Almas que vuelven

Capitulo: 9

-¡¡Auxilio, auxilio!! –Grito a todo pulmón. Tiro de los brazos que sostienen mi cuerpo -¡¡¡SUELTAME!!!....¡¡NO ME TOQUES!!- Intento hacer más fuerza pero no me suelta y siento que sus sucias manos bajan a mi cintura y me desabrocha el pantalón.

Mi respiración se va acelerando cada vez más, no tengo salida, estoy atrapada en este cuarto oscuro, con un sujeto, me tienen atada a una mesa, de manos y pies. Sus manos pasan por mi cintura y mis lágrimas comienzan a salir; entonces siento que baja el pantalón y grito hasta no poder más. Intento una vez más tratar de zafarme de las cuerdas que me atan, pero no puedo.

Sus manos rozan mi entrepierna y comienzo a temblar, escucho su susurro:

–"Estás rica...mmmm...ya quiero tenerte dentro"- Las palabras que brotan de su boca resuenan en mi cabeza una y otra vez.

Aparta sus manos de mi entrepierna y se desabrocha el pantalón, se baja el pantalón hasta los tobillos y vuelve sus manos a mi entrepierna e introduce un dedo, al sentir presión en mi entrepierna, mis lágrimas comienzan a salir. Luego de unos minutos introduce otro dedo más y lo mueve más fuerte, hasta llegar al tercer dedo, yo ya no siento que estoy en mi propio cuerpo, la respiración se me entrecorta, siento mi cuerpo frío, cada minuto pierdo un poco más la vista por tanto llorar. De un momento a otro siento una presión más dolorosa que la anterior, levanto mi vista tratando de saber que era lo que me causaba tanto dolor, veo a ese sujeto que se acerca cada vez más a mi pierna, cada movimiento que hacía era un martirio....

Abro mis ojos y me encuentro en un cuarto oscuro con la ventanas abiertas, tardo unos segundos en recordar en qué lugar estoy. Me reacomodo entre las sabanas, mientras el aroma de comida recién hecha invade mi olfato, me levanto y me dirijo a la puerto de mi habitación; antes de girar la perilla me llega un mensaje. Camino a mi escritorio donde está mi celular parpadeando, enciendo mi celular y veo el mensaje.

<<Es de Mako-chan>> –Digo para mis adentros. Leo el mensaje -¿Podemos salir el fin de semana? –Me pregunta.        -Está bien –Le respondo al instante

Luego de responder al mensaje de Makoto me dirijo a la puerta de mi habitación e ir a la cocina. Mientras bajo las escaleras, me viene a la mente el sueño que tuve hace unos minutos; de solo poder recordar esa sensación de asco al momento que sentía sus manos.

-Hola –Escucho decir desde la sala. Una voz ronca y fría a la vez. Levanto la vista y veo a.....

-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º-º

Hola a todos. 

Para las personas que siguen mi historia, disculpen por no publicar, estuve pasando por unos problemas y bueno ahora estoy aquí.