10 - Parte 2 (FINAL)

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Cuando todos pudieron abrir los ojos ya no se encontraban en la casa. Ni siquiera estaban juntos. Un vistazo alrededor y Yoongi pudo notar que estaban en su salón de la escuela, pero se veía diferente, como una dimensión alterna. Por las ventanas, el cielo se veía como solían verse los rollos de fotos en negativos; azul oscuro con distorsionadas figuras en blanco, de nubes y aves congeladas en pleno vuelo. A su alrededor podía sentir un aura de peligro. Jimin estaba con él, asi que esperaba que Jungkook y Taehyung no se hubieran separado.

– Yoongi... – murmuró Jimin acercándose a él. El aludido estuvo a punto de reprocharle el haber insistido en meterse en la casa, pero decidió que no era momento.

– Vamos, busquemos a los demás – intentó calmarlo y se animó a llevarlo de la mano.

– Esto es malo – murmuró Taehyung caminando a paso rápido con Jungkook.

– ¿Por qué nos trajo a la escuela?

– Porque aqui esta su fuente de poder: el pentagrama en la azotea. Esto es muy malo, debo ir a destruirlo antes que nos encuentre y nos ataque – explicó y Jungkook comenzó a volar a su lado para seguirle el paso, pero una presencia a sus espaldas hizo que ambos se detuvieran en su lugar – Es él...

– Tae...

– Jungkook, vuela lejos – murmuró dando la vuelta, enfrentando a la entidad maligna. El chico hizo lo que le dijo y comenzó a volar por el pasillos de la escuela, pero de manera imprevista cayó al suelo como peso muerto.

– No puedo volar... – murmuró y apretó fuertemente sus ojos intentando perder su forma solida – ¡Y tampoco puedo atravesar el suelo!

– ¡Entonces corre lejos!

Taehyung usó su magia para crear una barrera cuando el padre de Jungkook arremetió contra él. Mientras tanto, el joven fantasma comenzó a correr perdiéndose en una curva del pasillo.

Empezó una especie de combate cuerpo a cuerpo, pero Taehyung se defendía con su magia blanca mientras el hombre intentaba alcanzarlo para atraparlo y quien sabe que haría despues en su contra. El chico apoyó una mano en la frente del fantasma impulsandolo hacia atrás y comenzó a correr en busca de su tío, sin descuidar su espalda.

Jungkook llegó al piso de abajo y siguió corriendo, pero el fantasma volvió a interponerse en su camino atravesando el suelo desde el piso superior y su hijo cayó sentado.

– Padre... – apenas murmuró, pero el hombre no podía contestar. Era el castigo que recibió en el infierno por su ira.

«Con el llorar y con el luto quédate, espíritu maldito» – exclamó apareciendo Taehyung disparando un hechizo en color blanco que lo hizo desaparecer al menos temporalmente, volviendose un montón de humo.

Se acercó a Jungkook ayudándolo a ponerse de pie y lo tomó por los hombros mirandolo a los ojos.

– Escuchame Jungkook – habló seriamente –, por si no te has dado cuenta, que sea tu padre no lo detendrá. No lo detuvo en vida y menos ahora que esta bajo el poder de Hye. Si lo ves, huye tan lejos como puedas en tu forma actual – comenzó a caminar volviendo al lugar del que vinieron. Debían ir a la azotea para acabar con todo –. La magia del lugar debe haber anulado tu habilidad de ser intangible.

– Lo siento...

– No te preocupes, pero ten cuidado.

La escuela se había convertido en un laberinto. Yoongi y Jimin habían pasado varios minutos dando vueltas solo para darse cuenta de que seguían volviendo al mismo punto. Ella debía estar jugando con sus mentes.

Spiritual Adviser || BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora