CAPITULO 1

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Son las 6

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Son las 6.00 A.M y esa maldita alarma no deja de sonar, mi madre ya está llamando a mi puerta para que me levante, hoy será un día muy cansado, ya que tengo que arreglar mis maletas porque a las 3:30 P.M salgo rumbo al Aeropuerto con destino a Soriana, por una parte estoy feliz por el simple hecho de que iré a una de las universidades en la que siempre he querido entrar además iré con mi mejor amiga Abbie sé que con ella nunca estaré triste ya que esta loca y es aventurera igual que yo, pero por otra parte me pone triste el hecho que no veré a mis padres, ni a mi hermanita por un buen tiempo, sinceramente los voy a extrañar mucho, ya que soy muy unida a ellos, y a pesar de todos los problemas que pudieran haber existido, hemos logrado salir adelante juntos.

Me levante de la cama con el fin de darme una ducha, cuando de repente tropiezo con un puto zapato que había dejado en el suelo la noche anterior, ¡mierda! y así comienza mi gran y alocado día, acaso no podría empezar mejor, a veces me pregunto ¿Por qué Dios me mando tan torpe? Acaso estaba tan aburrido en el momento de escribir la gran historia de mi vida y para reanimarse un poco dijo: Tú serás la elegida hare de tu vida un caso, tú me harás reír en toda tu vida.

Entro al baño, me miro al espejo y tengo unas ojeras terribles y un mal aliento, cojo mi pasta bocal y procedo a colocarla en mi cepillo de dientes, para luego cepillarme, tomo una ducha con el fin de relajarme un poco, me gusta esa sensación del agua recorriendo por mi cuerpo, me coloco un poco de mi jabón líquido de coco que me encanta y me quedo hay por un buen rato, treinta minutos mas tarde salgo de la ducha envuelta en mi toalla y busco en mi armario una ropa súper cómoda para bajar a desayunar.

Mi familia me está esperando, voy bajando las escaleras y escucho una voz muy familiar, que solo con oírla me hace sonreír, es mi abuelo Tom el es uno de los seres que más amo en esta vida, en el transcurso de mi corta vida me ha enseñado que la vida no es color de rosa y que existen otros colores, me enseño muchas cosas como a boxear, a escalar montañas a jugar futbol, aunque mi padre siempre decía eso no es para niñas, que las niñas no deberían hacer eso, si estamos hablando de los típicos comentarios machistas, esos que al pasar del tiempo fue comprendiendo y aprendiendo que todos somos iguales y todos tenemos derecho de aprender lo que queramos.

Bajo y saludo a todos con un beso y dando los buenos días, en eso escucho la voz de mi Abuelo llamarme.

-Mey, mi niña venga un momento.

-Dime Papa Tom –así le he dicho desde que soy pequeña.

-Te tengo un regalo, y espero que te guste, es para que te acuerdes de mí todo este tiempo que vamos a estar lejos – exclamo con los ojos llorosos- mi pequeño saltamontes.

-Papa Tom no es necesario que me des un regalo para acordarme de ti, porque todos los momentos y enseñanzas que me has dado las llevo en mi corazón y me mente, así que siempre me acordare de ti.

-Mi niña eso ya lo sé, pero vamos ábrelo quiero ver si te gusta.

-OMG!!! – Salto de alegría y lo abrazo muy fuerte a la vez- gracias gracias gracias papa Tom es el mejor regalo del mundo.

IT IS DESTINYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora