Te Extraño.

Te Extraño 3.

Cuando abrió los ojos se encontraba en el cuarto de hospital, su cuerpo estaba algo adormecido, la anestecia aun no había pasado y su cabeza le dolía ligeramente; observando a su izquierda y derecha, diviso a alguien hablando por la puerta, concentrandose logro oír lo poco que quedaba de conversación.

- durmió más de lo esperado, pero su forma de recuperación es increíble; si despierta para esta tarde se podrá empezar su rehabilitación - había dicho un hombre, que se escuchaba jóven.

- muy bien, entonces iré preparando la sala para empezar, solo comunicate cuando sea el momento - hablo otro hombre - por cierto, aquella hermosa muchacha peliceleste... Ya no ha vuelto ¿Verdad? - dijo ahora un poco nervioso, lo cual molesto al joven ojidorado.

- hum~ veo que te gusta - sonó un tono picaron.

- c-claro que no, e-es solo que... Mmm.

- jajaja, no importa, pero si, no ha vuelto; siendo sincero creo que no tienes oportunidad, según veo es la novia del joven Akabane.

- y-ya veo.

Eso alivio al pelirrojo, era bueno que ahora abandonara las esperanzas; al momento que terminaron, escucho que uno de ellos se iba y luego de un rato el segundo se alejo de ahí. Cuando llegó la tarde el doctor le informo que la operación resulto ser un éxito, lo cual no lo sorprendió porque ya lo sabia, dijo que ya podría empezar la rehabilitación.

En tanto con Nagisa, seguía con sus deberes como profesora, pero no se quitaba de la cabeza lo que le dijo Gakushu en su último encuentro.

"Nagisa, puede que no deba meterme donde no me llaman, pero no puedo simplemente quedarme callado, cuando Akabane esta hechando a perder valioso tiempo que puede pasar a tu lado.

- Gakushu, te agradezco las palabras,... Pero no he vuelto a verlo, y estoy segura que no querrá volver a verme. Su enojo esta bien justificado, pero me dolió lo que me dijo la última vez.

- Nagisa,... Dejame ayudarte; quiero que esperes 2 meses. Una vez haya pasado ese tiempo, encuentrame en la playa donde nos volvimos a ver, yo te enviare los detalles, el día y el lugar. Prometeme que hasta ese momento serás paciente.

- pero Gakushu, yo-

- prometemelo!!!

- b-bien, te lo prometo".

Ya habían pasado algunas semanas, que para ella resultaban eternas, pero se lo prometió al pelinaranja y no lo iba a decepcionar, después de todo logro apoyarla y animarla cuando mas necesitaba de alguien.

Con el paso del tiempo, que parecía eterno, se fueron cumpliendo ya los dos meses; Karma estaba dando todo de si para acabar y poder tener a Nagisa entre sus brazos pedirle perdón y poder llenarla de amor. En tanto ella, solo aclaraba sus ideas, estaba confundida y algo dolida por los recuerdos que tiene junto a Karma; cierto día que salio para comprar y aligerar su pesadez de mente, se encontró con alguien un tanto inesperado, estaba por cruzar un semáforo cuando una voz la llamó.

- ¿Nagisa?.

- I-Isogai-kun, h-hola - se gira algo nerviosa.

- vaya de cuanto tiempo, me alegra verte - se acerco a darle un abrazo.

- si, igual me hace feliz verte bien - correspondió el abrazo.

- luego de años, hasta ahora no logre hablar contigo, de vez en cuando te veía por la ciudad, pero siempre era que debía ir a algún lugar - dijo algo avergonzado.

- jajajaja, no te preocupes, para mi es la primera vez que te veo, pero me contenta encontrarme con alguien conocido.

- bueno es cierto, después de todo luego de la graduación desapareciste.