aléjate de mi.

un corazón apretado.

- narra orihime.
- salí corriendo, sinceramente quería estar sola un rato, se que ese chico estaría pegado como sanguijuela si no me hubiera ido, pero me parece divertido es como un cachorro que sólo hay que sobarle la panza para que se tranquilice, que es esto estoy sonriendo parezco una idiota, mejor me voy al salón, mientras espero al profesor al menos me siento aliviada, ya que hoy no tengo clases con el profesor aizen no quiero darle la cara después del bochorno de ayer, ahhh siento tanta vergüenza como es que lloré frente a ese imbecil, espero que use ese poco cerebro que tiene y  no haga preguntas, aunque como cachorro que es obediente a su dueño sabrá lo que le conviene.
- orihime por que me déjate sólo.
- te ves fatal.
- como quieres que este si me dejaste con esas chicas, pasaron sus manos por todo mi cuerpo, querían que me quitará la camisa.
- jajajajajaa sabes me diste lástima, ven aquí te arreglaré la ropa - se acercó a mi un poco tímido, comencé por sacudir su camisa, arreglar su chaleco y poner en su lugar la corbata, no me había dado cuenta lo grande que es, se nota que hace ejercicio tiene brazos fuertes, un rostro tan fino sin ninguna marca de acné o algo parecido a la adolescencia, su cabello es tan brillante y huele tan bien, ningún chico huele tan bien y esos ojos que lindos ojos tiene, cuando me doy cuenta lo estoy mirando fijamente, me separo rápido de él.
- mmm listo.
- gracias - miraba a otro lado, él  estaba sonrojado y creo que yo también por que me siento así, no lo entiendo.
- hey orihime que vas hacer después.
- no lo se - no quiero ir a la biblioteca por que estoy segura que el profesor aizen esta ahí y por ahora no lo quiero ver - tienes algo en mente.
- podríamos pasar tiempo juntos, no se que te gusta hacer.
- me gusta estar en lugares solitarios.
- entonces vamos a la biblioteca.
- NO - grito como loca, asustando al chico.
- OK no iremos a la biblioteca, hey me dijiste que trabajas, donde.
- en una cafetería cerca de casa.
- puedo ir contigo.
- que no tienes nada que hacer.
- vamos orihime - pone esa cara de cachorro, que ya creo ver esas pequeñas orejas y una cola que mueve de la emoción.
- aggg esta bien puppy.
- siiii - salta de alegría, parece un chico muy enérgico - no espera que dijiste.
- jajajajajaja - no puedo parar de reír, este chico de verdad que me causa mucha gracia.
- hey no te rías y dime que dijiste, vamos orihime dímelo.
- no nada ajajajaja.
- Buenos días chicos de que se ríen tanto - aparece de la nada el profesor gin ichimaru, dándonos un susto de muerte, no es que no le tenga respecto, pero este demente me asusta.
- de nada - logró decir.
- claro - sonríe y comienza con la clase, el día paso rápido y a la salida, puppy me llevo al trabajo, me ahorro muchos minutos valiosos de tren y autobuses.
- aquí trabajar whouuu he venido aquí tantas veces que Cómo fue que no me di cuenta que trabajas aquí.
- es que comencé hace poco.
- por que razón trabajas orihime como veo no tienes necesidades.
- mmmm - doy un largo suspiro se que quedamos en ser amigos, pero hace muchas preguntas, tampoco quiero decir que mi motivo de entrar a trabajar en ese lugar es para ver al profesor aizen fuera de la escuela, se que no tengo necesidades mi hermano se encargó de dejarme bien protegida económicamente - lo hice para distraerme paso mucho tiempo sola.
- ahora ya no habrá necesidad de estar sola tendrás mi dulce compañía.
- si claro, bueno siéntate aquí te traeré algo para que comas y no te preocupes corre por mi cuenta.
-  que claro que no tengo dinero.
- no es para tanto, aquí me regalan las cosas y - me sonrojo no se por que lo hago - eres mi primer amigo - cuando dije eso su rostro se iluminó y ahí volvió el cachorro.
- si orihime.
- me parece un poco enternecedor, hace que me den ganas de reír como lo hacía con sora esto es tan nostálgico - que se aquí ya vuelvo - cuando fui a buscar un pastel de chocolate y fresas, vi como las demás chicas comenzaron a murmurar.
- hey mira ese no es kurosaki ichigo.
- hay dios si lo es, tengo que ir a pedirle una fotografía no ves una celebridad de esa categoría así todos los días.
- hay no olvide que él es famoso ahora comenzarán a molestarlo, un mentón desde cuando me intereso por los demás, las chicas fueron a pedirle fotografías estaban rodeándolo y comenzaron a llegaras chicas, en eso llega el profesor aizen con gin, aveces vienen juntos a tomar café, de verdad no quiero hablar con él, pero no puedo evitarlo.
- hola orihime - conozco esa voz, dios esa voz tan celestial que me hace volar al cielo en una suave nube.
- amm Hola profesor aizen.
- que pasó ayer por qué desapareciste de un momento a otro, te estuve busque, te llame y hoy no pude encontrate.
- amm es que - miro al pelinaranja y veo su cara de desesperación - tengo que ayudar a itsigo, permiso - fui a ayudarlo no se como lo saque de ahí y lo lleve a la cocina, ya ahí le di de comer, mi jefa se alegro tanto de que él estuviera ahí, que me dejó hablar un rato, charlamos de muchas cosas y la mayoría eran cosas graciosas, reí mucho.
- orihime - me habla el profesor aizen.
- si - me doy vuelta.
- ya es tiempo de irnos.
- no es que me iré con ichiko - me dolió el alma decir eso, quería con todo mi ser irme con él, pero él  se va a marchar lejos y tengo que aprender a vivir sin él.
- es ichigo.
- si como sea, me iré con él.
- su rostro forma esa hermosa sonrisa que tanto me gusta - que bien que estas haciendo amigos orihime te felicito, ahora ve con él.
- si, adiós nos vemos mañana.
- claro - fui por ichi.. como quiera que se llame y nos marchamos.
- narra gin.
- así que la princesa te dejo con el traje puesto.
- no fastidies gin, orihime sólo está haciendo amigos y con eso soy feliz, me alegro por ella es una chica muy solitaria y..
- y te hubiera gustado que no tuviera amigos, lo note aizen hoy estuviste triste por que ella no te hablo en todo el día y cuando lo hace sólo te rechaza.
- es mentira.
- vamos aizen se que estas perdiamente enamorado de ella y no lo quieres admitir, también se que te marchas por que no sabes que hacer por este amor loco que estas sintiendo por ella - conozco a aizen desde que somos niños y nunca lo había visto así, perdido tanto que quiere huir, pero con mi ayuda lograré que se declare a la chica.
- lo se gin, no puedo mentirte a ti, pero ella es una niña y yo soy un adulto que tiene su vida hecha, ella apenas comienza.
- que vida aizen, sin ella no puedes vivir - aveces es tan testarudo.
- no digas estupideces gin.
- ese chico ichigo es muy persistente, sabes que hoy ella reía a carcajadas con él, nunca la vi así con nadie, solo contigo y ahora tienes un rival aizen si no te apresura se llevará a tu princesa.
- ya basta gin él solo su amigo, ni siquiera sabe bien su nombre.
- pero lo sabrá vamos aizen.
- tengo el corazón apretado gin, no se que hacer, no quiero lastimarla es una chica tan delicada, tan solitaria, sabes que me tengo que contener con todas mis fuerzas para no besarla, ella me ve como su protector, si tan sólo supiera los pensamientos impuros que me invaden cuando estamos a solas escaparía de mi.
- y si no es así y si ella se queda, vamos aizen hoy tenemos que tomar una copa.
- narra orihime.
- gracias por dejarme en mi casa, pero no es necesario que vengas a dejarme.
- si lo es, somos amigos.
- de todos modos gracias y adiós - cerré la puerta en su cara y no me aguante la curiosidad mire por la ventana y ahí estaba como cachorro que se despide de su dueño - adiós puppy que descanses - subí a mi habitación y me quede profundamente dormida.