Mi aguafiestas T. 2 «ford & tu»

84. "ideales"

Fui levantada por los gritos desesperados de Rafael por todo el departamento, instintivamente me levanté y tome mi guitarra «como si eso fuera de mucha ayuda _______» me dije saliendo de mi habitación

—¿Qué está pasando? —murmure viendo cómo Jeremías corría a esconderse en mi habitación

—¡¿POR QUÉ?! —grito rafael en el suelo

—¿Estás bien? ¿Qué pasó? —dije incandome a su altura para ver qué le pasaba

—Jeremias se gastó mi perfume —me mostró la botellita

—¿Es enserio? —me levanté pensando que era un chiste—Ehm es un perfume, podés comprar otro —le mostré el embace y use mi teléfono para buscarlo en línea

—Pero tardará días en llegar, no se por que lo uso —se cruzó de brazos en el suelo como niño pequeño

—Hay mi madre,  —susurre sobando mis cienes

Busque el perfume y lo podían mandar en cinco horas, sin dudar lo pedi; no quiero más gritos desgarradores que aquí parecerá escena de homicidio

(...)

—_______, ________, ¡________! —grito picando me las mejillas

—Te estoy escuchando, rafael ¿Qué quieres? Por qué quiero disfrutar mi cereal —mencione tomando una cuchara del plato

—Puedes acompañarme a dar una vuelta por el centro...

—Nah —dije de inmediato— si tu plan es sacarme del departamento para organizarme algo solo dilo y ya, se actuar mira —hice cara de sorpresa ¡O por dios! ¡No me lo esperaba!... Si me lo esperaba —susurre comiendo de nuevo

Comenzó a reír

—Vamos que no quiero ir solo y mi licencia no está del todo bien, quiero que me acompañes por que Jeremías está de sentido en la habitación —se alzó de hombros

—Como no lo va estar si casi nos das un Infanto por tu bendito perfume —suspire— bien, iré pero con una condición

—Lo que quieras

—No intentes emborracharme, se que la última vez fue para que hablara con Stanford pero hoy no, no quiero despertar desnuda junto a otro tipo y divorciada, ¡Eso no! —me levanté

—Como digas —rodo los ojos— que aburrida eres —susurro

—Tal vez si tome una copa o dos pero nada de excederse, enserio que quiero mantenerme sobria —abri la puerta y salí hacia por el auto

(...)

—¿También vino? —dije cansada entrando en la tienda más surtida de vinos

—Claro, Tenemos que brindar por que es nuestro aniversario

—¿De quien es aniversario? —pregunte

—¿No te lo había dicho?

Negué

—Yo y Jeremías cumplimos ya 6 años de estar juntos ¿No lo recuerdas?

—Con la memoria que tengo lo haría pero creo que estoy olvidando cosas, a de ser por la edad supongo —dije riendo

—Vamos, _______ tienes 22

—Y ustedes 25, mira que soy más responsable que tú siendo menor —comence a reír

—Claro, tan responsable que se te hizo más fácil salir de tu país —resoplo

—Si hablas de cuando vine por primera vez sabes que fueron otras circunstancias no niñadas como pelear por un perfume de buena marca —dije dejando las botellas para pagarlas