lo fue moviendo hacia la derecha el queso se iba haciendo pequeño, hasta que quedó del tamaño de un dado.
ESTÁS LEYENDO
El mundo a donde iremos
RandomSeika es una chica del montón que vive en Tokyo, vive con su tía ya que nunca conoció a sus padres, pero eso no le deprime, para algo están sus amigos, siempre le levantan el animo, pero últimamente Seika lo esta pasando mal por así decirlo, lo que...