72. "reencuentro"

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Narra Ford

Desperté por el sonido de mi alarma, eran las 6 de la mañana, vaya noche que pasamos
Me levanté para vestirme y conducir a Oregón
Trate de levantarme pero _____ me tomo del brazo, según me había contado yo hice lo mismo, es gracioso en cierto sentido
Después de unas cuantas veces que insistí en quitarme despertó y me miró algo desgustada

—¿A dónde vas? —dijo aún adormilada

—Tengo que irme, nos vemos pasado mañana preciosa —le di un beso en la frente

—¿No quieres seguir durmiendo conmigo? —dijo despertando un poco más

—Tengo que revisar que todo esté en orden en la cabaña para irnos lo más pronto posible —sonrei

—Que te valla bien nerd —se sentó y me abrazo— me llamas llegando

—Claro, cualquier problema tú igual —me Levante y tome las llaves para asegurarme dejarle una de la habitación

—¿A dónde vas Ford sin vestirte? —dijo divertida

—Eh, ¿Que me crees? Solo miraba si te dejaba una llave por qué yo me llevaré el llavero completo —rei

Se recostó mientras yo me vestía rápidamente con lo primero que ví en el clóset
Tome mi teléfono y una que otra llamada del señor corderoy vaya que tiene prisa de verme por los alrededores
Me vestí con un pantalón de vestir sencillo y una camisa, no le preste demaciado importancia poniendo en cuánta la prisa que tenía

—¿Qué hora es? —dijo mirandome queriendo consiliar el sueño

—mire mi relog de mano— las 6 y cuarto ¿Por qué? —acomode mi corbata sencillamente

—Por que es muy temprano para que te vistas tan guapo —comento con algo de celos en su lenguaje

—Lo es, pero no puedo llevarte —tome mi billetera y las llaves

—¿Por qué no? —me abrazo triste mientras me sentaba a su lado para irme

—Por que quiero que sea rápido, contigo me distraeré un poco —le di un beso en la frente

—Ves Ford, te dije siempre que sería una distracción —agacho la mirada

—No digas eso linda, yo digo en el sentido bueno —le guiñe un ojo y deje que durmiera— nos vemos —susurre cerrando la puerta detrás de mi

Narra ______

Mi alarma sonó viendo que eran las 10:00 am, tome mi teléfono y una llamada desconocida no podía ser de nadie más que de stan.
Fui a darme un baño para luego vestirme con uno de los regalos de bodas, un vestido casual pero elegante que fue regalado obviamente por Mey.
Tome mi teléfono y mire más llamadas del mismo número ¿Por qué coño no has sonado? Me pregunte.
Después de un rato de esperar si de nuevo marcaban me rendí y decidí hacerlo yo

-¿Hola? -conteste en cuanto descolgaron el teléfono

-soy stan, estoy aquí en California y afuera de tu estúpida habitación

Mi aguafiestas T. 2 «ford & tu»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora