< 05 - Taehyung >

5.8K 375 120
                                    

Estaba en una óptica, dónde udualmente siempre voy a comprar mis anteojos.

Estaba haciendo una fila muy larga, para ser atendida.

(....)

Después de mucho tiempo, pude ser atendida.

— ¿Cuáles aros desea? — preguntó el trabajador.

— Deme los Gucci, por favor. — hablé, y sorpresivamente, un chico habló y dijo lo mismo al mismo tiempo.

— Hey, yo los pedí primero.— reclamé.

— No, no. Fui yo. — contrataco.

— Mira niño bonito. Esos aros me pertenecen. — dije desafiante.

Él me miró de frente.

— Mira niña bonita, yo los pedí primero. ¿Entiendes? — habló con un semblante serio.

— Ash. Señor. ¿Cuánto serian por los anteojos? — hablé ignorando al niño mimado.

— Serían $1000. — indicó.

— Esperé, ¿No me los dará a mí? Y por sino fuera poco le da prioridad a una extrajera, ¿Qué a un nacional, un nacional idol? — habló. Se quitó su tapabocas. Y miró al trabajador.

— ¡Eres V! De Bangtan. ¡Por Dios.! — habló emocionado el roco ese.

— ¿Lo ves? Tengo más autoridad yo, extranjera.— habló triunfante.

— Me vale madres si eres Uve de Batán. Ni vergas. Deme esos aros, Señor.— ordené.

— Primero, no entendí tú castellano, supongo que era grosero. Pero, él amable señor me dará los aros a mí. Y yo le daré una fotografía y un autógrafo, ¿Verdad, amable sujeto?— preguntó sonriendo.

— No no no. Eso es soborno. Señor, le doy el doble. — ofrecí sacando mi tarjeta de crédito.

— ¿Sabes qué el Won es más caro qué el dólar, no? — su noto sonaba burlón.
Maldito coreano bonito.

— Si si. Cállate. Señor, ¡Usted puede convertir los dólares en Wones! Vamos. Por Dios.— exclamé.

Él trabajador, me miraba a mí y a ese tal uve. A mí y luego a él.

— Lo lamento, señorita.— habló con una reverencia.

Solté un gritó de desesperación.

— ¿Para qué quieres más cosas "Gucci"? ¡Vienes con un bolso, una boina, un abrigo y una corbata! Seas egoísta, puto chino.— lo último lo dije en español.

— A ver, mira quién viene a hablar, ah. ¡Hasta tus zapatillas son Gucci! ¡Egoísta tú! — habló de vuelta.

— ¡¿Qué es tanto el alboroto?!— gritó alguien con tono de furia, saliendo de una oficina.

— Señor, verá. Estos clientes pelean por estos anteojos.— explicó y cuando dijo "Estos" señaló cada cosa respectiva.

— No les venderá nada. Han causado mucho alboroto en mi tienda. Fuera.— ordenó, señalando la salida.

Los demás clientes, veían expectantes.

— Señor, le puedo dar una foto o un auto..— iba a sobornar nuevamente el chico ese.

— No me gusta el kpop, mocoso. Largo.— espetó.

— ¡Ja!— dije y me reí de él.— ¿Cuánto sería por ..? — iba a hablar pero me interrumpió.

— No me agradan los extranjeros. Largo.— habló.

— ¡Ja! — rió ahora el.

Yo abrí la boca en forma de resentimiento. Y cruce mis brazos.

No fue el momento cuando sentí una presión en el brazo, y acto seguido, estaba afuera de la tienda, junto al chino ese.

— ¡Lo qué causaste! — le acuse.

Él me miró con resentimiento.

— Fue tú culpa, extranjera.— habló mirando su celular.

— Aish. ¿Ahora dónde consigo anteojos Gucci? Ah.— hablé consigo misma.

— Bueno, conozco una tienda qué vende, y vende más de un par.— habló sonriendo un poco.

— ¿Vamos? — dije yo.

Él asintió.

— Por cierto, me llamó Taehyung.— se presentó.

— ______.— hablé yo.

Tal vez el chino bonito, no es tan desagradable..

[BTS ONE-SHOTS 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora