Querida Olivia

Día 45

Querida Olivia,

Ya estoy escribiendo esto desde mi casa, se terminó el viaje y justamente te quiero contar de la vuelta a casa. Soy de las personas que consideran que viajar con joggings y una remera de algodón van a hacer el viaje mucho más cómodo, así dure 2 horas, 10 horas o 20 horas.

Mientras más largo sea el viaje, más cómodo uno tiene que estar. Además tenemos que pensar que la mayor parte del tiempo nos la vamos a pasar sentados y un pantalón flojo nos va a permitir tener una mejor circulación que si viajamos con calza o con un jean super apretado.

Nosotros dejamos la habitación a las 8 de la mañana y a las 9 arrancamos a desayunar. Fuimos al baño y a eso de las 10.30, salimos rumbo a Rosario. Tuvimos una parada 4 horas después en la ciudad de Castelli, en el Minotauro (local de comidas/almacén/parador) para almorzar y una hora después seguimos viaje. Volvimos a parar en una estación de servicio en San Nicolás, para estirar las piernas ya casi a las 8 horas de viaje. Y después la parada final en la Terminal de Ómnibus de Rosario, donde descendimos ya para volver a casa.

Fue una vuelta que nos pasó casi desapercibida porque nos la pasamos durmiendo, pero la recta entre San Nicolás y Rosario se nos hizo eterna, parecía que no llegábamos más y, honestamente, no veíamos la hora de bajarnos para volver a casa. Una semana sin ver a nuestras familias, ya era hora del reencuentro.

La verdad que fue un viaje hermoso, fue nuestro primer viaje solos, sin nuestras familias. Digamos que al mismo tiempo fue una prueba de cómo sería nuestra convivencia, si nos llevaríamos bien o como perro y gato, pero demostramos a nuestras familias y a nosotros mismos que más allá de nuestras diferencias, como que él es el rey del orden y la limpieza y yo soy la reina del desorden, podemos convivir y nos complementamos a la perfección. Por ahí hay detalles en los que uno no está y el otro sí y está bueno, se tornó muy llevadera. Hasta ya estamos planificando futuros viajes a otros destinos.

Si podes Oli en algún momento, cuando tengas 18 años y si te sentís preparada, viajá sin tus padres, viajá con tus amigas, viajá con tu pareja si es que tenes y ni tu papá ni yo te la espantamos. Es una experiencia hermosa y desafiante viajar sin la familia, pero es una aventura y una de las cosas que no sabes como va a resultar, pero te arriesgás de todos modos.

Te amo mi pequeña mariposa. 

Con amor,

Tu tía/prima.