Atontada.
Esa era la mejor palabra para describir a ___________(tn) en la mañana del jueves, al mirar a Justin durmiendo a su lado. Sus labios estaban curvados en algún lugar, entre una sonrisa y el mohín en el que estaban siempre, y su brazo la sostenía firmemente contra él. El brazo se sentía pesado y confortable contra ella, y no pudo evitar deslizar sus dedos hacia arriba y abajo sobre la suave piel.
La urgencia de inclinarse hacia adelante y besarlo la tomó por sorpresa cuando sus ojos se concentraron en sus labios sonrosados. Después del día anterior, no sabía qué pensar de su mejor amigo. Estaba sobrecogida por la muestra que había tenido Justin la noche anterior. Debía haber sido absolutamente desgarrador verlo, pero haber sido parte de ello, haber sido la persona a la cual él le estaba pidiendo perdón, la llevó hasta las lágrimas, casi.
Había sido algo que ella nunca olvidaría, especialmente cuando desde hacía rato, todo en lo que ella podía pensar era Justin.
Más tarde, su mente estuvo centelleando imágenes de ella besando a Justin en cualquier momento. Durante la usual reunión general de producción del lunes, ella discutía la nueva novela que estaba editando, una novela básica de misterio, cuando accidentalmente llamó al protagonista masculino Justin. Por suerte para ella, nadie se dio cuenta, pero el desliz Freudiano la había tomado por sorpresa. Era inexplicable, pero para ser franca, ella no necesitaba ninguna explicación. Sabía que era por su pequeño juego; estaba empezando a dominar sus vidas.
Continuó viendo el rostro pacífico de Justin, sus nudillos rozando suavemente sus pómulos, antes de decidir finalmente levantarse. Tenía que llegar al trabajo pronto, y no podía permitirse gastar más tiempo remoloneando en casa.
Lentamente, hizo su camino hasta el baño para ducharse. Cuando sintió la familiar presión en su vejiga gimió en voz alta.
—Mierda— dijo más fuerte, tirando de la cadena.
—¿Qué?— preguntó Justin exasperado, entrando a los empujones en el baño, sorprendiendo a __________(tn).
—Diablos, Justin. ¿No puede orinar una persona sin que tú entres corriendo al baño?— bromeó ella, metiéndose en la bañera, siseando cuando sus pies tomaron contacto con el frío piso de mármol.
—¡Gritaste!— dijo él, somnoliento, su voz ronca por el sueño. Se frotó los ojos mientras trataba de despertarse.
—Perdón. Me llegó mi período.
Justin frunció el cejo, suspirando irritado. —¿Eso es todo? Gritaste porque te llego tu maldito período. Pensé que te habías caído o lastimado. Dios, casi me da un infarto. ¿Cuál es el problema en tener tu período?— protestó, metiéndose en la ducha con ___________(tn).
—Qué asco, Justin. Quítate— se quejó ___________(tn), empujando su pecho, momentáneamente teniendo que morderse el labio para no dejar salir un gemido. Amaba como él se sentía bajo sus manos.
—¿Por qué?
—Acabo de decírtelo. Tengo mi período, y tú sólo entras en la ducha conmigo. Es asqueroso
Justin se mofó, enfurruñado. —No me importa. Además, recuerdo que me dijiste cuando éramos más jóvenes que en la ducha, de alguna forma tu flujo se corta. Así que cállate y pásame el jabón. Tengo que ir a trabajar.—
—Oh, porque yo no— discutió ella, pasándole el jabón, haciendo que sonriera. El adoraba cuando ella se irritaba.
—Oh, sí que tienes tu período, Señorita Calzones Malhumorados— rió él, quitándose el jabón.
__________(tn) gruñó y lo empujó a un lado para poder lavarse el pelo.
—Así que, ¿Cual es exactamente el gran problema con Andrés este mes?— preguntó él, pasándole el acondicionador cuando ella se lo pidió.
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Alphabet Weekend JB.
FanfictionADAPTACION. Esta historia NO es mia. Creditos a la autora. Twitter: @CrazyImaginaryW Instagram: CrazyImaginaryWorld94 Snap: Crazyimaginaryw Contacto: emsalazarciw@gmail.c