Marcas De Un Asesino

capitulo cinco parte 2/2

-Claro Alex, lo que quieras.
Okey, empecemos con el interrogatorio.
-Bueno, se sabe que le pasó al chico, digo, obviamente esta...-me detengo y respiro- ¿se sabe como?
-Alex-me regaña mi mamá
-Tranquila Clare- Mark me mira- solo los de la familia y el médico forense sabemos cómo, no quisimos hacerlo público, ni eso ni ninguna información sobre el caso.
-Y me podría decir lo que...
-¡Alex!
-De un disparo, murió de un disparo
Se le quebró la voz y me costó mucho continuar. Debía hacerlo y no sólo por Gabriel, esto se había vuelto personal.
-¿Y se sabe quién puede haber sido?
Me miró con lo ojos empañados y yo apreté los dientes.
- se sospecha de una chica que hizo una llamada, avisando que mi hijo, que mi hijo- bajo la mirada- estaba tirado en el bosque.
-¿Y no se sabe nada más? No lo se, huellas, pistas ¿Algo?
-Alex ya basta- mi madre agarraba fuertemente la servilleta entre sus manos.
-El cuerpo aún no ha sido enterrado, lo del funeral fue una mentira para despistar al asesino. Mañana el cuerpo será revisado
-¿¡Cómo!?- Me levanté de la mesa- ¡Un velorio falso! No puede ser, ¡Pero como!
-¡Alex!- mamá golpeo la mesa- ¡Es suficiente!
Mire a Mark tenía la mirada baja y los puños apretados.
-Vete a tu habitación, ¡Ahora!- mamá grito, hace mucho que no la oía gritar. No pude ni siquiera disculparme, solo me fui corriendo.
Llegué a mi habitación y cerré la puerta. No puede ser, van a revisar el cuerpo, ¡Me van a descubrir! No, no puedo permitirlo.
Un momento. Mark dijo que toda esa información era clasificada, pero Gabriel sabia que Jake había muerto de un disparo. Así que hay dos opciones, o el estuvo allí o conocía a alguien que había estado allí.
Necesitaba hablar con el.
En toda la noche no pude dormir. La culpa y el miedo me atormentaban.
Sólo pensaba en que iba a hacer, tendría que pedirle a Gabriel ayuda. Mañana tendría que hablar con el. Si no me ayudaba lo amenazaria con entregarlo a la policía.
El día siguiente llegó. Mamá no me dirigía la palabra. Ni siquiera tomé desayuno, solo me fui a clases.
El día se pasó lento. Gabriel había estado en clases de matemáticas pero yo lo ignoraba completamente. Cuando me miraba, cuando me sonreía. Tal vez estaba equivocada, tal vez el si podría ser el asesino.