Viviendo con un "Dios" (GundhamxTu)

Una lluvia agradable para ir de compras

(Nota de la autora) cuando el son de la canción del corazón hable, escucha por favor el vídeo que está aquí arriba, no lo habrás aún. Espera una mejor experiencia, créditos a los respectivos autores, y dobladores. Ahora si, ponte comod@ y disfruta el fic ;)

- ¿Segura que estarás bien en mi ausencia?- Me preguntaba Gundham por enésima vez en la hora.

- Segura, ve con cuidado. Te esperaré en casa - Me volvió a ver preocupado, es muy mono pero, algo sobre protector.

-¿Medios de comunicación? - Levante mi teléfono, que fue arreglado ayer por Kazuichi luego de la conmoción. - ¿Objeto de ingreso a el Palacio? - Le mostré la llave que el me dio. - ¿Modo de intercambio de vienes? - Le mostré el dinero de la comida, a pesar de que hicimos las compras ayer.

- Y también se como se llaman los "elegidos", como se ven y la contraseña especial de la casa, además que ellos tienen su propia llave para entregar por la parte de atrás. Seguiré tus indicaciones, Así que descuida estaremos bien. - Le sonreí. No quiero que se preocupe más por mi, el tiene cosas importantes por su familia, yo no debo meterme.

- Todo parece en orden, sin embargo si alguna emergencia llega a pasar ¡Sólo as de pronuncia mi nombre y estaré contigo! - Mientras decía el se disponía a salir pero, se notaba que no quería hacerlo por miedo a mi soledad.

- Si, si, si. Lo se Gundham - Comencé a empujarlo hacia la salida y cerrar bruscamente la puerta detrás de el. - ¡Nos vemos! - Me senté atrás de la puerta tratando de aguantar las lágrimas antes de que el se vaya pero, no se movía de ahí.

- . . . . ____. . - Escuche que se apoyó en la puerta.

-(No digas mi nombre, si lo haces yo voy a. . . .) - Las lágrimas brotaron solas.

Se abrió lentamente la puerta. - ___ déjame pasar, está comenzando llover y necesito un dispositivo para evadir el ataque. - Me moví un poco para dejarlo pasar mientras yo estaba en el suelo hecha bolita.

El sólo se arrodilló, coloco una mano en mi cabeza y comenzó a acariciarme. - Eres un tramposo creí que ibas a agarrar un paraguas. - Luego me rodeo con sus brazos y me estrechó contra el.

- Es la única razón por la cual dejarías que pasará. Sin embargo no todo era mentira, a de comenzar a llover en breves instantes. - Sentí sus labios en mi frente para luego depositar una de sus manos en mi mentón, obligándome a mirar hacia su cara, para lentamente acercar su rostro hacia el mío y así reunir nuestros labios. Sentía como la sangre subía a mi cara, mientras el limpiaba mis lágrimas con su dedo, sin separa nuestros labios.

Al cano de un rato, nos separamos, él me miro dulcemente con una sonrisa melancólica.

Nos quedamos en silencio mientras nos mirábamos.

Unos eternos minutos después el se levantó y me ofreció su mano para ayudarme a parar, un recuerdo fugaz atravesó mi mente, está era una situación similar a cuando nos comimos por primera vez. Y con la misma fuerza y facilidad que la última vez, el me levanto de un movimiento veloz mientras que mis torpes pies me hacían tropezarme hasta caer en él, y que me atrapara.

- Ya he de partir. - Pero aunque lo decía no dejaba de abrazarme.

-¿Te acompaño a la estación? - El negó con la cabeza.