Un Angel para Navidad (Destiel y Sabriel)

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Holaaa volvi desde las tinieblas(?)
Quiero aclarar que este cap es un dia entero en la vida de cada pareja, por ejemplo el dia de Sam y Gabe ya finalizó pero es el mismo dia que esta viviendo el destiel. Espero que se entienda y que lo disfruten, gracias por tanto amor en sus comentarios❤.

Punto de vista de Sam

Su beso me había sorprendido, a tal punto que tardé varios segundos en darme cuenta de lo que estaba ocurriendo, pero eso no iba a inhibirme así que comencé a  corresponderlo de manera deseosa y desesperada introduciendo mi lengua en su boca para intensificarlo aun mas; cuando la falta de aire se hizo presente nos alejamos y pude notar que nos encontrábamos de la misma manera, sonrojados y con la respiración agitada.

-Gabe...-, susurre mientras tomaba de su mentón para volver a besarle pero un ruido nos interrumpió-
L-Gabriel, tenemos que hablar-, decía una voz familiar mientras golpeaba rápidamente la puerta.
G-Terminamos el trabajo por hoy Sam, puedes irte a casa. Mañana te veo a la misma hora-, indicó seriamente mientras se acomodaba la vestimenta.

Sin decir una palabra tome mis pertenencias y me retire del lugar evitando los comentarios de Lucy el cual parecía molesto por algún motivo. Cuando estuve afuera del edificio decidi ir por un trago al bar de la esquina para poder relajarme.

Punto de vista de Gabriel

Habia vencido mis miedos y pude besar a aquel apuesto sujeto que me tenia enloquecido, cuando sentí su lengua no pude evitar escapar un leve gemido, era mas que obvio que no era el único que lo deseaba de la misma manera y eso me encendía al cien por ciento, cuando nos separamos pude observar un rostro diferente al que Sam suele mostrar ya que denotaba lujuria y sus ojos me encendian, pero fuimos interrumpidos por el posesivo de Lucifer. Cuando Sam se fue me quedé observando por la ventana, no podia creer que ese sujeto tan sexy se hubiese fijado en un viejo como yo.

L-Tierra llamando a Gabriel-, escuche esa voz que me habia interrumpido quitandome de esa hermosa fantasía.
G-¿Cual es tu maldito problema Lucy?-, pregunte furioso, -¿qué es lo que vas a decirme ahora, que no me conviene, que me usa para recibirse de abogado?-.
L-Gabe relájate, no pierdas la cabeza por un niño como el- dijo cerrando la puerta del despacho mientras se acercaba a mi, -¿acaso no ves que quiero protegerte?-, preguntó lucy preocupado.
G-Lucy quiero estar solo- respondí molesto mirando hacia la ventana, observando que Sam se dirigia hacia el bar que estaba en frente.
L -No seas asi conmigo- susurró mientras se acercaba a mi espalda para comenzar a acariciar mis hombros, -si tanto quieres descargar tu tensión sexual podriamos ir a mi apartamento-.
G -Ya hablamos sobre ese tema, fue una noche de alcohol, yo estaba deprimido por que me habian roto el corazón, pensé que ya habiamos superado esto-. Confesé un poco molesto mientras me ponía mi chaqueta.
L -Esta bien, ve tras ese imbecil, pero cuando se reciba y te deje, el que va a estar ahi para escuchar tus llantos voy a ser yo-.
G -Soy un hombre adulto y se como manejarme- contesté mientras salia de mi despacho sin mirarlo a los ojos.
G-Maldita sea, no debi ceder esa noche-, susurre por lo bajo, ¿Y si Lucy tiene razón, y si me estoy apurando?, miles de pensamientos corrian por mi cabeza a tal punto que antes de ingresar al bar decidí fumarme un cigarro.

Punto de vista de Sam

Los nervios me tenian como loco, no solo había besado a mi jefe en mi segundo dia de trabajo, sino que también me habia comportado de manera impulsiva.

S-Quiero un wisky- dije mientras me sentaba en la barra.

-De inmediato guapo-, dijo la bartender que estaba preparando los tragos.

Sin prestarle atención a su halago me puse mis auriculares para poder escuchar música, necesitaba distraerme y poder pensar una forma de controlar mis impulsos, es mi primera vez trabajando con un gran abogado y tengo que aprender a soportar la presión sin estallar.
Las canciones pasaban y no podia quitarme de la cabeza lo ocurrido, asi que decidi pedir un trago más mientras apoyaba mi cabeza sobre mis manos y me dejaba llevar por la frustración de trabajar con la persona que admiro, y que nos hallamos besado.