V. Fuera de límite

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POV Jungkook


Inevitablemente Jimin se convirtió en un pensamiento recurrente en los días que siguieron. Entre la universidad y mi nuevo trabajo, y debido al cansancio que aquella nueva rutina demandaba era muy poco el tiempo que me quedaba para mantenerme despierto a altas horas de las noches. Noches, que sabía Jimin ocupaba muy entrada la madrugada para alimentarse, siempre a la misma hora. Y, aunque sabía, que tanto Tae como él estudiaban en la misma universidad, por facultades claramente no nos topábamos.

Tuve que contener mis ganas algunas noches para no levantarme debido al olor y a la música, porque en el fondo me asustaba lo que había comenzado a sentir. Una casi, insana obsesión con el misterioso papel que desempeñaba aquel compañero de departamento. Era raro. No raro como algo malo. Si no, más bien raro al punto de llegar a ser encantador. Porque incluso esas extrañas manías que tenía de mirarme como si se le fuera la vida en ello, al menos, las veces que solíamos coincidir en el día, parecían ser simpáticas y adorables.

Pero seguí su consejo, y seguí ignorándolo, e ignorando mi propio interés por él.

—Lo sabía. — dijo Yoongi, una vez nos encontramos en la cafetería de la universidad. — Ósea, no lo sabía con exactitud, pero algo me lo decía.

—¿En serio? — farfullé mirándolo con desdén.

—Kookie, jamás saliste con una chica antes, tampoco dijiste antes si te parecían atractivas, o si siquiera sentías algo por alguna. — replicó dándole un sorbo a su café. —No sé por qué te molestó tanto que te lo preguntara. Ahora lo que me preocupa es, el hecho de que la misma persona que te lo preguntó, es quien te hace sentir eso...

—¡Eh! — exclamé. — No siento nada más que curiosidad.

—¿Lo encuentras atractivo? — inquirió haciendo un mohín con los labios.

—Si, pero...

—¿Le has mirado el trasero?

Le dirigí una mirada asesina.

—Ok. — Yoongi arrugó la nariz. — Veamos. Supongamos que hipotéticamente sólo te causa curiosidad. ¿No se te han ido los enanitos al monte con tanta curiosidad? Llevas días así. Si sólo es eso ya deja el tema y punto.

Bufé tamborileando los dedos sobre la mesa, sin despegar la mirada de lo que pasaba por el otro lado de la ventana.

—Que eso no es todo, por algo acudí a ti... — empecé yo.

—Bueno, no hay muchas otras personas a las que puedas acudir, Kookie. — esta vez me sonrío con la intención de exasperarme, pero era imposible con lo dulce que resultaba ver sus encías en el acto. Era verdad, en mi mundo, sólo existía él, y mi familia. Tae y Hoseok, recién estaban ganándose un lugar en mi corazón como para que pudiera ir hasta ellos y preguntarles directamente la incógnita que había estado recelando todos estos días. — Venga, ya suéltalo.

—Él me dijo algo acerca de sí mismo. Dijo que tiene TLP. Yo lo googleé, pero soy pésimo con los diagnósticos clínicos...

—¿Él dijo eso? — su expresión logró capturar toda mi atención. Asentí con urgencia. — ¿Él en serio dijo así literalmente? "Tengo TLP" — volví a asentir inclinándome hacia Yoongi. —Vaya...Kookie.

— ¡¿Qué?! Ya, dime. — supliqué.

—Que no es bueno, aléjate de ahí. Deshazte de tu curiosidad. Esta vez en serio, la curiosidad de verdad puede matar al gato. — advirtió con gesto contrariado, revolviendo sus cabellos verde menta. Y automáticamente, recordé la primera conversación con Jimin, diciéndole exactamente la misma frase. — Tú primer amor debería ser alguien normal...

If you were Me [JiKook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora