❄️Capitulo 4❄️

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Maratón 4/5

Cuando llegamos a Berk aterrizamos frente al taller de Bocon, ahí estaba mi papá y otras personas de la aldea

Cuando baje de chimuelo las personas me ovacionaron un poco, supongo que aún están agradecidos o algo

― ¡Ahí esta! El orgullo de Berk

― Quien finalmente decidió llegar a trabajar ¿Por qué no lo trajiste antes Jack?

― Pasaron algunas cosas, que el les cuente

Mire a Jack con un poco de reproche, había veces que no me ayudaba nada

Entre al taller donde había trabajado desde los ocho años, esquive el golpe que casi me da Bocon y camine hacia mi padre

― Oye, pa ¿Tienes un segundo?

― ¿Hay algo que te mueres por decirme? ― Dijo con una extraña emoción

― Bueno, espero no morir al decirlo, pero si

Jack se acerco a mi mientras mi papa me daba un mandil

― Creo que no te va a escuchar, tendrás que obligarlo

Asentí y seguí a papa

― Lección uno, la prioridad de un jefe es su pueblo ― Quito la tabla de madera que tenía el cero y quedo el uno ― ¡Cuarenta y uno! ¡Cuarenta y uno!

De entre las personas salió un hombre con la barba negra y casi tan larga como la de mi papa, saltaba sobre si mismo tratando de llamar nuestra atención

― Llevo aquí todo el día, ahora, quiero una de esas sillas altas ¡Con muchos picos! Y un gran compartimiento para carga

― Por supuesto señor, enseguida lo haremos

Papa volteo y me llevo caminando, Jack me animo a decirle y yo regrese la vista a mi papa

― Eh Pa, en realidad... esto es un poco mas importante que... hacer sillas

― Lección número dos, ninguna tarea es demasiado pequeña cuando se trata de servir a tu pueblo

Trata de llamar la atención de papa de nuevo, pero parecía que todo era en balde. Jack y Astrid me seguían animado, pero para ellos es muy fácil decirlo, no tienen al jefe de la tribu enseñándoles como ser un buen líder

― ¡Se acabo! Te voy a poner en adopción ― Bocon le grito a Gruñón, su dragón, porque hizo explotar el horno, las carcajadas de Jack se escuchaban hasta donde estaba y vi como ayudaba a Bocon para que no saliera mas humo

Seguí a papa que estaba tomando unas herramientas para hacer la silla, yo tomé las demás aun balbuceando cosas para que me hiciera caso

― Tengo que hablarte sobre este nuevo lugar que encontramos

― ¿Otro lugar? ― Pregunto Bocon

― ¡¿Hay nuevos Dragones?!― Grito Patapez saliendo de la nada

― Pues no nos quedamos para averiguarlo, estas personas no son particularmente amistosas

Papa hecho la tela para la silla sobre el molde que teníamos y comenzó a marcar

― ¿En serio? ¿Tu furia nocturna y el Nadder Mortifero no los hizo gritar de pánico? ¿Y el hielo de Jack no los asusto ni un poquito?

― No fue necesario

― No esto fue diferente, no fue la clásica correteada a la que estoy tan acostumbrado― Marque otras cosas de la silla en la tela― Ellos son cazadores, de dragones

― Hubieran visto su fuerte― Hablo Astrid ― Estaba hecho pedazos y cubierto de picos enorme de hielo. Fue extraño

― Y sorprendente, creí que yo era la única criatura que podía lanzar hielo, pero al parecer estábamos equivocados

―Yo jamás había visto nada igual y lo peor fue que creen que fuimos nosotros, digo, tenemos a Jack con nosotros, pero el no hace esas cosas, no destruye un fuerte de la nada, con personas y dragones adentro

― Exacto, lo dijo el hombre, fue un dragón

―Oigan ustedes tres van a meterse en verdaderos problemas ― bocon cambio su garfio por un sebillo y comenzó a cepillarse el bigote― No todos aprecian este estilo de vida

― Si, Bocon tiene razón, mejor nos ocupamos de los nuestros, además, tendrás mas cosas importantes que hacer con tu tiempo ― Me acerque a papa ― Una ves que demos la gran noticia ― Canturreo mientras se frotaba las manos

Pare la cortadora que papa había encendido y lo mire con el ceño fruncido

― Están formando un ejército de dragones, o al menso el hombre que los dirige Dargo Duramano, algo asi

Papa abrió muchos los ojos y Bocon igual

― Le voy a endurar la mano con mi cara si intenta llevarse mi dragón ― Grito Brutacio que salió de la nada

―O el mío

― Ay, eres una bruta

Papa tomo mis hombros

― ¿Drago Manodura?

― Ah sí, espera ¿Lo conoces Pa?

Papa levanto el rostro y miro lejos, como si estuviera pensando

O recordando

Después salió corriendo y comenzó a dar ordenes a diestra y siniestra

― ¡Que no vuelen los dragones! ¡Cierren las puertas!

― ¡Rápido ya lo escuchaste! ¡Cierra todo!

Por mas explicaciones que le pedía no me las daba, Astrid, Bocon Jack y yo lo seguíamos por detrás escuchando todo lo que decía

―¡Ningún dragón o vikingo pondrá un pie fuera de esta isla hasta que yo lo ordene!

― ¿Qué? ¿Por qué un loco que conociste esta causando estragos en tierras apartadas?

―Porque Dragon Manodura es un demente, sin conciencia ni misericordia, y si reúne un ejercito de dragones... que nos amparen los Dioses

― Entonces te propongo que vallamos hasta el, seguiremos a los cazadores hasta Drago y lo haremos entrar en razón

Jack asintió dándome la razón

― ¡No! Fortificaremos la isla

― ¡Es nuestro deber mantener la paz!

― ¡La paz termino Hiccup! Debo prepárate para la guerra

El aire se me atoro, y una sensación extraña me revolvió el estomago

― ¿La guerra? ― Respire profundo y trate de hacer en razón a mi padre― Escucha, si Dragon llega por nuestros dragones, no vas a querer que llegue hasta aquí, vamos a buscarlo y yo hablo con el

Los tres pares de ojos atrás de mi papa estaban fijos en nosotros abiertos y atentos a cada palabra que decíamos

―No, hablar con él sería inútil Hiccup ― Papa volteo y pude ver como Jack me hacia una señal, ambos sabíamos que era muy difícil hacer cambiar a mi papa de opinión y lo único que quedaba era desobedecer ― Berk es lo que debe preocuparte, un jefe protege a los suyos

Después me dejo solo y fue a seguir dando órdenes, Jack ya estaba poniendo escarcha en las bisagras de las puertas para darnos tiempo y salir

Estaba a punto de subir a Chimuelo cuando Astrid me detuvo

― Tengo que hacerlo ― Le di un beso en la mejilla y junto con Chimuelo volamos a la puerta

Después de unos segundos Astrid nos alcanzo

Jack estaba cabizbajo y Astrid un poco seria, pero aun así volamos en silencio por un rato hasta que Jack hablo

― Y ― Comenzó a decir ― ¿Cuál es el plan?

Lo miré directo a los ojos y sonreí levemente

― Por ahora, seguir a Ereth 

Como entrenar a Jack Frost:  Amor en InviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora