Como Noche y Día

✴22✴

*** Narra Ivan ***

Dorothy estaba inconsolable, había visto al miserable de Nathan y a la hipocrita de Wendy juntos. 

-Vamos a tu casa, ya es tarde y tienes que descansar -le digo mientras acaricio su espalda para tratar de consolarla un poco

-No quiero

-No te puedes quedar aquí

-Si puedo

-No, no debes de quedarte, vamos 

-No quiero caminar 

-Eso lo arreglo

La vuelvo a cargar y la llevo hasta el auto. Cierro su puerta, rodeo por enfrente del auto y me subo frente al volante. Arranco.

-¿Qué vas a querer a cambio de este favor?

-Los favores no se hacen para recibir algo a cambio 

-Pero nada es gratis en esta vida, tarde o temprano me lo echaras en la cara 

-Estás equivocada, no te cobrare ni te echare en cara nada

-¿Puedo dormirme?

-Si, el camino es largo 

Veo que se acurruca en el asiento y poco a poco se queda dormida. 

Comenzamos a llegar a cuidad y Dorothy despierta, se talla sus ojos y mira en donde estamos 

-¿Me llevaras a mi casa?

-Si

-Pero no sabes donde es 

-Pues si me lo dices es mejor 

-Pero no quiero ir a mi casa, esta Ruth y no quiero lidiar con ella, además comenzara a molestarme por verme contigo

-¿Y eso?

-Ya viste la hora que es 

Tiene razón puede malinterpretarse y no solo Ruth, también sus padres.

-¿Entonces? -le pregunto 

-Llévame a un bar, quiero olvidar tomando 

-¿Qué? -le digo con el ceño fruncido -Claro que no, una chica decente como tú no irá a ningún lado a tomar por un estúpido que no vale la pena 

-Pero yo lo amaba -dice queriendo llorar 

-Pero él no te merece 

-Mis padres no están en casa, creo que no se me ocurre un mejor lugar, espero que Ruth este en el quinto sueño

Me da la dirección y manejo hasta ahí, estaciono el auto en un portón enorme, realmente enorme 

-¿Es aquí?

-Si -me dice 

-Bueno, trata de descansar, mañana nos vemos 

-Si 

-Dorothy prométeme que no cometerás alguna locura -le digo serio

-No y no te preocupes, ya hiciste suficiente -me da una sonrisa -Te subestime muy mal 

-Bueno ya somos dos 

-Apuesto a que aún no cambian las etiquetas que me has puesto 

Se baja del auto sin decir más, veo hasta que entra a su casa, arranco y voy hasta mi casa. 

Estaciono el auto fuera de mi casa. Bajo y con todo el silencio del mundo subo hasta mi recamara. Me desvisto y me acuesto en la cama

-¿Donde estabas?