Cartas de una soñadora

Ángel.

El deceso al infierno es mas fácil en compañía de un ángel.

Pequeño ángel que te encuentras escondido detrás de tus alas rotas, encerrado en un mundo desconocido para ti, crees no hallar la salida, has perdido la confianza en la vida, tienes heridas en el cuerpo que parecen haber sanado pero que aun con el tiempo siguen doliendo...

Mi pequeño, los demonios han destruido todo de ti... Tu voluntad esta rota y ya no te importa el daño que sufras pues tu mismo te lo causas, crees que la vida no vale nada, todo lo ves en tonalidades grises pero no notas que tu eres la luz que ilumina los rincones a donde llegas, tu belleza es tal que con tu paso por el mundo es imposible que alguien no te note.

Tus ojos han sido vendados,  te ha aislado de mundo donde caíste, no comprendes lo que sucede a tu alrededor, te han lastimado tanto que llevas cicatrices en tu bello cuerpo, ha dejado de importarte tanto la vida que incluso te dañas a ti mismo para acabar con tu sufriendo.

Créeme, aun con tus alas rotas eres hermoso, y los tormentos que vives ahora pasaran, encontraras la persona que te salvara que pondrá banditas en tus heridas, tomara todas la piezas rotas y las unirá.

Todo a tu alrededor lo ves gris, no te das cuenta que tu eres la luz que ilumina todo a su alrededor, anda sonríe que el mundo a tu alrededor no te afecte pero que aun así que no te deje de importar, marca tu nuevo sendero y vive siendo feliz, sin olvidar que la vida puede ser oscura y difícil pero que solo nosotros podemos plantarnos frente a ella y decir hasta donde vamos a sufrir.

Se feliz